Las maestras y maestros de México llegamos a este 15 de mayo tras perder casi todos nuestros derechos laborales con la implementación de la reforma educativa y con un raquítico aumento salarial.
Miércoles 9 de mayo de 2018
En las escuelas, la reforma educativa avanza implementando un nuevo modelo que degrada la educación pública y deja en la incertidumbre a muchos compañeros, como los de talleres, de Telesecundarias y Educación Física, que no saben qué pasará con sus puestos de trabajo.
También avanza la privatización con el programa Escuelas al CIEN, cuya utilización para la “reconstrucción” de escuelas fue anunciada cínicamente por el gobierno luego de los sismos del año pasado, aunque muchas escuelas permanecen cerradas y en otros casos la reconstrucción corrió a cargo de los padres.
Mientras, la evaluación punitiva continúa sometiendo al magisterio a la inestabilidad laboral y ya suman 586 los docentes cesados por oponerse a presentarla.
Ante esto, la dirigencia traidora del SNTE negoció con la SEP un raquítico aumento salarial del 3.4%, por debajo de la inflación que ronda el 4.7%.
Lucha magisterial, represión y límites a superar
Por si fuera poco, los maestros de Tabasco y del Nivel de Educación Indígena de Chiapas que salieron en semanas previas a luchar por el pago de salarios atrasados, tuvieron que enfrentar solos la brutal represión de sus respectivos gobiernos; y lamentablemente, la lucha de los maestros de educación indígena fue desconocida por la CNTE.
Leer: Chiapas: violenta represión contra maestros de Educación Indígena
En este contexto, los maestros de la Sección 42 de Chihuahua realizaron un importante paro de labores en demanda de salarios y prestaciones atrasadas. Más allá de los resultados y de los cálculos políticos de los dirigentes sindicales, esta lucha constituye una importante experiencia para los docentes chihuahuenses y un ejemplo para el magisterio nacional, que muestra el potencial del método de paro y movilización en las calles, que puede extenderse y avanzar contra la reforma educativa a condición de enfrentar a la burocracia charra, luchando al mismo tiempo por recuperar nuestro sindicato como herramienta efectiva de lucha.
La CNTE, por su parte, realizó un paro de 48 horas el 9 y 10 de abril y otro de 72 horas del 30 de abril al 2 de mayo, ambos acompañados de movilizaciones en los estados y en la capital. Además, está discutiendo la fecha para el estallamiento de la huelga magisterial, aunque todo esto con el límite que implica mantener como objetivo central abrir una mesa de negociación con la Secretaría de Gobernación, y no el fortalecimiento del movimiento a través de la unidad magisterial y con otros sectores de trabajadores.
Y es que, aunque la CNTE contempla una ruta para unir fuerzas con otros sectores, ésta se limita a acuerdos por arriba, cuando lo que se necesita es la organización de los trabajadores desde las bases, mediante el impulso de asambleas que puedan debatir democráticamente y elegir delegados revocables, rotativos y con mandato de base, para nutrir un gran Encuentro Nacional de delgados que vote un Plan de Lucha unificado.
Elecciones 2018
En medio de la coyuntura electoral, los empresarios agrupados en Mexicanos Primero lanzan una ofensiva en defensa de la reforma educativa con unindignante spot de “niños candidatos”, mientras la iniciativa “10 por la educación” -de la que también forman parte- prepara un foro para presionar a los candidatos presidenciales a que mantengan intacta la reforma.
Asimismo, los charros del SNTE -cómplices de la reforma educativa- encabezados por Juan Díaz de la Torre, pretenden entregar al voto magisterial al PRI, con la ayuda de un sector del Panal; mientras que el sector charro de Elba Esther Gordillo, quiere llevar el voto de los maestros hacia el voto útil, con la ayuda del otro sector del Panal.
Por su parte, Andrés Manuel López Obrador ha modificado su discurso, desde “dejar sin efecto la reforma educativa”, hasta la promesa de que las evaluaciones docentes no estén vinculadas a la permanencia, mientras busca sumar votos magisteriales con la convocatoria a un Encuentro Nacional con maestros democráticos para el 12 de mayo en Guelatao, Oaxaca.
Leer: AMLO y la promesa de cancelación de la reforma educativa
Desde la agrupación Nuestra Clase opinamos que la reforma educativa va mucho más allá de la evaluación punitiva, pues representa una degradación de los contenidos educativos a favor de los empresarios (mano de obra barata y obediente), la liquidación creciente de todos los derechos del magisterio y la privatización paulatina de la educación pública.
Además, consideramos que así como está, aún sin reforma educativa, la educación pública no es la que necesitamos, y su transformación en beneficio del pueblo depende, en primer lugar, de un aumento sustancial al presupuesto educativo, que podría hacerse a través del no pago de la deuda externa y de impuestos progresivos a los grandes empresarios, ambas cuestiones que López Obrador no está dispuesto a hacer.
Por eso y otras razones que no desarrollamos aquí, consideramos fundamental, frente a las elecciones, preservar nuestra independencia política como trabajadores, y que realmente se lleve adelante la importante declaración de la CNTE respecto a su independencia política de todos los partidos que participarán en la contienda electoral.
Sin embargo, llamamos a todos los trabajadores de la educación que tienen expectativas en AMLO, a no depositar la confianza en que mediante el voto se solucionarán todos nuestros problemas, a organizarnos y movilizarnos juntos por nuestras demandas, pues todo lo que tenemos –y nos están arrebatando- lo hemos conquistado con luchas, nada nos han regalado.
¡A movilizarnos este 15 de mayo!
Para el 15 de mayo, la CNTE está convocando a una movilización masiva en la Ciudad de México, que partirá del Auditorio Nacional rumbo a la Secretaría de Gobernación a las 9 horas.
Convocamos a todas las trabajadoras y trabajadores de la educación, normalistas y estudiantes de pedagogía de la Ciudad de México a sumarnos a esta movilización, marchando con la agrupación magisterial y normalista Nuestra Clase: por la abrogación de la reforma educativa y en defensa de la educación pública, laica y gratuita; contra la imposición del nuevo modelo educativo; por la reinstalación de los maestros cesados, por justicia para Nochixtlán, por la aparición de los 43 normalistas; por mejores salarios para los trabajadores de la educación; y por tomar el ejemplo de las luchas docentes en Estados Unidos, que con paros de miles de maestros junto a sus comunidades han logrado importantes demandas, como aumento salarial y al presupuesto educativo.
