La medida logra que Víctor Veloso vuelva a trabajar de inmediato, aunque sigue la lucha contra las suspensiones por parte de la empresa. Un gran ejemplo de lucha de la Línea B y un debate con la mayoría de la conducción del sindicato que se negó a apoyar la pelea del trabajador sancionado y discriminado. La fuerza de los trabajadores para luchar está: el sindicato debe ponerse al frente.
Viernes 29 de diciembre de 2017
El contundente paro que realizaron durante más de 24 horas los trabajadores de todos los sectores de la Línea B del subte dejó en claro ante toda la sociedad las mentiras de la empresa Metrovías y la complicidad del Gobierno de la Ciudad que mira para otro lado.
La medida de fuerza contra las sanciones discriminatorias a Víctor Veloso (que partían de no reconocer su derecho a tomarse días para cuidar de su hijo discapacitado como está reconocido en el convenio colectivo), consiguió avances en lo inmediato a pesar de la vergonzosa actitud de la mayoría de la dirección del sindicato que se negó a defender al compañero: de momento se logró alejar las amenazas de despido que hizo la patronal y que el compañero vuelva a trabajar después de casi un mes; luego la de trasladar al compañero a otra línea para aislarlo y avanzar sobre él más adelante; y se avanzó en fortalecer la organización de los trabajadores de la Línea B.
Mientras tanto, la lucha contra las suspensiones continúa por la intransigencia de la empresa. El paro alejó las amenazas más graves pero por la tarde del viernes, en una reunión, Metrovías continuó con nuevas provocaciones: ahora quiere imponer 22 días de suspensión a Veloso. Ante ese planteo la reunión finalizó sin acuerdo y el conflicto continúa por responsabilidad de la empresa.
Vergonzoso: la dirección mayoritaria del sindicato se niega a defender al compañero
La respuesta de los trabajadores de la Línea B fue ejemplar en solidaridad con su compañero, aunque no así la de la dirección mayoritaria del sindicato que dejó solos a los trabajadores de ese sector frente a la empresa y el Gobierno macrista.
Cuando el miércoles Metrovías informó su intención de despedir a Víctor, entre Néstor Etcheto (Secretario Gremial de AGTSyP), y los delegados de la línea B, se acordó realizar un paro al día siguiente, como estaba mandatado por las asambleas previamente realizadas. Etcheto se comprometió también a sacar un comunicado de apoyo a la medida de fuerza.
Sin embargo, el comunicado de apoyo nunca llegó. La mayoría del Secretariado Ejecutivo de AGTSyP conducida por Beto Pianelli y Néstor Segovia inició una conversación con la empresa, que telefónicamente le informó que a cambio de levantar el paro le darían 20 días de suspensión y cambio de línea (lo cual hubiera implicado aislarlo en otro sector dejándolo más expuesto a nuevos ataques). La mayoría de AGTSyP decide en base a esto dejar de respaldar el reclamo contra las sanciones al compañero (¡sin siquiera reclamar!) y se dedicó intensamente durante las siguientes 24 horas a intentar que se levantara el paro, como querían Metrovías y el macrismo, a pesar de que la propuesta de la empresa era durísima. ¡Ni un comunicado de apoyo sacó siquiera!
Por el contrario, los trabajadores de todos los sectores de la Línea B votaron por mayoría ir al paro para defender a su compañero, y lo hicieron de forma contundente hasta lograr que la empresa, que le había dado una precautoria hasta el 3 de enero, retrocediera de la intención de despedir o trasladar a Víctor, y que le devolviera su puesto de trabajo inmediatamente. La B dio un ejemplo de organización haciendo asambleas democráticas en todos los sectores para tomar las decisiones y de coordinación entre los delegados de toda la línea. Incluso así se resolvieron democráticamente diferencias, como aquella con el compañero David Carballo de La Naranja (PO) que en un primer momento estuvo en contra de hacer el paro, incluso cuando el mismo ya estaba decidido y anunciado, lo cual consideramos un error importante.
Mientras el sindicato guardaba silencio, por el contrario en pocas horas llegaron cientos de firmas de apoyo a la lucha y de rechazo a las sanciones discriminatorias contra Veloso. Entre otros, firmaron el petitorio Nora Cortiñas y Mirta Baravalle de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Graciela Rosenblum presidenta de la Liga Argentina por los Derechos del Hombre, María Victoria Moyano del CeProDH e hija de desaparecidos, el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia, la Coordinadora contra la represión policial e institucional (Correpi), la Asociación de ex Detenidos Desaparecidos (AEDD), el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (Ceprodh), Hijos Oeste, la Liga Argentina por los Derechos del Hombre, diputados como Nicolás del Caño y Myriam Bregman, así como cientos de referentes sindicales, estudiantiles, políticos y de derechos humanos.
¡Que la AGTSyP haga una gran campaña contra las sanciones a Veloso y contra todos los ataques!
Finalmente, y con este gran apoyo, la medida de fuerza logró que Víctor vuelva a trabajar, pero no fue suficiente por el momento para dar vuelta las suspensiones debido a la actitud del sindicato de negarle el apoyo a la lucha. La unidad de todos los trabajadores del subte es la que debe rechazar todos los ataques.
Señalemos que esto no es un hecho aislado, sino que frente a un marco de persecución antisindical, sanciones injustificadas, retiros “voluntarios” con aprietes, cambio de horario del servicio, cláusulas de flexibilización, falta de protocolo de seguridad en los talleres, usurpación de la personería por parte de la UTA y otros ataques, la política de la dirección mayoritaria de AGTSyP es constantemente dejar pasar los ataques sin luchar.
El único resultado de esta política de la mayoría del Secretariado Ejecutivo de negociar e ir cediendo conquistas de a poco es que van avanzando Metrovías y el macrismo. Debilitar la organización de los trabajadores solo favorece a la empresa.
La pelea de la Línea B marcó un camino distinto. Se puede organizarse democráticamente en asambleas, con la participación de todos los compañeros, y salir a pelear por todos nuestros derechos. Hay otros compañeros en todas las líneas que también comparten esta perspectiva de lucha y organización, distinta de la mayoría del Secretariado Ejecutivo.
Lo que hace falta es que la conducción mayoritaria del sindicato deje de mirar para otro lado y salga a defender los derechos de todos los compañeros.
Exigimos que la mayoría del Secretariado Ejecutivo convoque de forma urgente a un plenario de delegados para poner en pie una gran campaña para rechazar las suspensiones a Víctor Veloso y los ataques contra todos los compañeros.
Estos días demostraron que la fuerza de los trabajadores para luchar está. Falta que el sindicato se ponga al frente.