“Me dispararon” fueron las palabras del cantante, compositor, activista y productor que llevó la voz cantante de The Beatles durante años y que encontró la muerte a manos de Mark Chapman, un fanático que todavía permanece encarcelado.
Meke Paradela @mekepa
Miércoles 8 de diciembre de 2021
Es tán sencillo como complicado pensar o comenzar un abordaje sobre la fabulosa, excéntrica, artística y política vida de un personaje tan famoso como John Lennon. Su gran paso por The Beatles ya nos serviría por sí mismo para escribir y hablar durante horas sobre él, más sobre todo si contamos su etapa solista. Y la gran incógnita: lo qué estaría haciendo hoy y cuál sería su posición sobre “las nuevas olas”, la gran explosión musical de la década del ‘80 que no llegó a vivir plenamente.
Sin embargo, gracias al excelente documental Get Back de Peter Jackson podemos tener una mirada muchísimo más privada e íntima de la que a nivel masivo podríamos haber experimentado. En su estreno, Julian, uno de sus hijos, declaró que “el film me hizo amar a mi padre de nuevo de una manera que no puedo describir del todo” y quizás sea una de las mejores formas que ahora tengamos para disfrutar de su magia creativa, de sus locuras, de la improvisación, de la forma de reírse de sí mismo y de hacer reír a los demás. Más allá de los momentos de tensión que refleja Get Back, también podemos ver sus momentos de alegría y diversión, situaciones que eran alentadas y magnificadas por Lennon.
El cantante nació un 9 de octubre de 1940 en Liverpool y tuvo una infancia particular marcada por el abandono de sus padres y la estricta crianza de su tía Mimi. Como pasó con muchísimos que vivieron su adolescencia en la postguerra, las tensiones entre los distintos mundos se imprimieron y estallaron en una juventud que rechazaba las normas conservadoras y clásicas del antiguo sistema británico y abrazaban las nuevas formas que llegaban a través del arte, principalmente de la música con el efecto de Elvis Presley y el rock and roll. Esta válvula de escape fue clave para Lennon, que junto a su amigo Paul McCartney conformó The Quarrymen en 1956, la misma que cuatro años más tarde sería rebautizada como The Beatles. El resto, es historia.
A medida que la banda se desarrollaba y las personalidades de los miembros de la banda iban aflorando y asentándose, también lo fue haciendo el costado político de Lennon. Si bien hay una visión casi universal de su pacifismo y sus ideas más ligadas a la contracultura y el escenario hippie, en los hechos el cantante se destacaba por componer letras críticas, filosas y provocativas sobre la monarquía y la religión. Sus polémicas declaraciones junto a Yoko Ono, la mujer que lo acompañaría durante sus últimos años y que fue una enorme fuente de creatividad e inspiración, no eran más que el reflejo de una personalidad irónica, intensa y hasta lúdica con esa particularidad de cuestionar y reírse sobre todo. Su activismo político se reflejó principalmente en su oposición contra la guerra de Vietnam, una situación que provocó que Nixon, el presidente norteamericano, lo quisiera deportar varias veces.
Además, durante esa época también se relaciona con militantes de izquierda como el trotskista Tariq Ali, que le hizo una gran entrevista que fue publicada en "Red Mole", el periódico de la organización trotskista británica Grupo Marxista Internacional, en enero de 1971. Allí, Lennon declaró que “siempre he tenido conciencia política, sabes, y he estado contra el statu quo. Es bastante básico, cuando has aprendido desde chico, como yo, a odiar y a temer a la policía como tu enemigo natural y a despreciar al ejército como algo que se lleva a todos y los abandona muertos en alguna parte. Es simplemente un asunto básico de la clase trabajadora, sabes, aunque comienza a desteñirse cuando vas envejeciendo, tienes una familia y te traga el sistema. En mi caso nunca he dejado de ser una persona política, aunque la religión tendía a eclipsarlo en mis días de ácido, allá por por el sesenta y cinco o el sesenta y seis. Y esa religión fue el resultado directo de toda esa porquería de la superestrella: la religión fue una válvula de escape para mi represión. Pensé: “Bueno, hay algo más allá de la vida, ¿no es cierto? Seguro que no puede ser esto.”
El final llegaría abruptamente, demasiado pronto para el mundo. Tras haberse retirado durante unos años para dedicarse a su familia, en 1980 edita su séptimo álbum de estudio junto con Yoko Ono y fue asesinado por Mark Chapman el 8 de diciembre de ese mismo año, tres semanas después de su lanzamiento. Tenía solamente 40 años y aún un gran mundo para explorar y deleitarnos. A partir de entonces comenzó el mito, creció aún más su fama y sus influencias. Es actualmente considerado uno de los grandes compositores de todos los tiempos: tras su muerte fue incluido en el Salón de la Fama de los Compositores en 1987 y en el Salón de la Fama del Rock en 1994.
Meke Paradela
Nació en Capital Federal en 1985.