Entre otros temas, el mandatario también habló sobre la toma de protesta del nuevo presidente de Guatemala y sobre la sequía en el Valle de México.
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Lunes 15 de enero
En la conferencia matutina de este lunes, el presidente López Obrador se refirió a la iniciativa de reforma laboral que tiene previsto enviar al Congreso, uno de cuyos propósitos es que no vuelva a suceder que el salario mínimo aumente menos que la inflación y que ese criterio se eleve a rango constitucional, en el artículo 123.
Al respecto, aunque los aumentos al salario mínimo han sido superiores que en gobiernos pasados, hay que señalar que lo que se pretende con la iniciativa de reforma no sólo se plantea hacia el final del sexenio, lo que le da un cariz electoral, sino que el aumento salarial por encima de la inflación debería ser generalizado, no sólo para el mínimo, así como ajustarse de acuerdo a la inflación, por ejemplo mensualmente.
Otro propósito de la iniciativa de reforma sería corregir gradualmente el hecho de que, al jubilarse, en el mejor de los casos los trabajadores cobren la mitad de su último salario. Es decir, la intención es que la jubilación sea con el monto del último sueldo.
Los intereses empresariales, sin embargo, estarían protegidos, como ha sido durante todo el sexenio, pues la medida sería implementada “en un acuerdo con empresarios y trabajadores (léase burocracias sindicales)” y “para que no se atemoricen los empresarios”, AMLO adelantó que el gobierno asumiría una parte considerable de este equilibrio.
Tanto en lo referente al salario mínimo como a las jubilaciones, el mandatario expuso sobre las políticas neoliberales en la materia y el papel que jugaron los partidos del Congreso para aprobar reformas, así como las resoluciones del Poder Judicial, en ambos casos en contra del pueblo. Como parte de su discurso, se refirió a las reformas para privatizar empresas públicas y bancos y a la reforma energética, pero como siempre que habla de esas cuestiones, con el límite de que su gobierno no ha revertido las privatizaciones.
López Obrador felicitó al pueblo de Guatemala por la toma de protesta del presidente Bernardo Arévalo, de su vicepresidenta y por los cambios en el Congreso. Habló de la resistencia que hubo para permitir la toma de protesta y en cuanto a la relación con México dijo que habrá cooperación y que se van a encontrar.
Se cuestionó sobre la sequía severa que enfrenta el Valle de México, que está afectando el sistema Cutzamala, sobre las proyecciones de empeoramiento entre abril y junio, y sobre las propuestas de los organismos del agua en el Estado de México y la Ciudad de México para que desde la federación se le “cierre la llave” a los cinco campos de golf que hay en el Edomex y para hacer operativos contra el huachicoleo de agua. El presidente mencionó una reunión en la que estuvo presente Martí Batres, en la que se trató el problema, y de una próxima reunión entre el jefe de gobierno de la CDMX, Delfina Gómez y el titular de la Conagua, Germán Martínez, asegurando que no va a faltar el agua.
Hacia el final de la conferencia, una reportera preguntó respecto a la determinación del Poder Judicial para clasificar como confidenciales los montos totales de los sueldos de sus integrantes. AMLO señaló que la prensa no los toca ni con el pétalo de una rosa, habló del artículo constitucional que establece que ningún servidor público debe ganar más que el presidente, y dijo que dentro de las iniciativas de reforma que va a enviar al Congreso va de nuevo la austeridad republicana; medida que, recordemos, durante el sexenio se ha descargado sobre las capas inferiores de trabajadoras y trabajadores estatales.
