Ante el atraso del pago de salarios que originó el paro en el Ingenio San Juan de Tucumán, la patronal se comprometió a pagar el 50 % correspondiente a salarios atrasados, entre otras demandas. Ante el incumplimiento, los trabajadores pararon la producción e impiden la salida del azúcar hace 48 hs.
Viernes 10 de octubre de 2014
Continúa el conflicto en el Ingenio San Juan debido a que la patronal no cumplió con el pago y no hubo ninguna respuesta. De esta manera el Ingenio esta paralizado y en estado de asamblea permanente. Brito, el interventor de FOTIA en el sindicato del Ingenio San Juan, llamó a que la empresa cumpla con sus obligaciones de pago sino se profundizarán las medidas de fuerza, ya que esta empresa desde hace tiempo no viene realizando inversiones ni reparaciones y manifestó que si no lo hacen habrá que buscar "nuevos inversores".
El paro es total y los trabajadores participan activamente para sostenerlo. Ayer la patronal intentó pasar el jugo para terminar el proceso pero los obreros lo impidieron. Ante esto, los encargados y el personal jerárquico salieron a presionar y meter miedo, pero no pudieron. Incluso cuando ellos mismos quisieron hacerlo moler fracasaron nuevamente.
En asamblea realizada durante el día de ayer se decidió no producir y que nada funcione hasta que paguen, ya no el 50% ofrecido por la empresa sino el 100% de lo adeudado. De no haber respuestas se continuará con la toma del Ingenio y el control de la estiba obrera (azúcar acumulada que los obreros retienen para garantizar su pago) como así también realizar movilizaciones a Casa de Gobierno o cortes de calles y que tome estado público la preocupante situación del Ingenio San Juan.
Al cierre de la edición, directivos de la empresa anunciaron que "daban por finalizada la zafra" con el fin de doblegar a los trabajadores, quienes aguardarían dentro del Ingenio hasta la reunión anunciada para el día de hoy en la Secretaria de Trabajo.
La Izquierda Diario, en charla con trabajadores del Ingenio, recibió decenas de testimonios que no sólo son reclamos salariales sino que son graves denuncias sobre la condiciones de inseguridad laboral a las que los trabajadores están expuestos diariamente. Denuncian también la no inversión y el vaciamiento llevado adelante por el Grupo Altamiranda.