Ante los recientes hechos de violencia contra las instalaciones del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y contra trabajadores sindicalizados, desde el Movimiento de los Trabajadores Socialistas, manifestamos nuestro repudio a estas agresiones y métodos totalmente ajenos a la democracia obrera, para dirimir las diferencias políticas y sindicales en las organizaciones obreras.
Sábado 28 de septiembre de 2019
El movimiento obrero no puede luchar por sus demandas históricas utilizando estos métodos en sus discusiones internas.
Asimismo, rechazamos la injerencia de todos los partidos del régimen, y del Estado, en la vida de estas organizaciones, como sucedió hoy con el SME. Por ello, siempre hemos demandado la independencia política de las organizaciones obreras en relación al Estado.
Ninguna lucha por democratizar los sindicatos puede venir de la mano del gobierno, por ello también rechazamos la intromisión estatal en las organizaciones de los trabajadores.
También consideramos imprescindible conquistar la independencia de los sindicatos de cualquier patronal, nacional o trasnacional. No existe posible alianza entre patrones y trabajadores, que sea benéfica para estos.
Las discusiones política sobre el curso del sindicato y la lucha por la renacionalización de la industria eléctrica y contra la entrega al capital trasnacional deben hacerse desde las bases, en asambleas democráticas, donde todos los trabajadores que quieren ser parte de esta lucha puedan participar y expresar sus posiciones.
En estos momentos en que el gobierno de la Cuarta Transformación busca el control de las organizaciones de trabajadores para contar con su propio aparato sindical, solamente la unidad de las filas obreras basadas en la independencia de clase y la democracia obrera, pueden fortalecer la lucha por la defensa de nuestras conquistas, y sobre todo, evitar la privatización total de la empresa eléctrica.
¡Rechazamos el violento ataque al Sindicato Mexicano de Electricistas!