Como en la dictadura. El Gobierno de Santa Fe militariza la planta de SanCor

En la provincia de Santa Fe que produce a diario titulares por la violencia narcocriminal, el gobernador Pullaro envió a las fuerzas represivas contra los trabajadores lácteos de la empresa SanCor para garantizar la producción y derrotar el reclamo de los trabajadores que lleva ya varios meses. Es un alineamiento en los hechos con el Protocolo anti protestas de Patricia Bullrich y la política del gobierno de Milei.

El despliegue represivo en el interior de la planta es un ataque al derecho a huelga y un antecedente muy peligroso que hay que rechazar. La Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera (Atilra) alertó que los aprietes ocurren “con armas de fuego y fuerzas policiales sin identificación, desplazándose entre los compañeros con actitud desafiante y provocativa, buscando la reacción que justifique la represión”.

"La planta de SanCor en Sunchales quedó literalmente militarizada por fuerzas policiales y parapoliciales que llegaron para reprimir la protesta de sus trabajadores que reclaman el pago de sus haberes y los aportes jubilatorios", denunció el cuerpo de delegados durante el día viernes. Los trabajadores señalan también que el Ministro de Trabajo de la provincia Roald Báscolo "hizo la vista gorda al no aplicar sanción alguna a la Cooperativa, infractora por la falta de pago de haberes y los aportes correspondientes".

El conflicto lleva largo tiempo. Luego de una reestructuración, la empresa adeuda a los trabajadores salarios y el pago de los aportes jubilatorios. Hace cuatro meses, al mismo tiempo que crecen los números de la pobreza y el hambre, la empresa fue noticia por tirar 100 mil litros de leche como medida extorsiva a los trabajadores. Mientras millones pasan hambre el gobierno ampara a los empresarios poniendo a las fuerzas represivas para derrotar a los trabajadores.

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La patronal de SanCor tiene tradición represiva: “durante la dictadura militar todos los compañeros de la industria láctea desaparecidos se desempeñaban en SanCor. No es casualidad”, expresaron desde el gremio ATILRA.

Desde la CTA Autónoma denunciaron el operativo policial: “nuestra Central rechaza la injerencia de las fuerzas de seguridad en los lugares de trabajo, más aún en este caso, en que se utiliza para defender los intereses de una patronal que está incumpliendo con el derecho laboral más básico: el pago en tiempo y forma de los salarios de los trabajadores”.

La Federación Aceitera denunciaron también “la presencia de la policía dentro de la planta de Sancor Sunchales para imposibilitar el ejercicio del derecho de huelga -una metodología de la última dictadura- (que) fue ordenada por Maximiliano Pullaro, gobernador de Santa Fe”.

Octavio Crivaro, dirigente del PTS en el Frente de Izquierda denunció el alineamiento del gobierno provincial con el “protocolo anti protestas” del gobierno nacional: “Pullaro se alinea con Bullrich: el despliegue represivo en el interior de la planta de SanCor es un ataque al derecho a la huelga y un antecedente muy peligroso que hay que rechazar. Basta de ataques de la empresa y de represión servil del gobierno”.

Pullaro se alinea con Bullrich: el despliegue represivo en el interior de la planta de Sancor es un ataque al derecho a la huelga y un antecedente muy peligroso que hay que rechazar. Basta de ataques de la empresa y de represión servil del gobierno. pic.twitter.com/Azt7pUUlB9

— Octavio Crivaro (@OctavioCrivaro) February 24, 2024