Más de 800 trabajadores de los almacenes de Amazon en Tilbury, Essex, al este de Londres, abandonaron sus puestos de trabajo para dirigirse al casino, en forma de protesta, ya que exigen un aumento salarial al cual la empresa del multimillonario Jeff Bezos se niega.
Viernes 5 de agosto de 2022 08:04
Son alrededor de 3.500 trabajadores en los almacenes de Tilbury, de los cuales más de 800 se hicieron parte de esta protesta que nos recuerda las huelgas de brazos caídos, como les llamamos los hispanohablantes. En contra de lo permitido por la empresa, se reunieron en el comedor realizando allí una asamblea y haciendo efectiva la paralización de actividades por la noche del 3 de agosto y durante todo el día 4.
La exigencia es el aumento de los sueldos en 2 libras, en respuesta a la oferta de la empresa de aumentar los salarios en apenas 35 peniques, lo cual los trabajadores lo calificaron como una burla ya que “Amazon es una de las empresas más rentables del planeta”, en palabras de Steve Garelick, dirigente del sindicato GMB.
Tonight a withdrawal of labour at Amazon Tilbury. Workers are incensed. Following a 35 pence pay increase offer. @BBCNews @SkyNews @DailyMirror @GMBLondonRegion @WKennyGMB @twgmb @BAmazonUnion pic.twitter.com/XAhJ6SoRw3
— Steve Garelick (@steve_garelick) August 3, 2022
Marius Brezeanu, de 24 años, empaquetador, quien participo en esta "sentada" señalo a la BBC:
"Tengo que trabajar seis días [1] para poder pagar el alquiler, las facturas y llevar una vida normal; no creo que esto deba ser normal. Desde hace un par de meses, sólo hago una comida al día para ahorrar dinero... Creo que había unas 1.000 personas en los turnos de día y de noche en huelga ayer y durante la noche. Seguiremos protestando, todo el mundo sigue motivado para hacerlo".
La empresa estadounidense que tiene más de 70.000 trabajadores solo en Reino Unido, salió a defenderse planteando que los empleados tienen seguro médico, de vida, plan de pensiones y subsidios y descuentos en comida que les valdrían “millones de dólares al año”. Sin embargo, aquello es lo mínimo que todas las empresas deberían asegurar a sus trabajadores y trabajadoras.
Además, estamos hablando de una empresa que es propiedad de Jeff Bezos, el segundo multimillonario más rico del mundo según la revista Forbes, gracias a su patrimonio de 171.000 millones de dólares, siendo también dueño del The Washington Post y de la compañía aeroespacial Blue Origin.
Estamos hablando del gigante tecnológico de EE.UU. cuyas ventas solo en el Reino Unido superaron los 23.000 millones de libras esterlinas el año pasado.
Medidas disciplinarias
Los trabajadores denunciaron rápidamente que Amazon respondió con represalias a la protesta que llevaron a cabo. “Amazon eliminó el pago de cientos de trabajadores en Tilbury Essex y también buscó en las redes sociales para ver quién sube videos. En lugar de procedimientos disciplinarios debido a la reputación, Amazon debería ordenar su reputación con el personal. Pague un aumento decente, no 35 peniques” twitteó Garelick.
Además, Amazon ya ha arremetido contra los trabajadores, usando contratos a plazo fijo de manera cada vez más amplia así como realizando despidos, los cuales fueron revelados en su último informe de resultados trimestrales, donde develan que entre abril y junio de 2022 se habría reducido el personal mundial en un 6%, lo cual equivale a más de 100.000 empleados que quedaron sin su fuente laboral.
La empresa no reconoce el sindicato, por lo tanto los trabajadores y trabajadoras saben que la única forma de conquistar sus demandas será movilizándose y paralizando las actividades hasta recibir así una respuesta satisfactoria.
Que la crisis no la paguen los trabajadores
Se prevé que la inflación en Reino Unido alcance un 13% a finales de este año, mientras que el aumento salarial que exigen los trabajadores equivale solamente a un 3%. Es un alza mínima, totalmente necesaria para enfrentar el alza del costo de la vida y en el marco de una multinacional que es conocida en varios países por mantener a los trabajadores de fábricas y almacenes en malas condiciones laborales.
Los despidos masivos que a nivel mundial realizó Amazon también responden a aquello. Es el mayor recorte de personal en un solo trimestre, y se dice que sería una medida preventiva a la ya anunciada recesión que estallaría en los próximos meses.
Lo que los grandes capitalistas buscan es que sean los trabajadores quienes paguen la crisis, para ellos mantener e incluso aumentar sus multimillonarias ganancias. Sin embargo, los trabajadores a nivel mundial ya han dado respuesta.
En Gran Bretaña hemos visto huelgas en industrias, en ferroviarios, aerolíneas, telecomunicaciones entre otras, todas las cuales son respuestas a la crisis que ha provocado la enorme inflación que ha golpeado en los costos de vida de todas las familias trabajadoras, que hoy tienen que pagar más por sus alimentos y artículos esenciales.
Los cientos de trabajadores de Amazon en Reino Unido se unen de esta manera a los trabajadores de diferentes sectores que están protestando e iniciando huelgas contra la inflación y por aumentos de salarios, como así también contra la precariczación que se agudizó durante la pandemia. Muchas de estas luchas se dan en sectores estreatégicos de la economía como el transporte, la logística, la producción de energía o explotación petrolera mostrando que las y los trabajadores tienen la fuerza para pelear y ganar, y no ser quienes vuelvan a pagar la crisis que los grandes capitalistas han provocado.
16.00 at Amazon Tilbury Essex today pic.twitter.com/bKWnv7BUow
— Steve Garelick (@steve_garelick) August 4, 2022
[1] por supuesto se refiere a trabajar 6 días a la semana
Nancy López
Profesora. Agrupación Nuestra Clase