Se trata de una enmienda constitucional, que en la Carta Magna estipula que "la madre es mujer, el padre es varón". Una ley homofóbica, que va a contramano de los reclamos de las políticas inclusivas.
Martes 15 de diciembre de 2020 16:50
El Parlamento de Hungría aprobó este martes una enmienda constitucional promovida por el Gobierno ultraconservador del primer ministro Viktor Orbán que impide a las parejas homosexuales adoptar niños. La modificación de la ley ha sido adoptada con 143 votos a favor de los diputados del Fidesz -el partido del primer ministro-, 45 en contra y 5 abstenciones, informó la agencia local MTI.
El colectivo LGBTQ y partidos de la oposición expresaron su rechazo desde que se conoció que el Ministerio de Justicia, hace un mes atrás, había comenzado la tramitación de este proyecto de ley, que ha sido finalmente aprobado en la cámara en Budapest.
Finalmente la ley establece que sólo los matrimonios heterosexuales pueden adoptar niños. La Constitución impulsada por Orbán, que modificó en 2011, si bien define el matrimonio como la unión de una mujer y un hombre, por lo que los homosexuales en Hungría no pueden casarse, no prohibía que solteras y solteros pudieran adoptar. Lo cual permitía que las personas LGTBQ pudieran acceder a la adopción, con la solicitud sólo de un miembro de la pareja.
El texto de la ley establece, además, que el sexo esta indicado solo por lo genital, con lo cual la personas transgénero queda sin posibilidades de pelear por su derecho a defender su identidad de género, más allá de la determinación biológica.
“Hungría protege el derecho de los niños a identificarse sobre la base de su sexo”, dice el texto, que especifica que “la educación se imparte de acuerdo con los valores basados en la identidad constitucional y la cultura cristiana de Hungría”.
Comunidades LGBTQ de Hungría han dicho que las propuestas del Gobierno implican nuevas limitaciones a sus derechos y una mayor discriminación.
Por su parte, Amnistía Internacional denunció este lunes, en víspera de la aprobación en Diputados, de que las medidas son “discriminatorias, homofóbicas y transfóbicas”, constituyen un nuevo ataque del Gobierno ultraconservador de este país centroeuropeo a los ciudadanos LGTBQ.
