A un mes de iniciado el conflicto, las y los estudiantes de medicina se encuentran en un punto de inflexión, mientras las autoridades buscan adoctrinar de cualquier forma a los estudiantes. Sumando además un claro caso de persecución política a militantes de izquierda.
Domingo 9 de diciembre de 2018
Hace ya un mes que comenzó el conflicto en la carrera de medicina que se desencadenó luego de que las autoridades de la carrera desconocieron la decisión tomada en asamblea de carrera de paralizar las actividades curriculares incluyendo prácticas no profesionales, con el motivo de adherir al paro nacional del 8 de noviembre convocado por la CUT, CONFECh, CDP y en Antofagasta por la coordinación de estudiantes y trabajadores.
Por más de 1 semana los estudiantes solicitaron y exigieron a sus autoridades sostener una reunión para solucionar el problema, exigencia que fue sistemáticamente negada por parte de las autoridades. Quienes sostenían que las y los estudiantes involucrados se evaluarían con nota mínima o serían reprobados por faltar a sus prácticas clínicas y movilizarse.
La lucha en medicina marca un precedente para la comunidad universitaria
Las y los estudiantes de medicina han desplegado durante estas dos últimas semanas diversas formas de movilización, entre concentraciones, papelógrafos, difusión, una campaña democrática de recolección de firmas y videos de diversos actores sociales, políticos y sindicales. Incluso, el pasado viernes realizaron una marcha interna en el campus Coloso de la UA donde hicieron un llamado al resto de carreras a discutir en sus asambleas la paralización general de actividades en la UA para el próximo miércoles en apoyo a medicina.
Esto porque para ganar el conflicto es necesario buscar el apoyo de la universidad completa, de ahí, la necesidad de sacar el conflicto de las paredes de Área Clínica, y hacer que la lucha en esta carrera sea un dinamizador que abra la discusión sobre el autoritarismo en la UA.
En esta oportunidad, estudiantes de otras carreras en su mayoría agrupados en Vencer y Pan y Rosas se sumaron a la marcha, al contrario de la actual Federación de Estudiantes que pese a haber manifestado su apoyo y posar a izquierda planteando la paralización por un día en apoyo a medicina en el pleno universitario, no se hizo parte de esta marcha.
Tampoco lo hicieron las listas postulantes a federación donde participan militantes de Izquierda Libertaria y Juventudes Comunistas junto a Movimiento Autonomista que, a excepción de la lista A “Ahora es cuando”, prefirieron continuar con su campaña electoral mientras veían pasar a las y los estudiantes en lucha.
Este es un debate importante debido a que pone al centro la discusión de qué tipo de federaciones queremos, y la necesidad que éstas estén al servicio de las luchas del movimiento estudiantil, de las mujeres y los trabajadores, cómo es la gran batalla y ejemplo de enfrentar las sanciones por movilizarse que están dando las y los estudiantes de medicina frente al autoritarismo escandaloso de las autoridades de su carrera. La próxima FEUA debe dejar su posicionamiento tibio e insuficiente frente al autoritarismo que se vive en la UA y plantearse la necesidad de un cogobierno triestamental junto a la elección triestamental de las autoridades.
¿Cómo responden las autoridades?
Las autoridades han mantenido una postura intransigente y adoctrinadora, sin embargo, el día de ayer a través de medios no oficiales el Director de Departamento de la carrera distribuyó un comunicado en el que, tuvieron que ceder a una de las principales sanciones que pretendían aplicar y manifestar por escrito la resolución de no poner el 1.0 ni aplicar la reprobación a quienes hicieron efectivo el paro. Sin embargo esto está sujeto a que cada estudiante debe elevar una solicitud, es decir, deben justificarse por haberse movilizado.
Además de esto se impone la realización de un “trabajo formativo con orientación social” a modo de recuperar la práctica de ese día, como una clara medida aleccionadora ya que no se plantea esto mismo con respecto a las 2 semanas de prácticas suspendidas por la paralización estudiantil actual.
A esto se suma uno de los puntos más conflictivos de dicha propuesta, donde pretenden inmiscuirse en la forma de organización estudiantil solicitando una revisión del reglamento general del estudiante, el reglamento de la carrera de medicina y los estatutos del centro de estudiantes, a fin de encontrar argumentos legales para desvalidar lo que establece el estatuto estudiantil que avala la paralización de prácticas clínicas cuando la asamblea lo decida.
Durante esta misma jornada, y por medio de cuentas personales de twitter, el director de departamento de la carrera de medicina se refirió por medio de indirectas -que no dejan espacio a duda- a una estudiante de medicina en particular, militante de Pan y Rosas y VENCER, en una clara muestra de persecución política por ser activa militante dentro de la carrera y la universidad, hecho rechazado por las y los estudiantes. Punto que agregó el centro de estudiantes en su declaración pública.
Sin lugar a dudas, medicina es una de las carreras que más se moviliza en la UA, y es por esto mismo que el golpe que pretenden dar las autoridades puede marcar un precedente desmovilizador para la totalidad de la universidad. Pero, por el contrario, si ganamos las y los estudiantes de medicina podremos demostrar que con organización y movilización es posible dar combate a las autoridades y frenar el autoritarismo universitario en nuestras carreras y universidades.
Aunque los estudiantes podrían tener un triunfo parcial de sus demandas, debemos poner al centro que la batalla contra la estructura universitaria heredada de la dictadura no termina con esto. Se hace necesario profundizar el problematización del conflicto, mas aún, cuando estamos adportas de una nueva alza de aranceles que será decidida por el Rector Loyola que no es electo por la comunidad universitaria, donde se evidencia otra muestra mas del autoritarismo que afecta directamente a las y los estudiantes.
