Tragicómica ha sido el retorno de Pablo Longueira a la palestra pública. Acusaciones cruzadas, declaraciones contradictorias y el peso de la corrupción y el financiamiento empresarial de la política han marcado la agenda de este “ex coronel” de la UDI venido en desgracia.
Martes 8 de septiembre de 2020
A nadie ha dejado indiferente la vuelta de Pablo Longueira a la escena política. Y era que no, si reapareció en una extensa entrevista en El Mercurio señalando que votará por el Apruebo, que será candidato a la Convención y que buscará la Presidencia de la UDI.
Luego, un par de días después, gritó en Radio Cooperativa, de manera totalmente hipócrita que él era “el político más honesto de Chile”, cuando fue interrogado por la investigación en su contra por el caso Soquimich.
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Pero no termina allí la telenovela Longueira. Luego, hace unos días atrás, declaraba en una charla vía zoom que en realidad está por el rechazo y que está por defender lo más posible la Constitución de Pinochet y Jaime Guzmán, pero que era necesario llegar “legitimados” por el Apruebo.
¿Para dónde va Pablo Longueira?
Lo cierto es que no ha sido muy bienvenido. Según la encuesta Plaza Pública Cadem, un 75% de los encuestados desaprueba a Longueira, convirtiéndose en el político peor evaluado en el testeo semanal de dicha encuestadora.
A su vez, sigue sobre la mesa el escándalo de corrupción de SQM. Es que el 5 de octubre está fijado el inicio de la preparación del juicio oral en su contra, donde es acusado por cohecho y delitos tributarios consumados.
Frente a estos hechos, y en su nueva faceta, Longueira aplicó la vieja técnica utilizada por la dictadura: todo se trata de un “complot comunista” en su contra, donde “los comunistas” estarían intentando enlodar su imagen.
Lo cierto es que Pablo Longueira es un fiel representante y “estandarte” del partido de la corrupción política por excelencia, el partido de los “raspados de olla”, de los “sueldos reguleques” y tantas otras más, la UDI.
Declaraciones cruzadas con Abott
Otro capítulo del retorno de Longueira a la palestra pública han sido las acusaciones contra el Fiscal Nacional Jorge Abbott, a quien Longueira amenazó con decir “toda la verdad” en el juicio oral, contando con quiénes se reunió Abbott para cerrar las investigaciones.
Y es que algo tiene de cierto en lo que dice, en este caso, Pablo Longueira: Los escándalos de corrupción encabezados por el caso SQM fueron cerrados rápidamente por el ahora Fiscal Nacional en un claro acuerdo con los partidos tradicionales, tanto de la derecha como de la ex Concertación.
Es que así se blindaron los políticos del régimen, para que no se siguiera desnudando el cómo operaba el financiamiento empresarial a la política en Chile. Obviamente Longueira fue parte de esto y ahora lo utiliza como un mecanismo de defensa.