A 20 años del levantamiento del 2001, quiero presentar este documental como un aporte a la memoria militante y compartir algunas ideas políticas que creo siguen vigentes.
Sábado 4 de diciembre de 2021 16:17
Voy a tratar de contar algunas de las cosas que me parecen importantes a 20 años del 2001. Algunas están retratadas en las escenas de este documental medio difuso en su cronos y hecho con muy pocos recursos, pero que me gusta el espíritu que tiene, doc-doc.
Relaciones de fuerza. Cambian con la acción de masas de forma muy dinámica en todas las instancias de la sociedad
Cada viernes salíamos en el calorazo porteño de enero, caminábamos de Flores a la Plaza de Mayo.
Si la marcha era grande, el sábado las discusiones en las asambleas populares y las fábricas se expresaba el estado de ánimo. El nuevo estado de deliberación y acción tenía la dinámica de una forma líquida del poder desde abajo que actuaba desarrollando el instinto de sectores de la clase obrera y abriéndole posibilidades.
Celes Murillo escribió un volante para la agrupación de historiadores marxistas de Filo, un volante sobre los primeros días de saqueos y caídas de gobiernos que decía: “un vidrio es solo un vidrio pero se rompe”. Esta idea me quedó marcada porque la pegaba en la dinámica. Luego veríamos más límites que solo un vidrio, pero en ese momento lo único que importaba eran las posibilidades. Con ella fuimos desde la Secretaría de Relaciones Obrero Estudiantiles a ver a las obreras de Brukman por primera vez.
Arte política
Desde el día 1 vimos la dinámica de los 3 grandes actores que surgían en la política. Las asambleas, los movimientos de desocupados y las fábricas tomadas. Los sectores más golpeados de la clase media porteña es prolífica en Arte y Política, desde siempre. Un ascenso así no iba a ser la excepción. La hipótesis que teníamos era que la militancia cultural que fue muy extendida en la resistencia al Menemismo a mediados de los ‘90 (donde surgieron Contraimagen, Etcétera y algunas otras) podrían servir para hacer un puente con la intervención de espectáculos culturales en todos lados para ayudar a confraternizar, mezclar filas, entre los movimientos de desocupados, con los sectores medios y las fábricas para que se contagiaran de ese estado de ánimo levantisco (problemas de la vida cotidiana).
El tema eran las grandes fábricas, pero eso lo veríamos más claro en los próximos meses. Pero cuando nos desalojaron de Brukman por tercera vez, unos días antes que asumiera Néstor Kirchner para derrotar el último bastión de la vanguardia del 2001 que fue Brukman, con la militancia cultural que participó de estos meses intensos y conmovedores, pusimos en pie Arte y Confección, que según les historiadores, fue el evento arte.política más importante de la década, junto con la lucha contra la clausura de la muestra del gran maestro León Ferrari (que estuvo en Arte y Confección) en el Centro Cultural Recoleta. La imagen que ilustra la nota es Celia desfilando con un atuendo creado por un diseñador para ellas, que expresa un poco cómo vivimos la lucha esos días, lo que llamaríamos un verdadero carnaval revolucionario (Bakjtin).
Obrero-estudiantil
Aún con la escasa representación que teníamos, el PTS no teníamos legisladores ni menos diputados nacionales, solo con la Secretaría que nos daba el magro 3% de votos en el Cefyl y con el nombre más largo de la historia de la diplomacia, alcanzó para acercar a las obreras de Brukman volantes para impulsar el Fondo de Huelga con el que fuimos a todas las asambleas populares del planeta, y en esta práctica con ellas fueron conociendo la experiencia de Zanon. Si bien no logramos estatizar todas las fábricas bajo control obrero, logramos hacer que esta experiencia histórica no fuera derrotada y no se borraran sus lecciones. Con Esteban Mercantante, estudiante de Económicas, escribimos en la gerencia de la fábrica, con las obreras, el “Plan preliminar para la puesta en producción de Brukman bajo control obrero”.
Este documento se imprimió en papel membretado de la gerencia en una vieja impresora a tinta y fue presentado así en la legislatura como fundamento para la expropiación votada en el 2003 en la legislatura.
Que no entrara en escena el proletariado más concentrado tuvo que ver con su dirección. Cuando el Foetra empieza la huelga salarial en Dic. 2004 abre la entrada de la clase obrera de los servicios y la industria a la gran escena política pero sin el elemento del 2001 la toma de fábrica, el piquete y asamblea. Nuestra corriente, que llevó el 2001 al movimiento obrero más concentrado de la industria, fue clave en el surgimiento del Sindicalismo de Base en la década siguiente, que dieron luchas como Kraft 2009 y Lear 2014. En la UNGS conocimos a Eduardo Ayala dirigente de lo que hoy es Madygraf, un Zanon enfrente de la Ford. También en Guernica cuando se expresó la asamblea desde abajo, la lucha tomó fuerza y se continuó en la Asamblea Permanente.
Un poco de esa experiencia histórica en la vanguardia de los trabajadores y el pueblo son los andamios sobre los cuales se asienta la perspectiva de expropiar a los capitalistas y mejorar la vida del pueblo y del planeta en toda la región. El PTS es una válvula en ese mecanismo de la historia. Una voluntad política que no se disipó como todo el resto de las cosas y hoy es el principal acervo para enfrentar la crisis capitalista, el saqueo y la contaminación del FMI.
Por eso marchamos el 11 contra el FMI, pero el 6, 7 y 8 vamos a la muestra de Contraimagen donde se pueden ver documentos de esos días. Los esperamos!
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Sobre el autor: Carlos Broun es productor cultural y realizador de cine documental, dentro de las que se pueden ver en la muestra realizó “La batalla de Salta”, “Control Obrero”, “19202001” y “24 Revoluciones por Segundo” entre decenas de films políticos y antropológicos. Fue co-creador del evento Arte y Confección, semana cultural por Brukman y Latinoamérica Arde en Zanon, así como de múltiples espectáculos de Arte y Política los últimos 25 años. Militante del PTS.