Finalmente, con una semana cumplida de huelga y luego de 12 horas de negociación entre los delegados mineros, representantes de Yamana Gold, el diputado nacional por el Frente de Todos Kaky González y el concejal de Juntos por el Cambio Santiago Aberastain, se llegó a un acuerdo de seis puntos. De esa manera se destrabó el conflicto que puso en vilo a toda la comunidad de Puerto Deseado, temerosa de una posible represión contra las y los trabajadores que estaban firmes en el yacimiento minero Cerro Moro. Dicho conflicto desenmascaró la realidad de ganancias millonarias y condiciones laborales deplorables.
Sábado 23 de julio de 2022 11:43
El conflicto comenzó el 16 de julio, luego de que las y los trabajadores de Cerro Moro votaran en asamblea un paro total. Reclamaban mejoras para transitar en la ruta que los lleva al yacimiento minero, el fin de la precarización laboral, una recomposición salarial acorde al complejo trabajo que desempeñan, seguridad laboral y el respaldo y reconocimiento de los delegados elegidos democráticamente por sus compañeros. El secretario general Jorge Castro del gremio AOMA en Santa Cruz, siempre desconoció enfáticamente a los delegados de Cerro Moro y rápidamente y sin tapujos declaró ilegal la medida de fuerza de las y los trabajadores, en común acuerdo con el Ministro de Trabajo provincial Aldo Camino.
Cerro Moro
El 18 de julio pasado, llegaba a Cerro Moro una dotación de efectivos de la infantería de la Policial Provincial, enviados por el gobierno provincial de Alicia Kirchner. Era latente el clima de represión y según uno de los referentes mineros, Germán Orellana declaraba para La Izquierda Diario, “Nosotros estamos acá, recién se acercó la fuerza policial metiendo miedo a la gente. La primera vez que hicimos medidas de fuerza, éramos más de cien compañeros y la policía se encargó de sacar a la gente, yendo puerta por puerta y casi me llevaron detenido prepoteándome. Es lamentable lo que estamos pasando y creo que los trabajadores somos fundamentales aquí. La empresa se cansó de sacar noticias de que rompía récord de producción, superando las expectativas y hoy aquellos trabajadores que le llenaron los bolsillos están peleando por un reclamo justo”. La militarización policial en el yacimiento minero escalaba a un escándalo por la derechización de los medios de prensa como La Opinión Austral y las declaraciones del secretario general de AOMA, Jorge Castro acusando de violentos a los trabajadores en huelga.
En Puerto Deseado se fue fortaleciendo la solidaridad con la lucha minera y al municipio se fueron acercando trabajadores de la Agrupación Minera 27 de Julio, ATE, del Sindicato de Guincheros y Maquinistas de Grúas Móviles, SOMU, UOCRA, SIAMARA y SUEP. Exigían que la gobernadora Alicia Kirchner viaje a la localidad para solucionar los reclamos. Sin embargo, la gobernadora nunca viajó y más bien ignoró el conflicto laboral, comprobando su complicidad con la empresa Yamana Gold. Mientras tanto, la ministra de trabajo de dicha localidad Steffy Grant, renunciaba a su función superada por la situación. También se sumaron con imágenes de acompañamiento a la lucha minera, trabajadores de Cerro Vanguardia y Cerro Negro. Hubo adhesiones de partidos de izquierda y organizaciones políticas, sociales y gremiales como: PSTU, CEPRODH, PTS, APEL, Partido Obrero, Nuevo MAS, MST, Izquierda Socialista, PRML, Democracia Obrera, MTR Histórico y más firmas, Tribuna Docente, Lista Multicolor en la CTA, entre otras firmas. Mientras pasaban los días, se sumaban los mensajes de solidaridad, rompiendo el cerco mediático, burocrático de AOMA y estaba camino a ser un conflicto de proporciones nacionales.
Para el gobierno provincial y la burocracia sindical de AOMA, era necesario desactivar rápidamente el conflicto y no sume al resto de las y los trabajadores de las otras empresas mineras que repudian la persecución a la lucha minera de Cerro Moro.
El acuerdo firmado el viernes 22 de julio entre los delegados y la empresa Yamana Gold son los siguientes:
1- “La empresa” no despedirá trabajadores por su participación en los hechos que tuvieron lugar en Cerro Moro entre el viernes 15 y jueves 21 del corriente mes.
2- “La empresa” mantendrá vigente las relaciones laborales de aquellos trabajadores que hayan tenido una participación relevante en dichos hechos, mientras tramite la causa en donde se discuta las consecuencias de dicha participación. Durante este plazo, los trabajadores gozarán de una liberación o dispensa de prestación de servicios con goce íntegro de salarios, incluyéndose, en tal sentido, al presentismo y horas de disposición. Culminado el trámite de la causa y habiéndose pronunciado el juez mediante sentencia favorable hacia el trabajador, el mismo deberá ser reincorporado a sus funciones de manera inmediata.
3- “La empresa” accede a que cada trabajadores (no dispensado) retome sus labores en su respectivo roster de forma normal, una vez convocado a tal fin.
4- “La empresa” se compromete a mantener el diálogo con los trabajadores y sus representantes sindicales electos en el yacimiento, siempre que estos, planteen situaciones pertinentes a sus funciones.
5- “La empresa” tendrá en cuenta los días caídos de acuerdo a las leyes vigentes para la liquidación de haberes de los trabajadores involucrados en la “medida ilegal” en la mencionada ut supra.
6- Las partes se comprometen a respetar la presente acta y garantizar la paza social.
Con los puntos mencionados, levantaron la huelga en Cerro Moro y hubo alivio para las y los trabajadores mineros, sus familiares y la comunidad que los acompañaban. Sin embargo no se solucionaron los reclamos más acuciantes como la precarización laboral, la seguridad laboral, las mejoras en la ruta de acceso al yacimiento,la recomposición laboral y el reconocimiento de sus funciones operacionales.
Es sabido que la burocracia sindical de AOMA, buscará las herramientas necesarias para debilitar a los delegados antiburocráticos que encabezaron la lucha en Cerro Moro. La empresa canadiense Yamana Gold, recurrirá a argucias legales contra los trabajadores que luchan y denuncias las malas condiciones laborales y seguir manteniendo sus ganancias millonarias, mientras saquean los recursos de la provincia, generando el daño ambiental. El gobierno provincial de Alicia Kirchner se encargará de garantizar las ventajas que en la provincia tienen las empresas mineras multinacionales, para extraer los minerales y será a costa de que no haya conflictos laborales que perjudiquen la producción minera. De esa manera queda demostrada la triada que existe en Santa Cruz contra las y los trabajadores que luchan por sus reclamos justos y una mejora en sus condiciones de vida.
La lucha de las y los trabajadores de Cerro Moro demostró quienes están del lado de los delegados y sus compañeros, acompañados por otras y otros trabajadores demás emprendimientos mineros, los trabajadores portuarios, docentes, estatales, municipales, la juventud, familiares y el resto de la comunidad. Esa alianza es la que hay que fortalecer con toda la solidaridad posible, para impedir que quienes son elegidos democráticamente por sus compañeros y compañeras, no sean derrotados por las traiciones burocráticas, ni por la complicidad del gobierno provincial con la poderosa Yamana Gold u otra empresa multinacional.
La lucha demostró la verdadera cara del extractivismo en Santa Cruz. Las ganancias millonarias se las llevan las empresas multinacionales como Yamana Gold, no sólo sacando el oro y la plata. Las mejoras laborales apenas alcanzan a un puñado de trabajadores y el resto vive sin llegar a la Canasta Básica Familiar. El gobierno provincial sigue permitiendo el saqueo del suelo, para dejar los daños ambientales.
Ernesto Zippo
Familiar de mineros de Río Turbio, provincia de Santa Cruz.