En medio de la crisis desencadenada por el gobierno de Milei y Rocca, la patronal de Acindar suspende a los trabajadores. Crece la tensión por la baja en la demanda de hierro para la construcción y las medidas adoptadas por la empresa. Es necesaria la organización de los trabajadores en este escenario de incertidumbre laboral.
Sábado 1ro de junio 10:04
La crisis desatada por el gobierno de Milei y Rocca, no para de hacer estragos en la clase trabajadora. Las 275 mil cuentas sueldos dadas de baja significan cientos de miles de despidos y esa cifra se duplica si contamos el trabajo informal que hace décadas formó raíces en este país. Además, por decisión del gobierno, la obra pública está paralizada, con el consecuente arrastre de toda la industria que se desprende de esa cadena productiva. En el caso de ArcelorMittal Acindar, industria monopólica en el abastecimiento de hierro para la construcción, viene enfrentando una bajada muy pronunciada en la demanda de este material y descarga los costos sobre las espaldas de los trabajadores.
El ataque que viene realizando desde principio de año empezó por los trabajadores contratados, algunos con más de 6 años de antigüedad, que fueron despedidos y siguió por los tercerizados que sufrieron suspensiones. Ahora se le suman los efectivos de planta, ya que se llegó a un acuerdo entre el gremio y la patronal de suspensiones hasta diciembre. El panorama que plantea la empresa es de baja producción prolongada.
El acuerdo de suspensiones contempla remuneraciones que van del 83% el primer tramo, al 75% en los últimos meses, teniendo un tope máximo de 15 días por mes para cada trabajador y siendo rotativas. También contará como base de cálculo del aguinaldo.
Pero a Acindar no le alcanza. Por más que exprese "preocupación por la familia metalúrgica", lanzó una ofensiva con retiros voluntarios queriendo reducir en más del 10% la plantilla. Dejó correr por abajo que "o se van de manera voluntaria o se van de la otra" y advierte que pueden haber despidos como lo viene haciendo en otras plantas del grupo.
Hay que realizar asambleas en cada sector y preparar una asamblea general para que la patronal vea la fuerza organizada de los trabajadores y la decisión de no dejarse quitar derechos.
Todo esto envuelto en la falta de resolución de una paritaria interminable. La UOM de Furlan, nuevamente se metió en el juego de Rocca y retrocedió de toda medida de lucha para refugiarse en las repetidas reuniones que pasan a otras reuniones. Al zar del acero no se lo enfrenta con amenazas en los medios, hay que organizar la fuerza de los siderurgicos y los metalurgicos. El gremio industrial más grande y poderoso del país, tiene una paritaria con el valor de los salarios de noviembre. Si desde la conducción nacional siguen profundizando la división por ramas o por empresas, el final del camino ya es conocido.
En cada crisis hay una oportunidad
"En una crisis, se toma conciencia del peligro pero se reconoce la oportunidad". Esta frase fue dicha por John F. Kennedy hace tiempo y los empresarios la utilizan como mantra para llevar adelante sus políticas. En la mayoría de los casos, como es el actual, podríamos parafrasear y sugerir, "genera la crisis y aprovecha la oportunidad". Es que las patronales están aprovechando este momento para pasar su reforma laboral, su achique de personal y la licuación de los salarios. Es una crisis generada por el propio gobierno y los empresarios. Quieren menos empleo, más precario y barato. No hablamos de números, hablamos de familias que se quedan sin el sustento para sus hijos.
Van a avanzar hasta donde los dejemos que avancen. En 5 meses de Milei, el pueblo trabajador ya demostró su disconformidad y su predisposición a enfrentar estos planes. Con la adhesión masiva a los dos paro generales, la gran marcha en defensa de la educación, y en Villa Constitución con la masiva movilización de los metalúrgicos acompañada por estudiantes, docentes y decenas de trabajadores de otros rubros.
Si la CGT y las CTAs llaman, el país se paraliza.
Hay fuerzas para enfrentar este plan del gobierno de Milei y Rocca, y todas las patronales que están queriendo hacer de la vida de millones de personas, una vida de esclavos.
Frente a estos tiempos de adversidad que corren, es fundamental unirnos y organizarnos contra los ataques patronales. Debemos prepararnos colectivamente con nuestra clase para enfrentar estos desafíos, recordando siempre que juntos somos más fuertes, como nos mostraron los Protagonistas del Villazo y que no estamos solos en esta lucha por nuestros derechos, hoy el pueblo de Misiones que se levanta es el camino.
La Ley Bases bases viene a agravar toda esta situación, por eso es necesario que la CGT y las CTAs llamen a un paro nacional y una gran movilización para el día que se trate en el senado.
Desde la UOM Villa Constitución ya se anunció que se va a participar de la movilización contra esta antiobrera Ley. Hay que prepararla.