A tono con las declaraciones del Gobierno Nacional y municipal, la directora médica de la Clínica Chacabuco intentó inculpar a los trabajadores por el aumento de casos de Covid-19. La falta de responsabilidad individual y "el relajamiento fuera de la institución" serían las causas. Las y los enfermeros responden con la denuncia de las pésimas condiciones laborales en la primera línea.
Miércoles 9 de septiembre de 2020 12:56
La Clínica Chacabuco de Tandil tiene una larga historia, nació en 1955 como iniciativa de la Sociedad Italiana de Socorros que en aquel momento contaba con 1200 afiliados. En 1988 las dificultades económicas llevaron a que se produzca la intervención por parte del Instituto Nacional de Acción Mutual. Luego de diversos problemas económicos y judiciales la clínica reabrió sus puertas en 1998. Hoy constituye uno de los tres centros asistenciales con internación en la ciudad.
Días atrás, los medios locales informaron que la Clínica decidió cerrar en forma transitoria el segundo piso completo, donde se ubican las habitaciones de internación general, debido a la confirmación de 15 casos positivos de Covid-19 en el personal de enfermería.
La directora de la Clínica, Florencia Bruggesser declaró que suponía que los contagios tuvieron lugar en las afueras de la clínica, por contacto entre los trabajadores y agregó que quizás el relajamiento fuera de la institución pudo ser el origen del contagio.
Ante esta situación, el personal de Enfermería de la Nueva Clínica Chacabuco hizo público un comunicado en el que expresaron su malestar y denunciaron las condiciones laborales en la primera línea: "El contacto que demanda nuestra profesión hacia el paciente es de tiempo completo, la infraestructura edilicia no es la recomendada, el personal es insuficiente, y los equipos de protección son escasos y de mala calidad”.
En el mismo sentido, agregaron, "la rotación de los pacientes con Covid-19 por distintos sectores es frecuente, así como lo es la rotación de personal prácticamente por todos los sectores, además la recepción de pacientes de ciudades de riesgo (se realiza) sin hisopado previo y los cambios son continuos en los protocolos laborales”.
Desde Enfermeros Autoconvocados de Tandil apoyaron a los trabajadores de la Clínica Chacabuco y a través de un comunicado también denunciaron la situación que se vive en toda la localidad. Aseguraron que el número de profesionales es limitado y que es alto el contacto que demanda la atención a los pacientes, también denunciaron las malas condiciones laborales, entre ellas bajos sueldos, que los obliga a tener más de un empleo en diversas instituciones.
"La alta rotación de personal conlleva a un enorme desgaste físico y mental, muchos deben desarrollar tareas fuera de su especialidad y hay una relación menor de enfermeros por pacientes de lo que recomienda la OMS", denunciaron.
"Estamos al borde del colapso, contamos con menos profesionales y menos camas operativas disponibles, no sabemos hasta cuando se podrá sostener esta situación", finalizaron. En este momento la localidad tiene 166 casos activos de Covid-19, y fallecieron 2 personas.
Por su parte gobierno municipal de Miguel Ángel Lunghi (UCR) declaró por medio de un Decreto Municipal un nuevo sistema de administración de la cuarentena, distinto al determinado por el gobierno nacional. Según informó por redes sociales "el nuevo sistema establece un modelo propio" que "ha sido concensuado con los principales representantes de la comunidad". La metodología del "semáforo" (usarán colores para determinar la flexibilidad del aislamiento) responde más a la presión de sectores empresariales locales que a las necesidades de la población.
Mientras que desde las diferentes alas del arco político y desde los diferentes gobiernos (local, provincial y nacional) se sigue responsabilizando a los trabajadores y ciudadanos por el avance del Covid-19, los empresarios siguen buscando cómo obtener mayores beneficios en una provincia que concentra el 55% de los pobres del país.
La referente del PTS en el Frente De Izquierda de Tandil, Bethania Nicora sostuvo "hoy se dictaminó que el rojo será el estadio de Tandil por una semana, es decir que se reducirá al mínimo la movilidad y la circulación en la ciudad, en este sentido, es primordial que se dictamine la protección y el aumento de salarios para todos, un salario de cuarentena para los trabajadores no esenciales y mejoras salariales para los trabajadores de salud , además de que se otorguen los elementos de protección y prevención correspondientes".
En Tandil, como en resto de la Provincia, la pandemia se enfrentó con un sistema sanitario deficiente, que se fue degradando gobierno tras gobierno, con presupuestos que cada vez más bajos, llegando a un pico del 5,5 por ciento en el gobierno de María Eugenia Vidal. Esta situación no mejoró en los últimos meses.
En ese sentido, Bethania finalizó: "Es necesario centralizar todo el sistema de salud, unir el sector público con el privado, poner todos los recursos bajo la órbita estatal del gobierno de la Provincia y que sea controlado por sus propios trabajadores y por la población. Es necesario tomar medidas urgentes para enfrentar esta situación, para que la crisis no la paguen los trabajadores".