En la audiencia pública las distribuidoras del AMBA afirmaron que la factura promedio sería de $7.600 por mes y solicitaron que se aplique un índice de actualización automático de forma mensual lo que implicaría un fuerte aumento en el año. Un regalo para las privatizadas y otro golpe al bolsillo.
Viernes 26 de enero 19:50
Este viernes se realizó la audiencia pública para avanzar con los aumentos de la electricidad. La Secretaría de Energía espera que los usuarios pasen de pagar el 45% del costo de la generación eléctrica al 100%, aunque no dieron detalles sobre en qué plazos se realizará. Otro regalo para las privatizadas que ofrecen un servicio de mala calidad y un golpe al bolsillo del pueblo trabajador.
Las distribuidoras del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), Edenor y Edesur señalaron que las facturas costarían en promedio $7.600 por mes. Desde abril empezará a regir un nuevo esquema de subsidios que recortará el universo de beneficiarios.
Además, las distribuidoras eléctricas pidieron que la tarifa se ajuste de manera mensual y de forma automática, un beneficio que no tienen los salarios, las jubilaciones ni los programas sociales, que pierden mes a mes con la elevada inflación. Un aumento mensual también implicará una fuerte suba de las facturas en el año por la escalada de precios en caso que se conceda a las privatizadas un ajuste mensual.
Guido Hernández, subgerente de Planeamiento de Edenor, detalló que los usuarios del Nivel 1 (mayores ingresos) que en la actualidad pagan una tarifa de $ 7.018, pagarán $ 10.299. Los usuarios del Nivel 2 (menores ingresos) que pagan $ 2.570 abonarán $ 6.341. En tanto, para los usuarios del Nivel 3 (ingresos medios) la factura ascendería a $ 7.214 cuando ahora es de $ 3.161, en promedio.
La reducción de subsidios es una medida que exige hace tiempo el FMI y el gobierno de Milei cumple. También el gobierno del Frente de Todos avanzó en la segmentación para ir disminuyendo subsidios para cumplir con el Fondo.
Los servicios públicos tienen que dejar de ser un negocio porque son un derecho esencial del pueblo trabajador. Basta del negocio de las privatizadas. Los servicios de electricidad y gas deberían ser nacionalizados en todas sus etapas (producción, transporte y distribución) bajo gestión de los trabajadores y con control de usuarios populares para brindar un servicio de calidad, sin cortes.
La izquierda propone la nacionalización de los servicios públicos bajo el control de los trabajadores y especialistas interesados en desarrollar verdaderamente planes en función de satisfacer los intereses de las necesidades populares.
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