El futuro ministro del Interior, Rogelio Frigerio, anunció que el próximo gobierno avanzará en la emisión de un nuevo billete de 500 pesos en el que, expresó, le gustaría que esté la figura del ex presidente Arturo Frondizi.
Viernes 27 de noviembre de 2015
El futuro ministro del Interior, Rogelio Frigerio, adelantó ayer que el próximo gobierno avanzará en la emisión de un nuevo billete de 500 pesos en el que, expresó, le gustaría que esté la figura del ex presidente Arturo Frondizi.
El titular del Banco Ciudad advirtió que su implementación está sujeta al tiempo que tarden en conseguir papel y en los plazos de impresión, pero destacó que si tuvieran estas certezas lo sacarían en enero. “Soy proclive a tener un billete de 500, y si tiene la figura de Arturo Frondizi, mucho mejor”, sentenció el funcionario porteño, cuyo abuelo y homónimo fue el fundador del desarrollismo junto al ex presidente.
Frigerio remarcó que “todo hace a la lógica de tener un nuevo billete”, en función de la inflación acumulada desde el lanzamiento del billete de cien pesos y los problemas de logística que derivan del transporte de caudales y el abastecimiento de cajeros automáticos.
La administración kirchnerista se negó sistemáticamente durante todo su ciclo a avanzar en la emisión de un billete de mayor denominación al de 100 pesos, a pesar de que la cantidad de esos billetes en circulación triplica por sí sola a todas las restantes denominaciones sumadas. La cantidad de billetes de 100 pesos en circulación supera las 3.800 millones de unidades, en tanto los billetes de 2, 5, 10, 20 y 50 pesos no superan los 1.250 millones.
Si bien en las declaraciones públicas los funcionarios consultados manifestaban que "no era necesario", para los críticos la razón primaria era no convalidar la existencia de una alta tasa de inflación. Para establecer una medida del deterioro del poder de compra y de eficiencia del billete de 100 pesos cabe marcar que en 2003 con 100 pesos podían adquirirse unos 20 kilos de asado (a un precio promedio de $ 5), mientras que en 2015 apenas se puede comprar algo más de un kilo.
Aunque rechazó la posibilidad de confeccionar billetes de mayor rango, el Gobierno de Cristina Fernández lanzó series diferenciadas de papeles de 50 pesos, en este caso con imagen alusiva a las Islas Malvinas, y de los de 100 pesos, con un homenaje a Eva Duarte de Perón.
Entre las razones básicas que se esgrimían para el pedido de otro billete aparecía las complicaciones para hacer operaciones de altas sumas y principalmente el manejo del dinero por cajeros automáticos.
Estas máquinas no estaban preparadas para poder almacenar la cantidad de billetes necesarios para satisfacer la demanda del público que mes a mes accedía a mayores montos mínimos de extracción dada la alta inflación y los aumentos salariales.