Este viernes se sucedieron una serie de reuniones en donde oficialismo y oposición discutieron marcos para echar a correr el “Acuerdo por la Paz” que continuarán el día lunes. Una nueva concesión de la oposición.
Domingo 24 de noviembre de 2019
La semana pasada la cocina parlamentaria se anotó un nuevo hito. Entre gallos y medianoche oficialismo y oposición firmaban un “Acuerdo por la Paz” con el cual acordaban iniciar un proceso constituyente, el cual era firmado bajo una fuerte represión en las calles.
Este viernes se realizó una nueva reunión entre oficialismo y oposición, esta vez para definir los marcos para echar a andar esta verdadera “cocina constituyente”. En esta reunión participaron representantes de RN, la UDI y Evópoli, por el oficialismo, como así también, por la oposición, el PS, la DC, PPD y PR, y el Frente Amplio, con CS, RD, Comunes y el PL, sin llegar a mayores acuerdos.
Sin embargo, desde la oposición acusaron tener ciertos mínimos comunes, como son la paridad de género, las cuotas indígenas, la participación de los independientes y el voto desde los 16 años. Si bien en un principio presentarían una propuesta como oposición, el Frente Amplio señaló que optarían por presentar una propuesta aparte, cosa que también hizo, finalmente, Convergencia Progresista (PS, PPD y PR) y la DC.
Juntos o separados, con esto la oposición no hace más que renunciar a una Asamblea Constituyente libre y soberana, bendiciendo el proceso a la medida del gobierno de Piñera, la derecha y de los empresarios.
Catalina Pérez, presidenta de Revolución Democrática, a propósito de las convergencias en la oposición señaló "Nos reunimos con los partidos de la Nueva Mayoría y vimos con mucha alegría que tenemos muchísimo acuerdo en poder instalar en el debate la participación de indígenas, la participación paritaria de hombres y mujeres, la necesidad de que los chilenos en el exterior puedan participar, la importancia de que los menores que empezaron este proceso también puedan participar y que los independientes puedan participar en igualdad de condiciones".
Por otro lado, Gael Yeomans, Diputada de Convergencia Social, señaló que no firmaron el “Acuerdo por la Paz” porque esperaban que se integrara la paridad de género, las cuotas indígenas, etc., pero que de todos modos participaban del mismo, señalando "Seguimos manteniendo las críticas que teníamos respecto al acuerdo, sobre todo en materia del quórum, pero creemos que esas críticas pueden ser trabajadas y en eso estamos hoy en día"
El Frente Amplio, y Revolución Democrática y Convergencia Social en particular, con sus propuestas, buscan maquillar la trampa constituyente blindando el proceso que se realizará bajo las manos de Piñera, permitiéndole dejar su firma en una supuesta nueva constitución.
Con esto no hacen más que bendecir el proceso de desvío que pretende sacarnos de las calles y que los parlamentarios firmaron sobre la sangre de los millones que llevamos más de un mes manifestándonos y soportando la represión del gobierno.
Este “Acuerdo por la Paz” vino a ser un salvavidas para un gobierno moribundo, el cual, ahora, pretenden maquillar para hacerlo más presentable a la población, mientras por abajo el gobierno recrudece la represión y la persecusión. No podemos caer en los engaños de la cocina parlamentaria.
El Frente Amplio, que promovieron la idea de representar las demandas de la población, le hace un flaco favor a la movilización. Las tribunas parlamentarias, en vez de estar cocinando, debieran ser la voz de denuncia de la represión y los engaños del gobierno, sin embargo este no ha sido el rol de los representantes del Frente Amplio. Por ejemplo, a Catalina Pérez, quien además es diputada por la región de Antofagasta, no se le ha oído ningún reparo por la brutal represión que se vive en la región o en las poblaciones como la Miramar o la Bonilla, que vienen siendo fuertemente atacadas por Carabineros.