Día internacional de las y los trabajadores. Este 1° de mayo marcha con Pan y Rosas en el Bloque combativo de independencia al gobierno

Una nueva jornada de lucha por el día internacional de las trabajadoras y los trabajadores se prepara. Aunque las centrales sindicales intentan que esta sea una fecha más bien folclórica, hablando de dientes para afuera de las demandas de las y los trabajadores, mientras se dejan aislados de los conflictos en curso. Mientras dejan aisladas a las luchas unas de otras, estas seguirán sin tener mayor alcance, ¿para qué están entonces las centrales sindicales?, si no es para amplificar las luchas de los trabajadores.

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Con la política laboral del gobierno, sobre el aumento salarial, la extensión de las vacaciones y las modificaciones a la Ley Federal del Trabajo, pareciera que los problemas que aquejan a los millones de asalariados y asalariadas ya no pesan, sin embargo, la realidad es otra. Los aumentos salariales se quedan cortos debido a las condiciones que viven las grandes mayorías, pues los precios de la canasta básica y los servicios siguen en aumento. 

Por otro lado, muchos sectores, en su mayoría mujeres, no cuentan con contratos laborales estables ni prestaciones, por tanto, las medidas para acabar con la subcontratación o extender derechos como las vacaciones terminan siendo letra muerta.

Mujeres, disidencias y techos de cristal

Las mujeres y disidencias son los sectores que peores condiciones laborales tienen, las que componen los mayores puestos en trabajos informales, con peor remuneración y mayor inestabilidad laboral. A esto se suman las dobles o triples jornadas laborales por el trabajo doméstico no reconocido que recae sobre todo en las mujeres, esto da como resultado que las mujeres en promedio trabajan 80 horas a la semana en México.

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Mientras se pone al frente que mujeres toman espacios en secretarias, gobernaturas y otros puestos, lo cierto es que eso no necesariamente responde a las necesidades del conjunto de las mujeres, sobre todo de las mujeres trabajadoras, pues como decimos acá: “El alto al despojo, la violencia y la precarización no depende del género de quien gobierne, sino de las políticas que impulse y los intereses que defienda y represente. Con esto queda claro que lo que en otro momento se presentó como un triunfo del movimiento de mujeres, el hecho de poder participar de la vida política como demanda sentida del feminismo, no borra las terribles condiciones de opresión que viven las grandes mayorías, pues ocupar cargos relevantes en el engranaje capitalista, defendiendo la agenda de los grandes empresarios, no es ningún triunfo para las mujeres ni sus reivindicaciones.”

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Recuperar los sindicatos como herramienta de lucha

El pasado 8M miles de mujeres y disidencias salimos a las calles a denunciar la violencia, la precarización y la falta de derechos básicos como el derecho al aborto. Miles de nosotras nos encontramos en una marea verde y violeta, entre nosotras también miles de trabajadoras, de muchos sectores, docentes, estatales, de sectores privados, sindicalizadas y precarias; sin embargo, la fuerza de las mujeres organizadas no se expresó tal cual. La respuesta es porque, por un lado, miles de nosotras ni siquiera contamos con el derecho a la sindicalización, mientras que, si lo están, resulta que sus organizaciones se han negado a tomar las demandas de las mujeres y convocar de forma central a movilizarnos esta importante fecha, y a parar para expresar de forma real el paro internacional, que desde hace algunos años se ha colocado como bandera los 8M. 

Si las mujeres componemos hoy por hoy, casi el 50 % de la fuerza laboral a nivel internacional, ¿Por qué no se muestra esa fuerza de forma organizada, el 8M? ¿Por qué las organizaciones sindicales no retoman nuestras demandas? ¿Por qué no visibilizar nuestras demandas este 1° de mayo? Existen muestras de cómo enfrentar los planes antiobreros y cómo juntar esas demandas con el movimiento de mujeres, como lo hacen hoy en Francia contra la reforma jubilatoria, movilizaciones que nutrieron una importante jornada de lucha el 8M en ese país. ¿Por qué las centrales sindicales no buscan visibilizar nuestras demandas este 1 de mayo? 

Es clave retomar el filo combativo que tiene el surgimiento del 1 de mayo, visibilizando las luchas en curso y destacando un bloque combativo con independencia del gobierno y la derecha que realmente articule las diversas demandas que tienen las y los trabajadores. En este bloque nos parece fundamental que también se destaque la realidad que vivimos las mujeres y disidencias dentro y fuera del mundo laboral.

Marchemos por el pan y por las rosas

Te invitamos a marchar este 1 de mayo con Pan y Rosas en el Bloque combativo impulsado por la Asamblea de Trabajadores en Lucha, para unir en las calles lo que la burocracia sindical y el gobierno quieren dividir: las demandas contra la explotación y contra la opresión, los sectores oprimidos y explotados. 

Tomemos las calles este 1 de mayo contra la precarización y la violencia hacia las mujeres y disidencias, contra la brecha salarial, por plenos derechos laborales y por jornadas laborales de 5 horas, 6 días a la semana, con un salario que alcance para cubrir la canasta básica.

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