Desde Neuquén viajaron para renovar su compromiso de lucha con las compañeras y compañeros de los movimientos sociales en el marco de la conmemoración de los veinte años de los asesinatos de Santillán y Kosteki. “La Masacre de Avellaneda es crimen de Estado”, inscribieron en un cerámico producido en la fábrica recuperada por sus trabajadores, otro emblema de lucha desde hace dos décadas.
Sábado 25 de junio de 2022 20:25
Fotos Enfoque Rojo
Este sábado una delegación de obreros de la fábrica de cerámicos Fasinpat (ex Zanon) de Neuquén se hizo presente en la Estación Avellaneda para participar de las jornadas de lucha y conmemoración de la Masacre de Avellaneda del 26 de junio de 2002. Allí llevaron un cerámico de homenaje a Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, tal como lo hicieron en otras oportunidades a lo largo de estos veinte años.
Tal como lo resolvieron las obreras y obreros de la fábrica, desde Neuquén viajó Eduardo Farías transportando los cerámicos. Y en Buenos aires se encontró con Raúl Godoy, otro de los referentes de Zanon, y juntos compartieron las actividades convocadas por el Frente Popular Darío Santillán y otras organizaciones.
Vale decir que Farías entró a trabajar en Zanon luego de que sus trabajadores la ocuparan y pusieran a producir en 2001. Siendo un joven militante del Movimiento de Trabajadores Desocupados de Neuquén, como producto de la política de los ceramistas fue parte del grupo de trabajadores de los movimientos piqueteros que se incorporaron a la fábrica recuperada. Allí se perfeccionó en el oficio y junto a su compañero Julio Pérez de la sección Laboratorio diseñaron el cerámico en homenaje a Maxi y Darío.
En diálogo con La Izquierda Diario Raúl Godoy, que además de obrero de Zanon es dirigente nacional del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), dijo que “Darío y Maxi viven, literalmente, en las gestiones obreras” y por eso es “un orgullo” para ellos que “desde los hornos de Zanon vuelvan a brotar esos cerámicos construidos por manos obreras de una fábrica apropiada, recuperada y expropiada por trabajadores y trabajadoras que son un punto, una trinchera de lucha también”.
“En estos veinte años vaya nuestro saludo y reivindicación a esta lucha y el renovado compromiso militante de pelear por una sociedad sin explotadores ni explotados, por una sociedad que al decir de Carlos Marx sea una sociedad de productores libres asociados. Eso es lo que queremos construir y en este nuevo aniversario vamos a estar, una vez más, en el Puente Pueyrredón”, sentenció Godoy.
Godoy, al igual que Farías y Andrés Blanco, actual secretario adjunto del Sindicato Ceramista neuquino y diputado provincial por el PTS en el Frente de Izquierda Unidad, son referentes de esa gran gesta obrera patagónica que lleva dos décadas siendo un faro de lucha y compromiso para la clase trabajadora y el pueblo pobre.
Godoy recuerda que “la masacre de Avellaneda fue organizada por el Estado. Fue un verdadero crimen de Estado, organizado por el Gobierno para disciplinar a los movimientos sociales que reclamaban en la calle. Como dijera ese mismo gobierno, se esa manera buscaba retomar el control de la calle. Ya son veinte años de impunidad, en los que tanto Alberto Santillán como los compañeros y compañeras del Frente Popular Darío Santillán, los abogados y las abogadas tuvieron que luchar cotidianamente contra el encubrimiento brutal por parte del régimen político. Gobierno tras gobierno han mantenido la impunidad. Siempre lo ha denunciado el papá de Darío, incluso en reuniones con Néstor y Cristina Kirchner. Sin embargo los funcionarios siguieron en funciones y asumen cargos, como Aníbal Fernández en el Ministerio de Seguridad. Por eso decimos que la lucha de Darío y Maxi no fue en vano, ellos son referentes para toda la juventud que da la vida para transformar esta sociedad capitalista, esta explotación, esta opresión. Y nos sentimos hermanados con esa lucha también desde nuestra perspectiva obrera y socialista”.
Redacción
Redacción central La Izquierda Diario