En este trabajo se vislumbra un recorrido sobre las lecturas y los bordes de una vida que tiene como protagonista a Patti Smith. (Hace poco su nombre se volvió a escuchar en nuestro país, después de la visita que realizó en el Centro Cultural Kirchner con dos shows que tuvieron eje en la poesía y, por supuesto, en la música).
Gustavo Grazioli @Discolo1714
Sábado 31 de marzo de 2018
Poesía y distorsión acerca la lupa hacia las partículas de una obra que tiene libros, discos y autores que influyeron a lo largo de los años, hasta alcanzar de cuerpo entero a la cantante y poeta que dejó todo para ir a refugiarse a una Nueva York que parecía llevar una idiosincrasia escindida de las demás ciudades que conforman suelo americano.
Y yo tengo algo que esconder aquí llamado deseo/ yo tengo algo que esconder aquí llamado deseo/ y yo saldré de aquí/ ustedes saben la porción ardiente está por venir/ en mi nariz sabe a azúcar/ no tengo nada que esconder excepto deseo/ y me iré, voy a salir de aquí/ voy a salir de aquí, voy a subir a aquel tren/ voy a subir al tren para ir a Nueva York, dice una parte de la canción Piss Factory de Patti Smith, incorporada en la grabación que realizó en el estudio Electric Lady Studio, fundado por Jimi Hendrix. Este primer sencillo de la artista nacida en Chicago, que data de 1973, también incluyó la famosa versión del tema Hey Joe - canción apertura del álbum Are You Experienced? de Hendrix – y contó con la presencia de Tom Verlaine (ex líder de Television), con quien también editaría un libro de poesía titulado de The Night.
Esta escena forma parte de un universo que contiene poesía, música y al que, por supuesto, no le falta la dosis perfecta de distorsión. Hablar de Patti Smith es referirse a una codificación atravesada por libros, escritores, músicos y artistas de todo tipo. Es ingresar a la vida de una mujer de clase trabajadora que soportó los peores maltratos dentro de una fábrica y que potenció el deseo de vivir del arte y para el arte y que buscó todos los caminos posibles para hacerlo. Primero lo intentó desde los dibujos, después desde la fotografía y se terminó de dar el empujón con la escritura y el rock.
¿Qué leen esos artistas que han logrado transformar la realidad?, podría ser la pregunta que desprende esta introducción sobre Smith. Para acercarnos a algunas coordenadas de esos libros que iluminaron la vida de la artista estadounidense, habría que empezar por Mujercitas de Louisa May Alcott, seguir por los de generación beat y detenerse en Arthur Rimbaud, el poeta francés que dejó la literatura para irse a África. La influencia de este escritor marca un antes y un después. Algo similar pasó con un disco Bob Dylan (Another side of Bob Dylan) que recibió de regalo. “Se trataba de una música y una lírica excepcionales y se consoló con su escucha al regresar cada noche de la fábrica”, dice Bernas en Poesía y distorsión. Pero la marcha que terminaría de conformar a la mujer de pelo blanco encontró su vehículo en la palabra escrita en todos sus formatos. “Además de la literatura y la música, fue la lectura de revistas de rock lo que llamada su atención, en esos materiales aprendía sobre los músicos que admiraba y disfrutaba del modo en que eran verbalizadas las experiencias que involucraban todos los sentidos”, resume.
Revisitar la vida de Patti Smith es tocar las fibras más sensibles del rock y del punk. Bernas con este trabajo no termina por mostrar solo a una mujer que canta y escupe en el escenario como una actitud contestaria que finalmente terminó por cooptarse.
El entrelineas que aparece en Poesía y distorsión es la cultura rock que imparte Smith, arriba y abajo de un escenario. La rabia no muere con el show y la inquietud menos. La búsqueda insaciable de la autora de libros como Éramos unos niños o de los discos Horses y Radio Ethiopa, entre otros, se transformó en una forma de vida y las comodidades nunca fueron su filosofía de vida. “Los libros y las canciones abrieron otras puertas que emulsionaron en su cuerpo y mente y se transformaron en una esencia que sigue estremeciendo a los quieren escucharla / leerla”, apuesta Bernas sobre el final del libro, en el apartado que llama “Espero que vuelvas”.
El libro Poesía y distorsión de la periodista platense Rosi Bernas es parte de una colección promovida por la cooperativa editorial Patria Grande (comandada por Sergio Avasolo) que se llama La Balsa (dirigida por el escritor Juan Bautista Duizeide).