El Ministro de Veracruz, Alfonso Eduardo Serrano Ruiz, hace alarde en redes sociales de sus propiedades, donde incluso el mismo asumió los sobrenombres de @dadyserrano y "The_cigar_magistrate".
Sábado 15 de diciembre de 2018
En los últimos años las redes sociales digitales visibilizaron y nombraron con títulos de la realeza a personajes que ante las cámaras hacían una ostentación de riqueza y prepotencia, con actitudes que discriminan, degradan y desprecian a quienes pertenecemos a la clase trabajadora. Es así que se bautizó a estos personajes con los nombres de Lords o Ladies, para destacar el carácter clasista burgués de su comportamiento.
Es así que tenemos casos como el de #LadyChiles, quien grabó y subió un video a redes sociales, “denunciando” a una de sus trabajadoras domésticas por “robarse” un chile en nogada para poder comer, sin importarle que como muchas mujeres en situación de precarización laboral y en una terrible pobreza y carestía de todo la trabajadora tenía hambre.
Así que su único delito fue comer uno de los chiles en nogada de su patrona para calmar el apetito, otro caso fue el de #LadyProfeco ella era hija de Humberto Benítez Treviño quien fuera procurador de la Profeco, armó un escándalo que condujo a la clausura de un restaurante por no querer asignarle un lugar sin reservación.
En el caso de los Lords, tenemos al #GentlemandelasLomas, Miguel Sacal Smeke, un empresario textilero, quien golpeó y humilló a un empleado de un exclusivo edificio de Las Lomas. El único pecado del valet parking, fue no haber podido cambiar la llanta del auto del “exitoso” explotador. El agredido lo denunció por lesiones y pese a haber sido condenado a cuatro años de prisión, el agresor se libró de la pena aprovechándose de que el trabajador no podía defenderse por temor a perder su fuente de ingresos.
Es claro que estos personajes pertenecen a la clase dominante, ya sean empresarios o la casta política, están acostumbrados al poder, al abuso, al desprecio y al exceso, y ese es el caso del hoy #LordMinistro, un magistrado veracruzano de nombre Alfonso Eduardo Serrano Ruiz, quien en rede sociales hacía alarde de su riqueza material.
El funcionario millonario
Mediante las redes sociales Instagram y Twitter, se denunció al ministro por presumir automóviles de lujo, por fumar caros habanos y por mostrar una colección de relojes Rolex. Exponiendo una vida muy ostentosa en medio de la polémica de la Ley de remuneraciones, donde se exige que ningún funcionario gane más que el presidente.
Ante el escándalo, Luis María Aguilar, presidente del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) ordenó indagar las propiedades de Serrano, mediante la Unidad General de Investigación de Responsabilidades Administrativas. Medios como El Financiero trataron de comunicarse con Serrano Ruiz, pero este se ha negado a dar declaraciones de sobre sus bienes materiales.
Hay muchos "Lordministros"
Pero esto no es atribuible a una sola persona, ya que según el Presupuesto de Egresos de la Federación 2018, publicado el 29 de diciembre de 2017 en el Diario Oficial de la Federación, se establece que un ministro de la Corte recibe seis millones 938 mil 234 pesos brutos. Más las prestaciones, una cifra insultante para un país donde la precarización laboral consume la vida y el bienestar de los trabajadores, y donde hay alrededor de 54.4 millones de personas en situación de pobreza.
Ante la denuncia de que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación reciben de dieta 600 mil pesos mensuales, estos lo han negado y dicen que no ganan ni remotamente dicha cantidad, sin embargo se han amparado ante la nueva legislación, entonces ¿por qué se amparan si, según sus palabras, ellos no ganan esa millonada?
Aunque el Consejo de la Judicatura haya declarado que va a investigar a Serrano Ruiz, no podemos confiarnos de que realmente se haga, ya que funcionarios del Estado investiguen a órganos del propio Estado es algo dudoso. Como lo muestran los ejemplos iniciales de los Lords y las Ladies, casi todos los casos quedan en total impunidad, y en su mayoría estos personajes son aquellos que pertenecen a la clase empresarial o la casta política.
Por esa razón es claro que la justicia está al servicio de los ricos, porque mientras ellos salen impunes de casi todo, a los de abajo les llegan sus barbaridades sin piedad, un ejemplo del abuso social se refleja en que hasta ahora los jueces de la SCJN se han puesto a trabajar para resolver casos los cuales ignoraron durante años. Y ahora salen a protestar por la reducción de sus salarios, cosa más hipócrita porque fueron estos mismos organismos del Estado los que avalaron decisiones arbitrarias, como la desaparición de Luz y Fuerza del centro o la liberación de los asesinos materiales del caso Acteal.
Que todo funcionario gane lo mismo que una maestra
Establecer que ningún funcionario puede ganar más que el presidente, es decir 108 mil pesos no es ni remotamente suficiente, en un país donde los sueldos de los trabajadores están por los suelos, la austeridad republicana de AMLO se queda corta con los 8 mil, 6 mil o hasta 4 mil pesos que reciben de salarios mensuales, aquellos trabajadores mexicanos que tienen un empleo formal. Y es que 108 mil pesos sigue marcando una enorme brecha entre los privilegios de la casta política y la situación de precarización laboral que se vive de forma generalizada.
Por ello es necesario que todo funcionario público gane lo mismo que una maestra, esa es una auténtica austeridad, además las cosas no pueden terminar ahí, ya que la raíz de la pobreza y desesperación que padece el pueblo mexicano al igual que otros pueblos del mundo, se encuentra en el trabajo precarizado. Las reformas estructurales son un ejemplo, como la Reforma Laboral o la Educativa, este tipo de legislaciones requieren ser abrogadas, pero claramente no vendrán de la buena voluntad del gobierno por muy progresista que se presente, porque incluso con la eliminación de la Reforma Educativa, el gobierno de AMLO plantea crear otra casi igual.
Mientras estas medidas no sean atendidas y resueltas por un gobierno de los trabajadores, campesinos y pueblos originarios, empobrecidos por los planes de los gobiernos de los ricos y las transnacionales, los Lords y las Ladies no dejarán de aparecer y seguirán siendo una burda expresión de los abusos de la clase dominante.