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Red Internacional
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Conferencia matutina. Sheinbaum anuncia nuevas secretarías y que CFE y Pemex "volverán a ser públicas"

La mañana de este miércoles, la presidenta Sheinbaum anunció la creación de nuevas secretarías y el retorno de Pemex y CFE como empresas públicas.

Miércoles 30 de octubre

La mañana de este miércoles, en su conferencia de prensa la presidenta Sheinbaum firmó un decreto por el cual se pretende crear la Secretaría de las Mujeres, Secretaría de Ciencias, Humanidades, Nacional de Ciencia y Tecnología y la Agencia de Transformación Digital; "también va a estar encargada de toda el área de satélites que estaban dentro de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y transportes", agregó.

Con ello desaparecerían el INMUJERES y el CONAHCYT, ambos actualmente órganos descentralizados de la administración pública. En el caso del CONAHCYT es especialmente preocupante para los miles de becarios que cursan un posgrado o especialidad, pues muchos reciben sus becas tarde (aunque de manera retroactiva) y con la preocupación de que su programa o universidad no sean incluidos dentro de los beneficiados de la beca de esta institución.

Por otro lado, anunció que Pemex y la CFE vuelven, presuntamente, a ser empresas públicas. Se desconoce, empero, lo que esto realmente significa. Ambas instituciones nunca han dejado de ser órganos del gobierno mexicano ni parte de los sectores descentralizados de la administración pública federal. Tampoco queda claro ni se anunció la renacionalización de los sectores que ya fueron privatizados durante los gobiernos neoliberales.

Durante el gobierno de Peña Nieto se decretó que estas empresas eran "empresas productivas del Estado" y no paraestatales, en especial Pemex. Con esto se permitía la coexistencia de las paraestatales con empresas privadas, proceso que no ha cesado en tiempos de la 4T, como se puede ver en la cantidad de gasolineras imperialistas que pululan en el país a pesar de que aún existen gasolineras de Pemex. Con el anuncio de esta mañana, no queda claro el cambio que promueve el gobierno de Sheinbaum.

Por otra parte, la presidenta agregó que "es importante que se sepa que hay un espacio también para la inversión privada. Pemex y CFE regresan a ser empresas públicas, del pueblo de México y se mantiene un espacio para la inversión privada que quedará establecido con orden, con certeza en las leyes secundarias". ¿Entonces significará que las empresas privadas podrán participar en el sector energético con la exploración y explotación hidrocarburífera y el otorgamiento de servicios eléctricos y la creación de plantas de energía privada?

Si bien la 4T ha enfatizado un giro para poner en marcha energías verdes, su política real no la ha reflejado y también han continuado la construcción de proyectos que, aunque impulsan energía renovable, se hace a espaldas de las comunidades, como en su momento denunció el protector del medio ambiente Samir Flores, quien se oponía a la construcción de una planta hidroeléctrica en Huexca.

Aunado a ello, esta mañana el director de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario, Andrés Lajous, anunció que el gobierno de Sheinbaum traerá de nuevo los trenes de pasajeros.

El objeto de la reforma es impulsar el estado los servicios de pasajeros, y esto implica la reducción en el tiempo de recorrido, mayor seguridad mejor calidad de vida, una reducción en la huella de carbono eficiente y la prestación de servicio a comunidades que quedaron aisladas.

Aunque las medidas de la 4T aparentan un retorno al involucramiento del Estado en la economía, tampoco afectan las ganancias de los empresarios y han dejado intacta la infraestructura de los grandes capitalistas, como es el caso de Germán Larrea, beneficiado principal de la privatización de Ferrocarriles Nacionales. En ese sentido, el gobierno no ha anunciado ningún tipo de expropiación (una medida que, además de ser verdaderamente antineoliberal, también sería anticapitalista).

Una maniobra confusa que potencialmente o es gatopardista (en el mejor de los casos) o deja abiertas las puertas a la inversión privada en sectores estratégicos de la economía donde quedaría eliminado el monopolio del Estado.