El Sindicato de Petroleros Privados de Neuquén, Río Negro y La Pampa inició un paro con bloqueos a los principales yacimientos. La medida fue convocada luego de que un obrero sufriera la amputación de su brazo la semana pasada.
Lunes 22 de mayo de 2023 09:15
El gremio petrolero convocó un plan de lucha luego de que el miércoles pasado un operario de la empresa San Antonio sufriera una amputación de su brazo. El hecho ocurrió mientras el trabajador realizaba tareas de mantenimiento en un pozo de fracking en Aguada del Cajón, operado por la empresa Capex.
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“Cansados de los accidentes trágicos que cuestan vidas o dejan trabajadores mutilados y ante la ausencia de respuestas de parte de las empresas y del Gobierno Nacional para poner fin a esta situación, decidimos poner en marcha un plan de lucha definido el jueves pasado", afirmó la conducción de Petroleros en un comunicado.
La medida incluye el bloqueo de los accesos a los principales yacimientos de producción convencional y no convencional de hidrocarburos, incluyendo aquellos desde los que se explota Vaca Muerta. La Cámara de Exploración y Producción de Hidrocarburos (CEPH) puso el grito en el cielo y exigió que se dicte la conciliación obligatoria.
Ante cada “accidente” de gravedad en la industria, la bronca se expande en las bases. Los trabajadores ven que aumentan los ritmos de producción, las jornadas de trabajo son extenuantes y no hay medidas de seguridad para operar. Se trata de un caldo de cultivo para accidentes evitables y hasta muertes obreras. Parte del “lado B” de Vaca Muerta.
Hay que terminar con la flexibilización laboral y poner en pie comités de seguridad e higiene
En esta ocasión, la reacción desde abajo fue tal que a la conducción del sindicato no le quedó otra opción que convocar al paro y endurecer el discurso contra las petroleras y el gobierno. Buscan descomprimir la bronca.
Sin embargo, hay que recordar que fue la propia conducción de Pereyra - Rucci la que firmó, bajo el gobierno de Macri y el del Frente de Todos, acuerdos que implicaron pérdida de derechos y aumento en la flexibilidad laboral.
Así, con la adenda al Convenio Colectivo de Trabajo de 2017 y el “Acuerdo por la Sustentabilidad y el Empleo” de 2020, empeoraron las condiciones de trabajo, contribuyendo a aumentar los riesgos de accidentes y muertes en los yacimientos, en las plantas, en las refinerías. Desde 2017, los trabajadores fallecidos en la cuenca neuquina suman 15. El caso más emblemático quizás sea el de la explosión en la refinería NAO que el año pasado se cobró la vida de tres trabajadores.
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Es necesario que el paro sea el inicio de un verdadero plan de lucha con objetivos claros. Es urgente anular la adenda flexibilizadora del Convenio Colectivo de Trabajo y poner en pie Comités de Seguridad e Higiene en cada lugar de trabajo. Estos comités deben estar integrados por los propios trabajadores, y no por la conducción del Sindicato. Así lo plantea un proyecto presentado por el diputado provincial del PTS - Frente de Izquierda, Andrés Blanco.
A su vez, es necesario reducir los diagramas laborales sin reducción salarial, una medida que permitiría disminuir los riesgos para la salud al tiempo que crear nuevos puestos de trabajo. Porque las vidas obreras valen más que sus ganancias.