Puebla se ha convertido en uno de los epicentros de contagio a nivel nacional en medio de la reactivación de la industria automotriz y minera. Es momento de organizarnos a nivel nacional, súmate al encuentro nacional de trabajadores este 1 y 2 de agosto.
Jueves 30 de julio de 2020
La actual situación a la que nos enfrentamos las y los trabajadores poblanos es muy grave. Por un lado la pandemia generada por el coronavirus SARS-CoV-2 ha golpeado duramente la capital poblana, situándose este municipio entre los primeros lugares de varias estadísticas nacionales, como el mayor número de casos acumulados con 12 286 y el tercer lugar en lo que respecta a las defunciones con 1 249, según lo reportado por la plataforma COVID-19 Monitoreo de Casos en México por Municipios.
Diariamente el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, expone en atropelladas ruedas de prensa, entre comentarios misóginos y pedantes que dejan entrever el trato que tiene con el resto de funcionarios, la situación de la pandemia en la entidad siendo el último dato registrado 266 nuevos casos (más los rezagados) y 21 fallecimientos (más los rezagados) reflejando la actual incapacidad del gobierno para enfrentar la crisis, no olvidemos que el propio Miguel Barbosa mencionó irresponsablemente en una de estas ruedas de prensa que la enfermedad COVID-19 solo les daba a los ricos y que los pobres nos curaríamos con un “caldito de pollo”.
No siendo suficiente con estos problemas, los trabajadores nos enfrentamos tanto a despidos injustificados, como a reaperturas sin medidas de seguridad, ambas situaciones completamente violatorias a nuestros derechos. Algunos de los casos más sonados han sido los de Carpe Textiles, quienes despidieron a 80 trabajadores sin pagarles el finiquito señalado en la ley laboral por hasta 15 años laborados, instando incluso a los afectados a llevar a cabo demandas laborales por que no les iban a pagar nada; Asimismo Concesiones Integrales obligó a 1200 trabajadores a renunciar sin el pago de finiquito para ser recontratados sin reconocimiento de la antigüedad laboral, cambiando además la razón social de la empresa.
En lo que respecta a las presiones de los empresarios para la pronta apertura de lugares de trabajo es común escuchar declaraciones de dirigentes de cámaras de empresarios como la COPARMEX, CCE y la CANACO para exigir la apertura de actividades económicas no esenciales pese al semáforo rojo en la entidad, incluso se aplauden y señalan su buena voluntad al respetar los decretos que impiden la apertura.
La avaricia de los empresarios ya ha tenido resultados negativos, como el brote de COVID-19 registrado el pasado 15 de julio en la Mina Autlan en Teziutlan con 80 contagiados, o el aumento de casos en la zona de San José Chiapa, municipio donde se encuentra la planta de Audi y que recientemente reintegró sus tres turnos de trabajo a pesar de que dirigentes del Sindicato de Trabajadores de la Industria Automotriz Audi (Sitaudi) reconocieron que trabajadores de la planta han resultado positivos sin especificar el número de casos ni las condiciones de salud de los contagiados.
Por un Movimiento Nacional Contra la Precarización y los despidos
En este contexto tan difícil caracterizado por despidos masivos y el aumento de la precariedad laboral, decenas de organizaciones sindicales, políticas y sociales impulsan el Movimiento Nacional Contra la Precarización y los Despidos, este 1 y 2 de Agosto se realizará de manera virtual un encuentro que permitirá construir propuestas y acciones en conjunto que permitan luchar contra esta situación.
Seamos decenas de trabajadores en Puebla y todo el país los que nutramos este encuentro, para poder participar únicamente debes registrarte en el formulario¡Basta de precarización laboral y despidos!
