A 53 días del proceso de captación de firmas, el aún gobernador de Nuevo León había acreditado un total de 707 mil 601 firmas, es decir, el 81.7% de las que exige la ley para acceder a la candidatura.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Viernes 8 de diciembre de 2017
La marcada ventaja de Jaime Rodríguez Calderón "El Bronco" en la obtención de firmas para el registro de su candidatura como "independiente" para contender en las elecciones presidenciales de 2018 se ha consolidado, con el 81.7% de rúbricas, según informó el Instituto Nacional Electoral (INE) la mañana de este jueves.
Leer: ’El Bronco’ aventaja en firmas a independientes rumbo a 2018
A 53 días del proceso de captación de firmas, el aún gobernador de Nuevo León había acreditado un total de 707 mil 601 firmas, es decir, el 81.7% de las que exige la ley para acceder a la candidatura.
Margarita Zavala se mantiene en segundo lugar con poco más de la mitad de las firmas que lleva "El Bronco". El tercer puesto lo ocupa Armando Ríos Piter, con apenas el 24.4% de lo requerido por las autoridades electorales.
Este "priísta confeso" está por sortear los restrictivos requisitos del INE y se perfila ya para ser uno de quienes contienda por la silla presidencial en los próximos comicios. Su campaña ha generado controversia, pues a mitad del proceso de obtención de simpatías, ha trascendido que, junto a empresas como Cuauhtémoc Moctezuma y Cemex, pagó 30 millones de pesos a Televisa para abrir la señal de TV del partido de futbol de vuelta entre Tigres y Rayados, que se disputará el domingo próximo. Esto después de haber protagonizado un desencuentro con la televisora y haber asegurado que no les pagaría "ni un peso". El erario nuevoleonés pagó la mitad de esta suma.
La "mano dura" con la que prometió gobernar Nuevo León y los escándalos en los que se ha visto envuelto, entre ellos el de su propia "casita blanca" (un inmueble con valor de más de 4.5 millones de pesos), le preceden y son un recuerdo no sólo de sus orígenes en el PRI, sino una advertencia sobre los intereses que aún continúa representando, por más que no se presente a elecciones investido con los colores de algún partido del régimen.