El Gobierno bonaerense realizó una nueva reunión paritaria con los gremios docentes. La oferta fue un aumento del 15 por ciento en tres tramos, sin "cláusula gatillo" y una suma por presentismo. Para Vidal enfermarse no está permitido.
Viernes 23 de febrero de 2018
El Gobierno bonaerense realizó una nueva reunión paritaria con los gremios docentes. La oferta fue un aumento del 15 por ciento en tres tramos, sin "cláusula gatillo" y una suma por presentismo. Para Vidal enfermarse no está permitido.
A esta provocación que ataca el derecho a huelga y a la salud, se suma el cierre de ocho establecimientos del Delta y de 39 escuelas rurales de la provincia, a solo diez días del comienzo del ciclo lectivo. Los sindicatos deben llamar a asambleas comunes y a un plenario provincial de delegados para discutir y decidir un plan de lucha.
A 10 días del inicio de las clases, los gremios docentes bonaerenses y el Gobierno de María Eugenia Vidal se reunieron nuevamente en la segunda reunión paritaria para discutir los aumentos salariales de este año. ¿Cómo fue la nueva oferta que presentó Vidal?
La “nueva” oferta mantiene el 15 % de aumento, en tres tramos y sin cláusula gatillo, pero suma hasta $ 6.000 de presentismo para el año 2018 a aquellos docentes que vayan todos los días a clase. Las "excepciones" son por embarazo, accidente de trabajo, duelo, donación de órganos o violencia de género. Solo así se puede cobrar la totalidad del monto. Un verdadero insulto.
Para Vidal, las y los docentes no tenemos derecho a enfermarnos, ni nosotros ni nuestras familias, en un gremio con mayoría de mujeres, y muchas jefas de hogar.
Con la cláusula del presentismo también se pretende atacar el derecho a huelga y a la organización. Es un ataque que no podemos permitir que pase. Los gremios la rechazaron. Pero Suteba, FEB, UDocBA, AMeT y SADoP deben llamar a asambleas comunes y a un plenario provincial de delegados para discutir y decidir un plan de lucha.
Vidal cierra escuelas y deja a cientos de niños y niñas sin el derecho a la educación
La gobernadora María Eugenia Vidal decretó el cierre de los ocho establecimientos del Delta y anunció que quiere cerrar 39 escuelas rurales de la provincia a solo diez días del comienzo del ciclo lectivo. Además el Gobierno intenta cerrar cientos de grados y cursos en los distintos niveles educativos de la provincia.
Para la gobernadora que manda sus hijos a una lujosa y exclusiva escuela privada, la educación pública de los niños, las niñas y adolescentes de la provincia de Buenos Aires no vale nada, son solo un número que estorba.
Vidal lanza un plan de guerra contra los docentes y la escuela pública, ¿tiene fuerzas suficientes?
La semana pasada, la consultora Analogías presentó una encuesta que muestra que Vidal tuvo una caída en su imagen positiva de unos 7 puntos porcentuales respecto a finales de octubre, cuando obtuvo su pico tras la contienda electoral. Por otro lado, la gestión del presidente Macri es desaprobada en un 55,2 %. A su vez, la encuesta muestra que el reclamo salarial de los docentes tiene un 61,5 % de respaldo y el 60 % de los entrevistados vería con buenos ojos que el Gobierno otorgue un aumento por encima de la inflación a los maestros y destrabe así el conflicto.
A esto le tenemos que sumar que la movilización del 21F se transformó en un fuerte revés político para el Gobierno. Fue una derrota de la furiosa campaña previa que buscó bajarle el precio y, en el mismo acto, agigantó su magnitud social y política. El creciente deterioro de las condiciones de vida de las amplias mayorías es uno de los motivos de fondo que habilitó el éxito de la movilización, pese a los límites impuestos por los convocantes, tanto Moyano como Yasky y Palazzo, que siguen sin llamar a un paro nacional y un plan de lucha.
Hay que organizar desde las escuelas la lucha por el salario, contra el cierre de escuelas y en defensa de la educación pública junto a los padres y los estudiantes que eligen la escuela pública
Las y los docentes somos parte de los millones que estamos en contra de este plan de ajuste de Macri, Vidal y el conjunto de los gobernadores. Sufrimos los tarifazos, los despidos de nuestros familiares y amigos y ahora nuevamente este Gobierno de ricos y para ricos se ensaña con nosotros. No lo vamos a permitir. Ya mostramos que hay fuerzas para enfrentarlo. Por eso desde cada escuela tenemos que hacer asambleas comunes con padres y estudiantes y votar la exigencia a las centrales sindicales de paro nacional y plan de lucha para derrotarlo.
Los sindicatos docentes tienen que ponerle fecha a asambleas comunes y un plenario provincial de delegados de escuela con mandato para discutir y votar un plan de lucha y nuestro pliego de reclamos. En este camino, los Suteba combativos dirigidos por el Frente Multicolor convocan a un plenario provincial el próximo 26 de febrero en La Matanza. Es una oportunidad para potenciar en toda la provincia esta exigencia a los dirigentes de Suteba, FEB, UDocBA y demás gremios provinciales.
Ariel Iglesias
Nació en Buenos Aires en 1969. Es docente (jubilado). Militante del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS). Escribió en Ideas de Izquierda "La Educación en el país de los soviets"; "Chubut: Crónica de un triunfo popular contra la Megaminería". Escribe y edita La Izquierda Diario+ en Chubut.