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Red Internacional
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Indec. La inflación destruye el bolsillo: en febrero fue de 13,2% y en lo que va del año acumula 36,6%

Los precios siguen por las nubes y el poder adquisitivo se licúa. Son las consecuencias de las medidas ajustadoras de Milei y Caputo. Impactaron los tarifazos en el Gran Buenos Aires, el transporte público aumentó 86,5% en febrero con respecto al mes anterior y el rubro Electricidad, gas y otros combustibles subió 47,8%. Es urgente una suba de emergencia de salarios, jubilaciones y programas sociales.

Martes 12 de marzo 16:03

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La inflación de febrero fue de 13,2%, según el índice de Precios al Consumidor (IPC) que informó este martes el Indec y en el primer bimestre acumula ya un incremento de 36,6%. De esta manera, el acumulado de los últimos doce meses alcanzó 276,2%.

El informe del Indec señala que "la división de mayor aumento en el mes fue Comunicación (24,7%), producto de subas en servicios de telefonía e internet. Le siguieron Transporte (21,6%) –por los incrementos en el transporte público– y Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (20,2%) –por alzas en el servicio de electricidad–".

En tanto, el rubro Alimentos y bebidas no alcohólicas subió en lo que va del año 34,7%, por debajo del nivel general. Sin embargo, en los últimos doce meses el rubro escaló 303,8% por encima del nivel general (276,2%). Este incremento impacta con más fuerza en los sectores de menores ingresos.

El informe del Indec registró los tarifazos en el Gran Buenos Aires, así el transporte público aumentó 86,5% en febrero con respecto al mes anterior y el rubro Electricidad, gas y otros combustibles subió 47,8% en el mismo período. Las privatizadas siguen de fiesta.

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Según Milei, “la inflación está de un dígito” si no fuese por las promociones de las empresas de “3x2 o 2x1”. También el mandatario considera la inflación del mes como un "numerazo". Otra mentira del presidente y omite que es responsable de la fuerte inflación por la devaluación, y por dar vía libre a los aumentos en los servicios públicos, combustibles y salud. Las consecuencias de la inflación recaen sobre la clase trabajadora: destrozaron salarios, jubilaciones y programas sociales, licúan los ahorros (se profundiza con la eliminación de la tasa mínima de los plazos fijos). Mientras tanto el presidente, diputados y senadores subieron sus sueldos y si pasaba, pasaba. El Gobierno tuvo que retroceder con el incremento, pero siguen siendo ingresos muy alejados de cualquier salario promedio o jubilación.

La Oficina del Presidente publicó un comunicado para festejar lo que llamó "contundente desaceleración" de precios. Desde la Rosada recordaron la inflación de 25,5% de diciembre y el 20,6% de enero. Así, afirmaron que la desaceleración es "resultado del trabajo del Gobierno Nacional para imponer una fuerte disciplina fiscal". Un fuerte ajuste que no fue a la "casta" como prometió Milei en campaña, sino que ajustó jubilados y trabajadores.

Otra salida

El fenómeno inflacionario es complejo y tiene varias causas como la evolución del dólar, el incremento de las tarifas de los servicios públicos; combustibles, entre otras. Los grandes empresarios en este contexto de inflación remarcan precios, es la conducta del gran capital concentrado para defender y ampliar su rentabilidad.

Se necesitan medidas de emergencia, que garanticen el nivel de vida del conjunto de las mayorías trabajadoras, así como un programa de otra clase para combatir la inflación con medidas como el desconocimiento soberano de la deuda fraudulenta, la nacionalización de la banca y el comercio exterior bajo gestión de los trabajadores para atacar la fuga de capitales y las remesas de utilidades de las grandes firmas al exterior que debilitan la moneda nacional.

La CGT y la CTA deberían ponerse a la cabeza de un plan de lucha enfrentar el ajuste de Milei, el FMI y los gobernadores, y tirar abajo el DNU. Es urgente una suba de emergencia para los trabajadores formales, informales, desocupados y jubilaciones y por la actualización automática frente a la inflación.