El Ministro de Trabajo adelantó un nuevo aumento del haber mínimo para fines de septiembre y volvió a prometer que los salarios le van a ganar a la inflación. El poder de compra se redujo en los últimos años y durante el Gobierno de Fernández se profundizó ese deterioro.
Martes 31 de agosto de 2021 19:43
El Ministro de Trabajo de la Nación, Claudio Moroni, anticipó que el Gobierno evalúa el aumento del piso del impuesto a las Ganancias así como del salario mínimo, vital y móvil (SMVM) para fines de septiembre.
El salario mínimo en julio fue de $ 25.920, una suma por debajo de la canasta de indigencia que calcula el Indec que para el mismo mes fue de $ 29.003. Entre diciembre de 2019 y julio 2021 la canasta de indigencia subió un 86,1 % y la de pobreza 73,4 %, mientras que el salario mínimo 28 %.
La situación es más crítica si se compara el salario mínimo con la canasta de consumos mínimos que realiza la Junta Interna de Ate Indec. La canasta incluye el gasto de alquiler, y si bien no es un ideal, como aclara esa organización gremial, se acerca a lo que necesita un hogar para llegar a fin de mes: en julio fue de $ 106.361. Es decir, que el salario mínimo en julio alcanzó para vivir solo siete días del mes.
El salario mínimo también afecta a los más de 800 mil trabajadores y trabajadoras cooperativistas que perciben un “salario social” que es la mitad del SMVM, es decir que en julio cobraron solo $ 12.960.
La falsa promesa de recomponer los salarios
El ministro Moroni volvió a repetir que "los salarios le van a ganar a la inflación, ya ni siquiera está en discusión, eso va a suceder", en declaraciones a radio Futurock. A pesar de las afirmaciones del funcionario, los salarios quedaron por detrás de la inflación.
En el segundo trimestre de 2021, el salario real promedio de los trabajadores registrados en el sector privado fue un 20,1 % menor al cuarto trimestre de 2015, según un informe de Cifra. Así, se profundizó el deterioro durante el macrismo.
En tanto, el poder de compra del salario mínimo también se desplomó en los últimos años. En 2019, con el gobierno de Cambiemos, el SMVM real quedó 25 % por debajo del nivel que tenía en 2015. Durante el Gobierno de Alberto Fernández, en julio el salario mínimo real se derrumbó un 12,6 % con respecto a diciembre del 2019. En lo que va del año la caída es del 2 %. A pesar de las promesas electorales no se terminó con el ajuste de Macri.
El Gobierno puede conceder algún aumento del salario mínimo de cara a las elecciones, pero seguramente no se recupere todo lo que se perdió en estos años. Es necesaria una recomposición salarial, un salario mínimo igual a la canasta familiar e implementar clausula gatillo que ajuste mes a mes el salario para evitar que pierda frente a la inflación.
Las centrales sindicales tienen que terminar la tregua y convocar a un plan de lucha por las demandas de los trabajadores, las trabajadoras y de los sectores populares.
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