Massa envía un proyecto que mezcla las propuestas del Frente de Todos para "regular las apps" con las de Milei para que sean “trabajadores independientes” privados de la Ley de Contrato de Trabajo. La campaña panqueque: un día le roba el power point a Bregman, otro a la derecha.
Lucho Aguilar @Lucho_Aguilar2
Miércoles 13 de septiembre de 2023 13:23
"¿Y qué hicimos nosotros por esos pibes? Ese pibe también tiene derecho a estar enojado con nosotros. Yo tengo una propuesta". Sergio Massa actuó esa escena en su acto en Tucumán. Atrás lo aplaudían los dirigentes de la CGT que solo conocen a los laburantes de Rappi si alguna vez le tiraron propina por un helado.
Pero en su campaña panqueque, buscando ganar votos de todos lados, Unión por la Patria un día le roba un día el power point a Bregman y Del Caño y habla de la eliminación del impuesto al salario o la reducción de la jornada laboral, y otro día se lo roba a Milei y habla contra los paros y a favor del “trabajo independiente”.
¿En qué consiste la propuesta? Ni Massa lo tiene claro, porque en realidad es un “manotazo de ahogado”. Pero según dijo la ministra de Trabajo Kelly Olmos, “nosotros reconocemos que se autodefinen como trabajadores independientes que utilizan su propio bien de capital. Nuestra aspiración es que puedan ampliar su marco de derechos”. ¿Cómo que "se autodefinen"? Justamente esas condiciones las han "definido" las grandes apps como Rappi, Glovo, Uber, y es denunciada por organizaciones de repartidores en todo el mundo, incluso con fallos judiciales a su favor. El relato del “trabajador independiente”, que “es su propio patrón” lo inventaron los precarizadores. Aunque después se termine naturalizando incluso en sectores obreros.
Según el periodista sindical Mariano Martín (Ambito), la propuesta del gobierno "incluirá una salvedad que llevará alivio a los accionistas de esas compañías: les permitirá optar por pasar a su trabajadores a una relación de dependencia propia de la ley de Contrato de Trabajo vigente o bien, mantenerlos como independientes”. O sea, algunos y algunas tendrán derecho a un convenio, una paritaria, vacaciones pagas, obra social e indemnización por despido, y otros no. Según la ministra, se buscará “ampliar derechos y protección”, pero lo cierto es que habrá trabajadores “de primera” y de segunda.
La jugada se completa con la ayuda de los movimientos sociales oficialistas. Massa adelantó que quiere formalizar a las y los laburantes de apps a través del “monotributo productivo” que se utiliza en la “economía popular”. Lo anunciará este jueves en el microestadio de Argentinos Juniors junto a los referentes del Movimiento Evita, Barrios de Pie y la CCC.
En la Argentina hay más de 160 mil "repartidores". Se calcula que menos del 5% está en relación de dependencia. Un gran porcentaje son jóvenes y además inmigrantes. El presente y futuro que les ofrecen son distintas variantes de precarización.
Nosotros reconocemos que se autodefinen como trabajadores independientes que utilizan su propio bien de capital (Kelli Olmos, ministra de Apps)
Menem (o el peronismo libertario)
El objetivo político del anuncio fue captado rápidamente por algunos medios. En busca de votos que fueron a Milei, el peronismo lanza una batería de medidas que promociona como “populares” pero son curitas en medio del duro ajuste que lleva adelante. Una miserable suma fija despues de la devaluación, una eliminación del impuesto al salario que ya tiene el rechazo asegurado en el Congreso o una “regularización laboral” para las apps que en realidad es la confirmación del trabajo precario para la juventud, que ahora tendrá sus versiones “independiente” y “bajo convenio”, aunque no se sabe cuál será. ¿Los nuevos puestos laborales serán en condiciones a la baja, como impulsan Milei y Bullrich?
Imposible saberlo. Quién puede creerle a Massa, además.
Si Milei elogia a Menem, Massa le recuerda que él fue menemista mucho antes y puede volver a serlo.
El otro dato importante es que la propuesta no solo desconoce conquistas de la clase trabajadora. ¡Desconoce incluso proyectos del propio Frente de Todos sobre las apps!
Uno fue el que escribió el propio Claudio Moroni en 2020, que regulaba las relaciones de trabajo en las apps. El proyecto ni siquiera llegó al Congreso por la presión de Rappi y compañía, que en la pandemia crecieron brutalmente. El otro lo presentó Omar Plaini (FDT) en la Legislatura bonaerense. Kicillof lo promocionó con todo. Pero como cuenta el propio dirigente de Canillitas, “tuvo media sanción del Senado bonaerense y que ahora está en Diputados, pero en el medio apareció un loby impresionante de las compañías”.
Si no es el lobby es la demagogia de campaña, pero el peronismo gobernante siempre tiene una buena excusa para disputar el cuadrito del empleado del mes a la derecha. Si Milei elogia a Menem, Massa le recuerda que él fue menemista mucho antes y puede volver a serlo.
Por los derechos de la juventud trabajadora
Muchos jóvenes sienten, como reconoce Massa, que los gobiernos de los últimos años no les dejaron ningún derecho. Ahí entra la demagogia de Milei sobre “la dolarización” o “el robo de los impuestos”, detrás de la cual esconde que es un títere del poder económico.
En un debate Myriam Bregman le dijo a Javier Milei en la cara: “¿Conocés la teoría de Ronald Mc Donald? Porque sos el empleado del mes de las multinacionales". Hoy está clarísimo. Y el resto de los candidatos compite por el premio.
Le dijo en la cara Myriam Bregman a Javier Milei: “¿Conocés la teoría de Ronald Mc Donald? Porque sos el empleado del mes de las multinacionales
A diferencia del peronismo, que tiene un power point para cada momento, la izquierda siempre peleó por los derechos de la juventud trabajadora. En sus bancas y en la calle. Como siempre plantea Bregman, “lo de las apps en un fraude laboral. Exigimos salario, vacaciones, aguinaldo, obra social, licencias pagas, derecho a organizarse sin ser perseguidos”.
Por esa juventud es parte de quienes hacen funcionar el país. Pedalean (o manejan) todo el día, fueron declarados esenciales en pandemia, porque son esenciales en el funcionamiento del capitalismo en las grandes ciudades. Son parte de los 20 millones de trabajadores y trabajadoras que pueden cambiar la historia si se unen y se ponen de pie.
Para enfrentar el fraude laboral de Rappi, hay que denunciar el fraude político de los ajustadores.
Lucho Aguilar
Nacido en Entre Ríos en 1975. Es periodista. Miembro del Partido de los Trabajadores Socialistas desde 2001. Editor general de la sección Mundo Obrero de La Izquierda Diario.
