Grave ataque. Son oficiales los despidos en Arrebeef: hay que luchar para enfrentarlos

Hoy era una jornada muy importante para los trabajadores y las trabajadoras de ArreBeef. Por primera vez en semanas, después de la desmovilización y la confianza que sembró la Federación de que “todo estaría bien”, un importante grupo de trabajadores fue a la puerta del frigorífico a pedir explicaciones de porqué no eran llamados a trabajar, como decían las envenenadas promesas de la Federación.
La respuesta a los trabajadores fue brutal. La empresa notificó a todos los presentes de algo que ya se sabía, a pesar de los intentos de la conducción del sindicato de disimularlo: los despidos.

No es la única medida que tomó la empresa como represalia contra la histórica lucha de esos y esas valientes obreros y obreras de la carne: también procesó judicialmente a cinco trabajadores, con causas penales que parecen sacadas del prontuario de criminales. Para esa empresa explotadora, para esos fiscales serviles y enemigos de los trabajadores, y para los funcionarios de un gobierno que no hizo nada frente a los ataques de la empresa, reclamar salarios y exigir dirigentes democráticos es un crimen inadmisible.

Por si fuera poco con el ataque de la empresa, el dirigente vendido Luis Pérez inició él mismo, con evidente aval de Fantini y la Federación, una causa penal por la toma del sindicato, haciendo gala de las peores tradiciones del sindicalismo pro patronal, antidemocrático y enemigo de los trabajadores.

Fuerza ya se demostró que sobra

Que en el medio de la incertidumbre y de las presiones para desmovilizar, haya ido un grupo de trabajdores a la puerta del frigorífico demuestra que la enorme fuerza que se desarrolló desde la ocupación pacífica de la planta, no se extinguió, no ha sido derrotada. Es retomar esa senda de lucha histórica que se expresó en la toma, en la permanencia en los portones, en haber enfrentado con valor la represión de la Policía, en haberse movilizado de a miles en las calles de Pérez Millán. Esa fuerza está y hay que volver a organizarla.

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Ahora vendrán, por supuesto, los charlatanes que digan que los despidos fueron, justamente, por ir a la puerta del frigorífico. Pero ya sabemos y hay que decir muy claramente que esto no es así. Los despidos ya estaban decididos, y por eso no fue llamado a trabajar un grupo importante de obreros. La parálisis que impuso la Federación fue clave para que la empresa meta miedo, busque dividir y pase a la acción. Ahora la parálisis la rompió la patronal y son los obreros los que están llamados a mostrar las cartas.

Hay que recuperar cada semana, cada día perdido por la inacción que impuso Fantini, buscando juntar la mayor fuerza posible de trabajadores y de trabajadoras. Ahora más que nunca, hay que recuperar y fortalecer la asamblea de trabajadores, decidiendo y votando medidas a mano alzada, con la voz de todos los trabajadores. Hay que superar la separación por sector, haciendo asambleas de todos los trabajadores. Más que nunca hoy no alcanza con el rol de los delegados: cada trabajador debe ser protagonista de lo que viene, en esta pelea contra los despidos y la criminalización.

Es fundamental tomar medidas de lucha, sin titubeos, ni marchas atrás. Acciones para que cada trabajar tenga una tarea, un rol que cumplir. Esto depende de todos. Este lunes hay que volver con todos los trabajadores y con las familias y el pueblo de Pérez Millán a las puertas de la fábrica. Hay que llamar a la solidaridad más activa, no solo en el pueblo, sino a organizaciones de trabajadores de Buenos Aires, a organismos de Derechos Humanos, a agrupaciones de mujeres, a estudiantes de San Nicolás, Ramallo y Rosario. Hay que juntar todo el apoyo posible para dejar en claro que los despidos NO PASARÁN, y para que los compañeros y compañeras que están trabajando, sientan el apoyo para tomar medidas de fuerza adentro.

Como preparatorio a esa acción, hay que aprovechar el encuentro virtual contra los despidos, por trabajo, vivienda y contra la criminalización de la protesta, que convocan trabajadores de Hey Latam en Rosario, junto a vecinas del barrio de Magaldi en esa ciudad. Ese encuentro de coordinación, como el que se realizó el fin de semana en el que participaron trabajadores y trabajadoras del frigorífico, muestra apoyo y puede ayudar a unirse a muchos, muchos otros sectores que están dando una pelea similar a la de ArreBeef. Ahí justamente se votó el apoyo a la pelea por el desprocesamiento de los delegados de ArreBeef, así como el apoyo a un comité de trabajadores del frigorífico contra los despidos y las causas judiciales. Estos encuentros muestran que juntos y unidos, los trabajadores somos más, por eso es muy importante llevar los reclamos de ArreBeef al encuentro del sábado.

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Y el 27 de abril, el día que se reúna el Consejo del Salario, habrá una importante movilización en Capital de sectores en lucha, organizaciones de trabajadores, sindicatos democráticos, que reclamará las respuestas a la pelea por trabajo y salario, reivindicando la unidad entre trabajadores ocupados y desocupados. Es una gran oportunidad, para nacionalizar el conflicto de ArreBeef, que ese día los obreros del frigorífico estén ahí con sus banderas.

Estas pueden ser las primeras medidas de un plan de lucha de los trabajadores de ArreBeef y del pueblo de Pérez Millán contra los despidos y contra las causas judiciales hacia los cinco procesados. La empresa ya mostró sus cartas claramente, por si quedaba alguna duda. La Federación patea en contra: hay que imponerle el apoyo a la lucha. Es hora de que los trabajadores y las trabajadoras den un nuevo paso al frente. Fuerza y apoyo hay.