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Red Internacional
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Narcotráfico. Pullaro le dio la razón a Bregman sobre puertos rosarinos, pero se lavó las manos

En la Comisión de Legislación Penal se debate el paquete de leyes impulsado por Patricia Bullrich que busca fortalecer el accionar represivo. El día miércoles expuso el gobernador de la provincia de Santa Fe Maximiliano Pullaro y su Ministro de Seguridad Pablo Cococcioni. Frente al cuestionamiento de Myriam Bregman sobre el rol de las empresas privadas y el puerto de Rosario en el circuito del narcotráfico, Pullaro dijo que coincide, “pero también hubo investigaciones en otras provincias y en otros puertos también”.

Facundo Durán @FakuDuran

Jueves 23 de mayo 21:32

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Yo tengo muchas coincidencias con lo que usted dice”, le contestó el gobernador de provincia de Santa Fe Maximiliano Pullaro a Myriam Bregman. Pero esquivó responsabilidades excusándose con que es un problema que también pasa “en otras provincias y en otros puertos” y avaló toda la línea la política de mano dura de Patricia Bullrich con la que, bajo la excusa del narcotráfico y las mafias, busca perseguir y reprimir la protesta social. La diputada nacional del PTS en el Frente de Izquierda lo había cuestionado sobre la relación entre el puerto de Rosario y las grandes empresas y el narcotráfico: “¿Por qué no se habla de los puertos de Rosario, de donde salen esos cargamentos de droga? ¿Por qué es evidente que hay un aumento del tráfico de drogas desde esos puertos desde que los mismos están bajo control privado?

La verdad que no había venido preparado para hablar de eso (¿?)”, le respondió Pullaro. Es que la política del gobierno de la provincia es perseguir a los eslabones más bajos de la cadena del narcotráfico que en Santa Fe muestra un entramado profundo en el que aparecen como partícipes y cómplices empresarios, financistas, jueces, fiscales y funcionarios políticos, además de, desde ya, las fuerzas de seguridad.

Pullaro respondió que hay una diferencia entre microtráfico y narcotráfico y que el problema al que se abocan es al primero. Es decir, al narcomenudeo como si el problema solo abarcara a los soldaditos. La política provincial frente a la crisis del narcotráfico que en Rosario ha dejado muchas víctimas permanente ha sido la saturación policial en los barrios de la ciudad. Pero no hay noticias sobre allanamientos en las torres de lujo construidas sobre la costa del río que no pueden explicar el origen del dinero. Tampoco sobre los puertos privados del agronegocio del cuál cada pocos meses surgen noticias en todo el mundo de cargamentos de cocaína valuados en millones de dólares.

El gobernador se excusó señalando que no tienen las delegaciones necesarias por parte de la ley nacional. Pero no hay denuncias del gobierno provincial ni exigencias de intervención contra los empresarios que son parte del negocio del narcotráfico. Incluso más: Terminal Puerto Rosario opera el puerto de Rosario que es provincial y está concesionado en manos de los empresarios vaciadores de Vicentin. Esta terminal portuaria en varias oportunidades fue noticia por el hallazgo de cargamentos de cocaína listos para despachar o despachados con operativos logísticos que incluían, por ejemplo, el apagado de los sistemas de vigilancia.

Las declaraciones del gobernador son el marco del debate por el paquete de leyes que impulsa Patricia Bullrich, con el que busca reforzar el control social y la represión en medio de la crisis bajo la excusa de combatir el narcotráfico; paquete al que Maximiliano Pullaro expresó todo su apoyo. “Queremos alertar sobre algo muy peligroso que se está discutiendo en Diputados y pasando desapercibido, a pesar de la gravedad que tiene. Patricia Bullrich está impulsando un paquete de leyes espantoso y ya comenzó a tratarse en comisión”, denunció Myriam Bregman.

Con el pomposo título de "LEY ANTIMAFIAS", Bullrich propone que le den facultades para dictar una especie de estado de sitio o zona liberada bajo su mando, donde una vez establecida la "zona sujeta a investigación especial", ella pueda hacer lo que quiera. ¿Qué sería esto? Allanar sin orden judicial, intervenir teléfonos, detener personas por 48 horas. Se establece la extinción de dominio, se crean figuras penales nuevas y se aumentan penas. Todo sin ton ni son, más que un arrebato represivo de Bullrichseñaló la diputada del Frente de Izquierda.

Maximiliano Pullaro reconoció que los cuestionamientos de Bregman son correctos. El planteo del Frente de Izquierda no es reciente, sino que desde hace años pone foco en el gran delito del narcotráfico, en la complicidad de empresarios, funcionarios políticos y judiciales y de las fuerzas de seguridad. Desarrolla un planteo integral que implica atacar a quienes lucran con este negocio, nacionalizando los puertos y las rutas comerciales bajo el control de sus propios trabajadores y terminar con todos los mecanismos financieros que permiten el blanqueo de capitales de los empresarios y políticos ligados al narcotráfico. El gobernador de Santa Fe ‘le da la razón a Bregman’, pero su política es el endurecimiento de las leyes represivas y la militarización de Rosario, sin tocar los grandes intereses que hay detrás. Porque, como se sabe, no hay narcotráfico sin protección estatal.