Daniela Heidenreich, jerarca del penal que disparó con balas de plomo y mató al joven en medio de una salvaje represión contra protestas por falta de atención en plena pandemia, fue declarada “no culpable” por un jurado popular al no encontrar pruebas suficientes de la autoría del crimen.
Valeria Jasper @ValeriaMachluk
Domingo 3 de septiembre de 2023 16:03
En una maratónica y única audiencia que duró 20 horas, la exjefa del Grupo de Admisión y Seguimiento de la Unidad Penal 23 de Florencio Varela, Daniela Heidenreich, fue encontrada “ no culpable” del delito de “homicidio calificado por haber sido cometido por un miembro del servicio penitenciario y mediante el empleo de arma de fuego” contra Federico Rey.
El joven murió el 22 de abril de 2020, como consecuencia del impacto de balas de plomo realizados por Heidenreich, en el marco de una brutal represión lanzada contra una protesta de la población carcelaria ante las condiciones de hacinamiento y desatención de la salud del Gobierno de Axel Kicillof en medio de la pandemia.
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Para el jurado no quedó acreditada la responsabilidad de Heidenreich en la muerte de Rey, a pesar de que las pericias balísticas determinaron que los proyectiles que impactaron en el parietal derecho, la nuca y el tórax son compatibles con el arma de Heindenreich.
Tampoco tomaron en cuenta la teoría de la defensa de la penitenciaria sobre el actuar negligente (no tuvo intenciones de matar) en el marco de la represión a la protesta, ya que “pensó” que disparaba balas de goma; una absoluta falacia que fue desacreditada por varios testigos de la propia fuerza, que sosotuvieron que, en su formación, se les enseña a distinguir ruido y color de cartucho; los mismo con la fuerza cinética que realiza la escopeta cuando descarga balas de plomo, otra característica que fue acreditada tanto por testigos como peritos.
De esta manera, en horas de la madrugada del viernes, el jurado aplicó el beneficio de la duda razonable, descartando la acusación realizada por el fiscal Dino Omar Maistruck como por la Comisión Provincial por la Memoria (CPM), que patrocinó a la familia de la víctima además de presentarse como querellante institucional.
En diálogo con La Izquierda Diario, la abogada Luz Santos Morón, afirmó: “El caso de Rey es un claro ejemplo de la impunidad garantizada por el propio Estado, desde el primer intento de encubrimiento al hacer pasar el asesinato como una pelea entre internos, la investigación deficiente que llevó al banquillo a una sola de las personas involucradas cuando se sabe son más. Y un juez que hizo todo para que sea una condena de impunidad”.