Trabajadoras de Participación Ciudadana-SIBISO CDMX son despedidas por oponerse a realizar proselitismo político para Morena.
Miércoles 26 de abril de 2023
Trabajadoras de Participación Ciudadana, perteneciente a la Secretaría de Inclusión y Bienestar Social (SIBISO) de la Ciudad de México que cuestionaron la coerción ejercida por las autoridades para forzarles a hacer proselitismo político para la revocación de mandato y para convocar a la marcha del 27 de noviembre y el mitin 18 de marzo, encabezadas por el Presidente López Obrador, viven hostigamiento laboral y en algunos casos son obligadas a firmar su renuncia.
Participación Ciudadana está sostenida por trabajadores a quienes bajo una política de precarización laboral no se les reconoce como tal y son incorporados bajo la figura de “beneficiarios de programas sociales”.
Cumplen con todas las condiciones de un o una trabajadora: una relación de subordinación, un horario y lugar de trabajo y reciben un ingreso por su labor; sin embargo, no se les respeta ningún derecho de los dictados en la Ley Federal del Trabajo.
Es la misma situación que comparten las y los trabajadores de otras dependencias públicas, como Pilares, Secretaría de Cultura de la CDMX o Ponte Pila.
La ausencia del reconocimiento de sus derechos laborales pone a las y los trabajadores en una situación de vulnerabilidad. Es sobre ello que las autoridades a cargo de estas dependencias les exigen como condición de su continuidad en los programas realizar funciones ajenas a las reglas de operación de sus programas y con una intención de promoción política clara.
En este medio dimos cuenta de un audio grabado en una reunión a finales de octubre del año pasado, impartida presuntamente por Astrid de Jesús Miranda Cañizares, quien pertenece a la Dirección Ejecutiva de Participación Ciudadana en la Alcaldía Venustiano Carranza. Ahí señala que es el presidente el que está pidiendo el apoyo de Participación Ciudadana para la recabación de firmas de la Revocación de mandato:
“Ahorita no es Astrid, no es Mayra, no es Daniel, no es la doctora, es nuestro presidente el que nos está pidiendo que lo apoyemos con la recabación de las firmas.”
Con conciencia de que dichas prácticas son violatorias a los derechos humanos de las y los beneficiarios se pedía que las firmas se recabaran a nombre de otra persona del mismo sexo.
Represión y hostigamiento laboral
Actualmente, trabajadoras adscritas a esta misma demarcación -Venustiano Carranza- exponen que producto de haber cuestionado estas labores que tienen como fin favorecer al partido MORENA, el hostigamiento laboral se profundizó, aumentando los malos tratos, cambiandolas de lugar de trabajo, aumentando su carga laboral, adjudicando trabajos extra y por fuera de su horario laboral, como acudir a evento de otros programas, desvalorización de su trabajo, amenazandolas y hasta llegar a forzarlas a firmar su renuncia.
“Compañeros relatan cómo la Directora (Astrid de Jesús Miranda) les aventaba un borrador o un plumón, son terribles los malos tratos que tienen hacia los trabajadores, incluso una compañera Líder Coordinador de Proyecto renunció por qué no aguantó la presión”, narra una de las trabajadoras despedidas.
Las violaciones a derechos elementales, como la falta del derecho a un servicio médico, es una de las denuncias centrales que hacen las y los trabajadores adscritos como “beneficiarios”, misma que es compartida por otros tipos de contratos de simulación en el sector estatal, como lo son honorarios, servicios profesionales o autogenerados.
Al mismo tiempo, fue este sector quien estuvo en la primera línea durante los momentos de confinamiento por la pandemia de COVID-19, por lo que los contagios fueron algo común entre ellos, enfrentándolos sin acceso a atención y medicación gratuita y adecuada, pero además, teniendo la exigencia de las autoridades para continuar trabajando y de presentar justificantes médicos de instituciones específicas, aún cuando en muchos casos había saturación para el acceso a pruebas.
“A inicios de año muchos salimos contagiados por COVID 19, sin embargo la directora se negó a dar permisos argumentando que no había personal y estábamos como operativos de vacunación, justo hasta veían súper crítica tu salud es cuando te decían que fueras al médico y te obligaban acudir a el kiosko de Alcaldía, de lo contrario decían que falsificamos las pruebas si llevamos de otras instituciones aún fueran públicas.”
La exigencia a este derecho básico o cuestionar incluso el no tenerlo, es causa de que las autoridades te consideren conflictivo.
Todas esas situaciones de hostigamiento, sumado a la falta de derechos, buscan que las y los trabajadores renuncien antes de que ese descontento pueda organizarse, a la par, estos despidos a quienes cuestionan la falta de derechos en los programas sociales y la coerción para realizar proselitismo busca acallar al conjunto de trabajadores estatales en las mismas condiciones, puesto que a diario se labora con la amenaza permanente de que te pueden dejar fuera en cualquier momento.
Esta situación no es única de Morena, pues en los lugares en donde los altos funcionarios provienen de la llamada “oposición” (PAN-PRI-PRD) han sido denunciados también por obligar al personal precarizado para acudir a las marchas convocadas en “defensa del INE”, dejando claro que todos los partidos del Congreso hacen uso de la ausencia de reconocimiento de derechos laborales para estos fines.
Desde Queremos Trabajo Digno hacemos un llamado a las y los trabajadores estatales a organizarnos frente a los despidos injustificados, por plenos derechos laborales y basificación, así como contra el hostigamiento laboral y contra nuestro uso en sus campañas políticas; consideramos que la solución a estas demandas solo puede ser por la unidad de los sectores de que realizan trabajo de base de todos los tipos de contratación.