Mientras permanecen en calidad de presos políticos, cientos de luchadores sociales y el fenómeno del feminicidio se extiende a manera de cáncer social en todo el país. Las instituciones mexicanas están por librar de toda acción penal a Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, político acusado de operar una red de prostitución al interior del PRI en la Ciudad de México.
Jueves 26 de marzo de 2015
Hace unos días la Comisión Nacional de Justicia Partidaria del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en voz de su dirigente nacional César Camacho, ratificó la militancia de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre en el partido y declaró que “no hay ni exoneración ni inculpación” en su caso. Depende ahora de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), abrir o no un proceso penal en contra del líder priísta.
Solapado por su partido y las autoridades capitalinas, Gutiérrez de la Torre ha declarado cínicamente que el reportaje en donde se señala su participación en una red de prostitución al interior del partido es “un montaje y que hasta hoy en el expediente no hay ninguna imputación directa en su contra”.
El escándalo sobre su exoneración se da en el marco de los despidos de la empresa MVS, de los periodistas Irving Huerta, Daniel Lizárrag y Carmen Aristegui. Esto debido a que en sus investigaciones se han destapado múltiples casos de corrupción y trata, y en donde se encuentran involucrados funcionarios y servidores públicos.
Con estas medidas de censura, el gobierno –con ayuda de los medios de comunicación oficiales-, busca acallar cualquier tipo de denuncia o crítica en su contra. Al mismo tiempo, hace oídos sordos frente los reclamos históricos de las mujeres, ante el alarmante aumento del feminicidio y la violencia en el país.
Políticos, prostitución y redes de trata
En abril de 2014 se dio a conocer la investigación realizada por el equipo de Carmen Aristegui, sobre una red de prostitución al interior y servicio del PRI. Operada por el entonces dirigente del mismo en la Cuidad de México, Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre fue acusado entre otras cosas de trata de personas, abuso sexual, desvío de recursos públicos, hostigamiento sexual y violación.
Aprovechándose del desempleo y la precariedad de las jóvenes, el líder priísta les ofrecía empleos como edecanes, así como la prestación de servicios sexuales. La noticia causó gran indignación en redes sociales y el repudio hacia el partido más viejo del país, y que hoy se encuentra en el poder.
El PRI y el resto de los partidos políticos en México no solamente son responsables del engrosamiento de las redes de trata y prostitución a nivel nacional. Durante los gobiernos y administraciones “democráticos” de los últimos años, el fenómeno del femicidio y la violencia contra las mujeres se ha disparado brutalmente hasta la cifra de 7 mujeres asesinadas a diario en el país.
Las redes de trata y explotación sexual son muestra de cómo la objetivización de los cuerpos femeninos para el placer de otros se lleva hasta el extremo de tratarlas como mercancías. Este negocio genera ganancias multimillonarias y redes de complicidad en donde están involucrados todos los niveles de gobierno, empresarios, narcotraficantes y miembros de las fuerzas armadas.
Descaro priísta frente a las próximas elecciones
Después del movimiento democrático abierto a raíz del asesinato y desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, el régimen mexicano está buscando desviar el descontento social por medio de una millonaria campaña electoral para los próximos comicios de junio.
Con todo el cinismo que caracteriza a los partidos de esta democracia asesina, a principios de mes se anunció la lista de los candidatos y candidatas a diputados federales por el PRI, en donde destacan los nombres de Carmen Salinas y de Guillermina de la Torre Malváez.
La primera, actriz conocida por sus trabajos en el cine y en telenovelas de Televisa, asegura que “va representar con mucho cariño su nuevo papel en la política”, desde un partido que históricamente ha estado relacionado con la corrupción, la represión y la impunidad.
La segunda es la madre de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre mejor conocida como la “Zarina de la basura”, y por sus redes de explotación y el uso de violencia.
Guillermina de la Torre es dueña de la Planta de Selección de Santa Catarina, en donde se reciclan residuos sólidos como el vidrio, plástico y PET. Como líder de la Unión de Pepenadores del D.F., agrupa a más de mil pepenadores –incluidas mujeres y niños– cuyas condiciones de vida son inhumanas e insalubres, y quienes no cuentan con las mínimas prestaciones sociales ni salarios fijos.
Contra la farsa electoral y por la anulación del voto
La sentencia favorable para Gutiérrez de la Torre es una muestra más de cómo esta democracia asesina está al servicio de la élite económica y política del país, y no de las mujeres y las clases pobres y trabajadoras. Son estos políticos corruptos y misóginos los que están a cargo de las decisiones políticas y económicas del país, y los que hoy, están buscando por medios electorales, desviar el descontento popular y avanzar en la imposición de las reformas estructurales, que son parte de la nueva ofensiva imperialista de Estados Unidos sobre el conjunto de América Latina.
En entrevista para La Izquierda Diario sobre las próximas elecciones de junio, Francisca Daniela, integrante de la agrupación de mujeres Pan y Rosas, declaró que "es necesario luchar por levantar un gran movimiento de mujeres a la altura de las necesidades y por la defensa y conquista de nuestros derechos”.
Ante el próximo proceso electoral y sobre su postura frente a las próximas elecciones, Francisca expresó: “repudiamos esta democracia asesina del PRI-PAN-PRD y proponemos anular el voto inscribiendo en la boleta electoral las consignas: “Nosfaltan43”, “NoMásFeminicidios”, “FueElEstado” y otras que expresen el cuestionamiento a esta democracia bárbara”. Por último, hizo un llamado a construir una organización con un programa revolucionario y socialista, que aglutine a miles de mujeres y trabajadores y los prepare para las próximas luchas.