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Red Internacional
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Video. Milei en La Rural: la libertad de envenenar pueblos

El presidente Javier Milei defendió el agronegocio en su discurso en la sede de la Sociedad Rural. Este modelo que hace décadas se desarrolla en Argentina ya demostró que es nocivo para el ambiente y la salud, con enormes costos sociales para los trabajadores y las poblaciones.

Domingo 4 de agosto 13:53

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En su discurso en la Sociedad Rural, Milei dijo: “tampoco es cierto que la producción agropecuaria sea nociva para el medio ambiente. Y les digo más aún si lo fuera es infinitamente más nociva la pobreza y el hambre.”

Milei manda fruta según lo que le conviene…como siempre.

No toda producción agropecuaria es nociva, pero el agronegocio sí. Y tengo pruebas.

El agronegocio comienza con todo en los 90 con Menem cuando se introduce la soja transgénica y el agrotóxico asociado: el glifosato.

Con este modelo que defiende todo el régimen extractivista ganan los grandes terratenientes y los empresarios pero tiene un enorme costo de salud, ambiental y social para los trabajadores y las poblaciones alrededor.

Salud: porque esta forma de producción pide cada vez más venenos, a medida que aparecen resistencias aumenta la cantidad de agrotóxicos que se utilizan. Hoy se calcula que se tiran 16 litros de agrotóxicos por hectárea cultivable, una locura.

Ambiental: porque implica una enorme pérdida de biodiversidad por las grandes áreas de monocultivo y la deforestación del monte nativo.

Social: porque pierden los pequeños y medianos productores, los trabajadores rurales y las comunidades campesinas desplazadas.

Federico Sturzenegger, ministro de desregulación de Milei, salió a festejar en las redes la desregulación de las fumigaciones con drones, más privilegios para los empresarios que hace años hacen lo que quieren porque no hay ningún tipo de control como denuncian desde los pueblos fumigados.

Los agrotóxicos se desplazan y contaminan el aire, el agua,la tierra y la vegetación. La exposición crónica y constante produce enfermedades endócrinas, cáncer, abortos espontáneos, entre otros. Un estudio de la Facultad de Cs Médicas de Rosario muestra que en los pueblos fumigados la tasa de cáncer en gente joven es mayor y otro estudio reciente financiado por la Unión europea muestra que también en personas de las ciudades aparecen rastros importantes de agrotóxicos en sangre, orina y heces, porque las frutas y verduras que consumimos se producen con estos venenos.

Milei y Sturzenneger se burlan de las personas que están enfermas o murieron por efectos de los agrotóxicos. Lo único que importa es que sus amigos ricos sean más ricos… Y vos no podés ni quejarte porque te reprimen.

Además, este modelo no resolvió la pobreza y el hambre, al contrario hoy tenemos un grupo de extorsionadores que controlan las enormes bolsas de soja y deciden no venderlas si el dólar no vale lo que ellos quieren. Ellos controlan el comercio exterior del país y los puertos que están privatizados.

Los socialistas decimos bien claro que para terminar con la pobreza y el hambre el comercio exterior y los puertos tiene que ser patrimonio de todos, es decir, estatizados bajo control de los trabajadores. Y una transición a un modelo productivo sin venenos y en beneficio de las mayorías es posible si expropiamos a los grandes terratenientes.

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Lihuen Eugenia Antonelli

Redacción Ciencia y Ambiente | @lihuiliyo

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