Chubut. El gobierno redobla sus ataques a la docencia: preparemos el paro del 24.

Diciembre dejó uno de los índices inflacionarios más altos de las últimas décadas. Hablamos de un 25,5% solo en el mes de diciembre lo que configuró un acumulado del 211,4% en el 2023. Para encontrar números similares nos tenemos que remontar tres décadas atrás, entre los gobiernos de Menem y Alfonsín, en la hiperinflación.

Pero la cosa no queda ahí. La Argentina se instaló como el país con la inflación más alta del continente, desplazando a Venezuela al segundo lugar y, a nivel mundial, también estaría ocupando el segundo lugar solo superada por el Líbano.

Solo basta con ir a comprar alimentos, medicación, alquilar, entre otras cuestiones básicas para vivir, para ver que la inflación nos castiga el bolsillo a las y los trabajadores y mayorías populares.

En este marco, se celebró la primera mesa paritaria del año. Torres, el gobernador de Chubut, que en campaña electoral había prometido recomposición del salario docente y "con los jubilados no", propuso por medio de su ministro de educación José Luis Punta, un aumento del 30% en tres cuotas de 10% en enero, 10% febrero y 10% en marzo. Una propuesta de hambre. Una propuesta que además alimenta la ya grave situación de miles de jubiladas y jubilados.

La mesa contó con irregularidades según denuncian SADOP y ATECh. SADOP no fue convocado a la misma y señalaron la presencia de ATE y UPCN, gremios que desde siempre sostuvieron sus propios espacios paritarios además de no ser representativos de la docencia. En las actas es posible leer que tanto ATE como UPCN no tienen rodeos en aceptar la extorsiva ley de profesionalidad docente y los otros sindicatos, no expresan lo contrario.

Sin lograr acuerdo sumado a que SADOP y ATECH no participaron de la mesa, la reunión cerró con una nueva convocatoria para el 25 de enero y con la unanimidad en cargar la primera cuota del 10% en enero tomando como base el salario de diciembre.

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Es ahora que las y los docentes debemos retomar la organización

A poco de asumir, el gobierno nacional de Milei anunció por medio de Caputo una serie de ataques que buscan que los trabajadores y grandes mayorías, sigamos pagando los platos rotos. Luego el DNU y la Ley Ómnibus profundizaron este camino. Desde diciembre, recorren el país asambleas y movilizaciones, que dejan en claro que al DNU y la Ley Ómnibus se les dice no. Enero, lejos de menguar, mostró que no hay vacaciones posibles con estos ataques en pie.

Por eso se han celebrado en distintas localidades como Lago Puelo, El Hoyo, Trelew, Puerto Madryn, Comodoro Rivadavia, Dolavon, importantes asambleas y movilizaciones. Recientemente en Playa Unión fueron cientos quienes se organizaron por medio del arte y la cultura para rechazar los ataques y hay una nueva jornada cultural contra el DNU este 19 de enero en la localidad de Trelew.

En Chubut, Torres quiere hacer pasar que las y los docentes somos responsables de la ausencia de clases y de la "baja calidad" educativa. La ley de profesionalidad docente y sus fundamentos, son ejemplo de ello. Pero lo que esconde Torres es que la fuerza de la cual proviene votó, todos estos años, las leyes de presupuestos a la baja, endeudamientos, congelamientos salariales que quería Arcioni. Además, sin titubeos el gobernador salió a dejar en claro que "banca el 90% del DNU de Milei". Por eso, el gobierno es responsable.

Por todo esto que viene pasando, las y los docentes no podemos quedar al margen de las distintas convocatorias que se están desarrollando. Es nuestra responsabilidad sumarnos para comentar en qué situación se encuentran las escuelas y la Educación tras años de vaciamiento, y aportar a la organización contra el DNU y la Ley Ómnibus que vienen por todo. Desde ya, debemos comenzar el debate y a organizar nuestra participación en la realidad que nos golpea.

Muchos venimos participando activamente de las convocatorias de diciembre y enero, donde hemos visto esporádicamente a las conducciones sindicales, aparecer testimonialmente pero sin proponer instancias para deliberar sobre los gravísimos alcances del DNU, la Ley Ómnibus, la profesionalidad docente y la propuesta salarial del gobierno. Por eso, exigimos que llamen a asambleas abiertas para deliberar, votar y organizar nuestra ofensiva al plan de guerra que ya nos han declarado Milei y Torres, para preparar la confluencia con las asambleas autoconvocadas de vecinos, las asambleas ambientales, los pueblos originarios, de derechos humanos, artistas, entre otras.

Que las y los docentes no hayamos sido convocados aún a espacios y asambleas para intercambiar sobre el paro nacional del 24 de enero, es un anuncio de que las conducciones no se jugarán a organizarlo plenamente: no podemos confiar en ellas. Por eso, invitamos a nuestros compañeros y compañeras docentes a exigir asambleas inmediatas y tomar este paro para hacerlo verdaderamente activo. Para converger en las calles este 24, de forma independiente junto con las asambleas autoconvocadas exigiendo el inicio de un plan de lucha contra el plan de guerra de Milei y Torres contra los trabajadores.