Música // Rock. Morphine: a 25 años de Yes, una obra fundamental de los ´90

La historia de Morphine

Morphine es una banda de rock formada en Cambridge, Massachusetts, durante los años noventa. Una banda algo olvidada y poco valorada, por lo menos en términos industriales. Claro está que, para los fanáticos, siempre será un pedacito de historia encantadora, y Mark Sandman un artista de culto de los más recordados.

Durante los años ochenta, Sandman comienza el recorrido de una experiencia llamada Treat Her Right, “Tratala Bien” en nuestro idioma. Esto sin dudas, ya nos dice bastante respecto a lo que podemos escuchar posteriormente en los discos de Morphine. Los Treat Hear Right eran una banda que mezclaba cosas del blues de los años cincuenta con el rock and roll estilo Nueva York del gran Lou Reed. Incluso lo de Mark con su estilo y su prosa, también tenían algo de eso. Y luego, con el final de esa banda, y ya entrados en los principios de los años noventa, era el turno de probar con otra propuesta diferente.

Morphine fue descripto por el mismo Sandman, cuando le preguntaban por el estilo de su banda o de sus canciones, como A New Low. Simplemente inventó un nombre para que la prensa de aquellos años los tuviera en cuenta y de esa manera abrir una pequeñísima grieta en la industria, con todo lo que eso conlleva. Convengamos que les tocó jugar contra rivales muy difíciles por aquella época: en esos años todos los flashes apuntaban hacia Kurt Cobain y los que venían detrás, mayormente provenientes de Seattle. La parte más conocida de la historia.

En aquellos años todo era ruidoso o sórdido, para de alguna manera ser gráficos. El sonido y la búsqueda de la revolución e innovación permanente, hacía que muchas bandas fueran hacia el grunge, o rock alternativo prácticamente, sin importar de dónde venían sus influencias ni cuáles fueran sus raíces. Definitivamente en esos momentos primereó el grunge. El sonido, los estilos y las formas de lo que fuera por ejemplo Temple of The Dog, o los comienzos de Soundgarden. Terminaron por forjar lo que luego ratificaron Pearl Jam, Nirvana, Alice In Chains, Silverchair y un montón más de etcéteras más, para seguir ejemplificando.

Lo de Morphine venia por otro lado: jazz, blues, algo de música popular, cositas de rock & roll y elementos de la psicodelia hacían que la banda representara música de carácter arte-escénico, exquisita y totalmente teatral. Con diversas aristas desde lo artístico. No hay dudas de que abrieron el juego de los noventa y algunos ni se enteraron todavía.

El álbum

Yes sale al mundo el 21 de marzo de 1995, editado por Rykodisc, un sello que dependía Warner en Salem, Massachussets. Una ciudad muy cercana a Cambridge, de donde ellos venían. Por esa misma discográfica algunos años antes habían pasado Elvis Costello, David Bowie, Yoko Ono y Frank Zappa entre otros. Fue producido por Mark Sandman, pero con la ayuda fundamental de Paul Kolderie, el mismo productor desde los comienzos con él, y también productor en 1993 de Pablo Honey (el álbum debut de Radiohead) e ingeniero de sonido con los Pixies en Come On Pilgrim de 1987, entre otras participaciones interesantes. En estos antecedentes se pueden detectar esa marca registrada y el buen gusto, al igual que en los dos álbumes anteriores de Morphine.

Las melodías del saxo más graves del jazz antiguo y los bajos aplastantes, pero a la vez extremadamente limpios, aportaron su esplendor en Yes, que se transformó en el disco más maduro y avanzado de la banda, lo que no es poco decir, donde logran meterse de lleno en la escena con el video de “Honey White” -la canción que abre el disco- y dando mucho que hablar. Ahí el mundo se dio cuenta, o por lo menos en algunos países, que Morphine era una banda compuesta por un bajista que tocaba con dos cuerdas y que cantaba, una batería y un saxo. El hecho de la ausencia de un guitarrista ya era algo impensado, con la carga que llevaba el Guitar Hero después de todo lo que había dejado la década anterior. Un toque diferente para la época que se convirtió en marca registrada. Esta larga duración hizo que muchos fueran hacia atrás para conocer los discos anteriores de Mark Sandman, tanto con Morphine como con Treat Hear Right. Hoy le damos un breve espacio y lo utilizamos como excusa para recordarlo.

Para conocer el arte de Mark Sandman, su visión oscura del mundo, el lado romántico y salvaje de la poesía, recomendamos el documental “Cure for Pain: the Mark Sandman story”; aquí lo compartimos, traducido al castellano.