Rock argentino y dictadura en ilustraciones por el trabajador Edgardo Videla.
Miércoles 23 de marzo de 2022 17:09
El 24 de marzo de 1976, a las 3.15 de la madrugada, Las Fuerzas Armadas de Argentina ingresaban a la Casa Rosada para tomar el gobierno del país mediante un golpe cívico militar eclesiástica.
El proyecto de control de la dictadura no solo incluía la persecución tortura y desaparición de personas y un ataque directo a la clase trabajadora; también se recortó el arte con mecanismo de censura a las obras y listas negras a los artistas.
Muchos músicos del rock nacional debieron exiliarse, y muchos se quedaron, logrando crear, sin proponérselo, un espacio de resistencia entre algunos jóvenes unidos por la poesía de las canciones que lograban burlar a la censura, pero también rememorando canciones del pasado que abordaban temas como la represión, o la lucha contra el autoritarismo. Caído el régimen, después de seis años, el rock necesitó también hacer una catarsis, y brindó canciones que se convirtieron en emblemas de aquellas generaciones, y una especie de ayuda memoria sobre la realidad de aquellos años.
Como trabajador socialista, fanático del rock, y con un paso por la Facultad de Arte de la UNCuyo, necesitaba tomar estos elementos para realizar mi propia catarsis de esa época dura, y expresarla a través de ilustraciones inspiradas en las canciones que nos daban fuerzas y esperanzas, y que debíamos escuchar casi en la clandestinidad. En lo personal, el mensaje me llegó de la mano de las antiguas canciones de Miguel Cantilo, en Pedro y Pablo, uno de los grupos que nunca pudo trabajar en dictadura. Luego fue León Gieco, quien había comenzado a sufrir persecuciones a manos de la organización paraestatal de Perón y López Rega, Triple A, (Alianza Anticomunista Argentina), y luego fue amenazado y censurado por el Gobierno de Jorge Rafael Videla. Y por último, la lírica de Charly García que comprendió muy rápido como esquivar, con sus metáforas, los recortes de la dictadura, y seguir conectando con la juventud.
Los perros homicidas
Una canción que Miguel Cantilo escribió cuando se alzaba el clima del Cordobazo, y se debilitada el Gobierno de Onganía hacia fines de la década del 60. La letra está dirigida a la policía, a quien se la llamaba “los perros”, por sus ataques constantes a la juventud, sobre todo a los estudiantes. “Uno ya no puede estar tranquilo, ni seguro de su integridad, andan sueltos y te comen vivo, con la excusa de ganarse el pan...” comenzaba la canción, editada en el álbum debut de Pedro y Pablo; “La Marcha de la Bronca”(1970)
El señor tijeras
Miguel Paulino Tato asumió como director del Ente de Calificación Cinematográfica en agosto de 1974, y duró en el cargo hasta 1980. Su trabajo consistía en cercenar las producciones cinematográficas, cortando todo contenido que no fuera aprobado por la idea de arte de la dictadura. En 1074, con la Triple A persiguiendo a toda persona que expresara la más mínima idea de izquierda, Sui Generis grababa su tercer álbum “Pequeñas anécdotas sobre las Instituciones”, que sufrió una censura integral en sus canciones, y así en su concepto. A pesar de ello, “Las Increíbles aventuras del Sr. Tijeras” que hablaba de Tato, llegó a transmitir su mensaje.
Apremios ilegales
“Conesa” fue el segundo álbum de Pedro y Pablo, lanzado en 1972, volcados a una faceta más eléctrica, el disco toma el nombre de una casa en la calle Conesa en donde vivían en comunidad. En Argentina, a partir de 1969, se produjo el aumento de la actividad represiva del Estado, que comprendió detenciones masivas y la represalia de diversas manifestaciones populares. Las detenciones comenzaron a incluir torturas, y Cantilo, tomó la figura legal de los “Apremios Ilegales” para retratar el espanto. Lamentablemente, la sangrienta dictadura de 1976, le dio mayor dimensión a la canción.
Catalina Bahía
Una hermosa historia de amor, basada en una relación de Miguel Cantilo, que encontró la censura por sus alusiones geográficas a la genitalidad. La canción era un anticipo de “Conesa”, y vio prohibida su difusión en las radios.
Padre Francisco
El tema que abría el álbum, estaba basado en el Movimiento de curas tercermundistas que se dio como fenómeno en Latinoamérica. Con un ojo puesto en el Padre Mujica, a quien la banda había conocido por organizar festivales en las villas. Mujica fue ultimado a balazos por la Triple A, en mayo de 1974.
Esos ojos negros
Una reflexión sobre el mundial Argentina 78, que León Gieco grabaría en 1985, como parte de su trabajo “De La Quiaca a Ushuaia”. Recuerda como los gritos de la tortura eran tapados por los gritos de gol, y como, mientras parte del pueblo festejaba un campeonato de fútbol, el régimen militar torturaba y desaparecía personas.
Canción de Alicia en el País
Inspirado por el clásico de Lewis Carrol, Charly García construye una canción en donde cada metáfora identifica a un personaje de nuestra historia, desde Onganía (La Morsa), Illia (La Tortuga), López Rega (Los Brujos), hasta Videla (El Rey de Espadas). La virtud de esta canción es que habló directamente al público, en un idioma que la censura no pudo entender. Se lanzó en 1980, en el disco de Seru Girán, “Bicicleta”, en un momento en el que plan económico de la Dictadura hacía aguas, y el pueblo comenzaba a manifestarse en las calles.
Los Dinosaurios
Cuando aparece “Clics Modernos” de Charly García solista, en 1982, la Dictadura había perdido la Guerra Malvinas y llamó a elecciones democráticas. Hubo una oleada de aire fresco y el rock se renovó, tanto en su sonido como en su temática, pero la memoria del saldo que dejaba la dictadura estaba reflejado en “Los Dinosaurios”. Expresa la fragilidad de la vida ante un poder tirano e inmenso como el de los Militares en el gobierno. Un homenaje a 30.000 desaparecidos a manos de los arcaicos dinosaurios, que finalmente estaban también, por desaparecer.