Declaración de las secciones sindicales de CGT Telepizza en Zaragoza, Barcelona y Bizkaia.
Martes 25 de enero de 2022
La reforma laboral que prometió derogar el actual gobierno «progresista», con la ministra de trabajo Yolanda Díaz al frente (junto a Unidas Podemos y el PCE), no sólo no se ha derogado, sino que se han hecho algunos retoques puntuales irrisorios que nos quieren hacer creer que son mejoras para los y las trabajadoras, pero no es así.
Ya que en ningún momento se ha puesto el foco en algunas bases de esta reforma que es la que realmente beneficia al empresario, como es la facilidad que tienen para despedir a las personas trabajadoras con total impunidad. Tanto la reforma laboral de 2010 de Zapatero que abarataba el despido de las personas trabajadoras, como la reforma laboral de 2012 de Rajoy que permite liquidar las condiciones de trabajo de un plumazo si la patronal le da la gana, se va a mantener entre otras muchas.
Ni se modifican la redacción de las causas del despido, ni se restablecen las indemnizaciones por despido improcedente y tampoco los salarios de tramitación de la reforma del PP.
Por lo que se refiere a la prioridad de los convenios de empresa (que son peores) por encima de los convenios de rango superior, se obliga a acogerse al salario del convenio del sector pero no se obliga a que la patronal respete el resto de condiciones laborales. Además estas medidas resultan ridículas no sólo por que se mantiene la reforma laboral del PP que permite modificar las condiciones de trabajo, sino que ni se obliga a las empresas a indexar el salario a la subida del IPC (¡que ya ha escalado este año nada menos que un 6,5% y los salarios siguen por los suelos!). Y aun más engañoso es todo ésto cuando vemos que ni tan siquiera el Gobierno obliga a las empresas a pagar el Salario Mínimo, como pasa en Telepizza.
La subcontratacion cambiará de forma pero seguirá permitiendo la subcontratacion en lo fundamental, sólo se obliga a las empresas subsidiarias a ajustarse al convenio de empresa o sector donde han sido contratados y no al de origen. Además siempre podrán acogerse a las categorías profesionales más bajas. Y estas plantillas seguirán sin tener derecho a tener una representación unificada con la empresa matriz. Por no hablar de que aquellos convenios que fueron “segregados” de los convenios para empeorar nuestras condiciones, como sufrieron los y las trabajadoras de Telepizza al quitarnos el convenio de hostelería e inventar el convenio Delivery, se mantendrá exactamente igual.
La precariedad seguirá exactamente igual. De hecho nos quieren hacer creer que los contratos de formación son otra mejora cuando lo que ofrecen son salarios mucho más bajos, son temporales, en definitiva, son precarios e insuficientes. Además, los empresarios se gastan menos dinero en este tipo de contratos y se culpa a las personas trabajadoras que sufren este tipo de contratos por no estar lo bastante formadas, cuando lo que existe es una sobre-cualificación de la juventud.
Nos venden como algo positivo la medida de los ERTES cuando éstos nacen de pactos por parte del Gobierno con la patronal para que los empresarios puedan contar con una mayor flexibilidad en su plantilla, enviar a los trabajadores temporalmente al paro y repescándolos después. Lo que quieren es que se paguen los despidos con el dinero publico costeado por las clases trabajadoras.
En estas negociaciones vergonzosas participa el Gobierno del PSOE, de Podemos y el Partido Comunista, junto con la burocracia sindical de UGT y CCOO, y de forma privada y silenciosa determinan con la patronal cuáles son las reformas que nos quieren hacer pasar por “progresistas” y beneficiosas para millones de personas trabajadoras, por eso, nosotros desde las distintas secciones sindicales de CGT en Telepizza insistimos que esto no es un avance contra la clase obrera. Es una claudicación de las direcciones sindicales que dejan pasar todos los ataques de los anteriores gobiernos del PSOE y el Partido Popular, y que apoya toda la patronal. Desde aquí queremos llamar a la izquierda sindical y a todos los colectivos que realmente se reclaman de clase para hacer una campaña contra la reforma laboral, y salir juntos a denunciar este nuevo atropello contra los y las precarias y tumbar la la reforma laboral.
Llamamos a acudir a todos los actos que llamen a luchar contra esta nueva contra-reforma obrera, como la concentración que CGT prepara en Madrid el próximo 3 de febrero frente al Congreso de los Diputados.
CGT Telepizza Zaragoza
CGT Telepizza Bizkaia
CGT Telepizza Barcelona
24 de enero de 2022
