A las nuevas restricciones en la aviación y la fuerte caída del tráfico aéreo se cruzan los planes de reestructuración de las empresas. Y es que mientras la crisis sanitaria la están pagando los trabajadores y las familias, las grandes aerolíneas preparan despidos en el sector.
Domingo 11 de abril de 2021
El Covid 19 y a un año de la crisis de la industria aeronáutica, ¿se recupera el tráfico?
El reporte del viernes 09 de abril del Ministerio de Salud puso en evidencia el fracaso de la política del gobierno, que a pesar de la campaña de vacunación, y el incremento de las medidas de control y de restricción de movilidad, la crisis sanitaria han llevado a que los contagios en Chile alcanzaran un nuevo pico, con 9.741 casos nuevos, 129 fallecidos en aquel día, acumulando más de 1 millón de contagios, y nuevamente con déficit de camas UCI, generando una situación de emergencia que pone al desnudo la crisis de la salud y su desfinanciamiento estructural producto del modelo de mercado.
Es en este marco que el gobierno ha decidido decretar nuevas medidas que restringen el tráfico aéreo, en particular las rutas internacionales, lo que ha llevado a las aerolíneas a tener que adaptar y reestructurar sus apuestas y proyecciones.
Lo cierto es que las nuevas medidas, que de cierre de fronteras que fueron anunciadas por un mes de plazo, terminan por sacudir la débil y anémica recuperación que había traído diciembre para el mercado aeronáutico tanto en la ruta nacional como el internacional. Veamos algunos datos.
Según el reporte de la JAC (Junta de Aeronáutica Civil) en febrero se movilizan 787.295 pasajeros en vuelos domésticos e internacionales lo que representa una caída de 69,5% en comparación con el mismo mes de 2020. Entre enero y febrero, la cantidad de pasajeros transportados por las líneas aéreas alcanza al 1.564.021 en vuelos domésticos e internacionales lo que se traduce en una baja de un 70,2% respecto al año anterior. Solo en el segmento de transporte de carga internacional se ha mantenido moderadamente al alza.
En Febrero la caída es más pronunciada en el tráfico de todas las aerolíneas. Situación que ha reconfigurado solo parcialmente la participación del mercado aeronáutico, teniendo LATAM una cuota de 57,9%, seguida de SKY con 25,0%, JetSMART con 16,2% y Aerovías DAP con 0,7%.
¿Pero la aeronáutica es un servicio esencial?
En efecto, hoy no podemos pensar el mundo y las transferencias de cargas y pasajeros por fuera de la aviación, se ha demostrado así, con el transporte de todo lo urgente para enfrentar la pandemia, con el importe de vacunas, insumos médicos y de emergencia.
Pero en Chile ¿Es tan así? ¿Qué enseñan las cifras?
Según el mismo reporte de la JAC, las principales rutas domésticas son Santiago – Antofagasta (70.153 pasajeros), Santiago – Calama (66.863 pasajeros), Santiago – Iquique (66-123 pasajeros), Santiago – La Serena (50.273 pasajeros) y Santiago – Temuco (45.590 pasajeros).
Los datos hablan por sí mismo, y refleja la realidad del país, donde tanto, el plan del gobierno y la cuarentena están hecha a la medida de los empresarios. Poniendo de manifiesto que los principales destinos en la ruta nacional, están ligados a la minería y las industrias extractivista.
Y no es casualidad. Son los pobres, y los trabajadores los que ponemos la vida contagiándonos, como sucede en las rampas regionales, o en el Hangar de Santiago SCL, en LATAM, teniendo a compañeros entubados, mientras los ricos y empresarios multimillonarios multiplican sus riquezas, es el caso de Piñera, Luksic, Paulmann, Ponce Lerou, etc.
¿Si no hay vuelos, quién paga la crisis? ¿Nuevos despidos?
Frente al escenario actual, los empresarios y sus gerencias ya comienzan a levantar el discurso de los despidos y la reducción de personal. En las postas regionales de LATAM vuelve a circular el discurso de las suspensiones, recortes salariales, y despidos. Es más los despidos a traves de las “evaluaciones de desempeño” de marzo ya se dejaron sentir.
Pero no es solo un problema de tráfico. LATAM se prepara para ganar- ganar; avanzar sobre el mercado aeronáutico de forma mucho más agresiva, después de haber logrado, que el Juez norteamericano a cargo del “Capitulo 11”, aplazara hasta el 30 de junio la presentación del “plan de reestructuración de la compañía”.
Ya se deja correr posibles “cambios de Rut” en asistente al pasajero, lo que iría de la mano con despidos, perdida de convenios colectivos y representación sindical, subcontratación de áreas de Mantenimiento, o las rampas de regiones, y otros servicios.
La realidad, es que las empresas aeronáuticas fijan todas sus apuestas en descargar la crisis en los hombros de los trabajadores, los que hemos puesto en movimiento esta industria durante décadas, generando millonarias ganancias, hoy se pretenden que paguemos con nuestros trabajos.
La crisis, es una tremenda oportunidad para que los empresarios se enriquezcan. Ya lo vimos con Piñera. En la Aviación, Jetsmart, de los norteamericanos Indigo Partners ha logrado mantenerse y crecer parcialmente en Chile y el mercado sudamericano gracias al modelo Ultra- LowCost, es decir a “empleos precarios, con menos derechos y mal pagados”; Luksic a traves de SAAM, compro el 100% AEROSAN haciéndose de una operadoras de rampa y logística más grandes de la aviación sudamericana, mientras los Cueto de LATAMse preparan para una vuelta al mercado más agresiva que nunca.
¿Pero este esquema es la única opción?
Chile Despertó, y los trabajadores también - No más Sindicatos Empresa.
La aviación es y seguirá siendo esencial para enfrentar esta pandemia y que los recursos lleguen a todos los rincones del país. Pero es necesario reorganizar la industria aeronáutica para poner en funcionamiento solo lo urgente y lo primordial, reorganizando la rotación y la dotación del personal aeronáutico, diseñando protocolos donde los trabajadores garanticemos la seguridad de los pasajeros y de los funcionarios.
Porque nuestras vidas valen más que sus ganancias, los trabajadores no podemos seguir pagando los costos de la crisis, mientras los empresarios siguen ganando.
La unidad de los trabajadores es fundamental. Somos nosotros los que ponemos en movimiento una de las industrias más poderosas del mundo.
Los sindicatos han pactado una tregua con las patronales. Aceptaron despidos, suspensiones recortes de salarios, y convenios a la baja aceptando el chantaje de la patronal. ¡BASTA YA! Hay que empezar a organizarse para enfrentar los nuevos ataques. Chile Despertó, y los trabajadores también, No más Sindicatos Empresa.
Otro esquema es posible, donde la aviación pueda estar al servicio de las necesidades de toda la población y no solo un lujo que pueden pagar unos pocos. O un eslabón más de la gran minería nacional. Para eso es necesario recuperar una Línea Aérea Nacional, 100% estatal y gestionada por los trabajadores, profesionales y especialistas.
Frente a la emergencia sanitaria, es necesario el cese de todas las actividades no esenciales, incluyendo la minería. Es urgente un impuesto de emergencia a las grandes fortunas y la minería, para garantizar sueldo de emergencia superior a los 500 mil pesos para toda la población, una fuerte inyección en salud, vivienda y trabajo. Fin a la ley de suspensiones y a los despidos.
Esta crisis no la podemos seguir pagando nosotros.