941.088 personas se encuentran desocupadas a nivel nacional según las cifras del INE durante el trimestre enero-marzo del 2021. Mientras que, según tasa de desocupación, las mujeres alcanzan un 11,0% y los hombres un 9,9%.
Lunes 3 de mayo de 2021
Los últimos datos entregados por el Instituto Nacional de Estadísticas, dio a conocer que la tasa de desocupación en Chile durante el trimestre enero-marzo del año 2021 alcanzó un 10,4%, lo cual da cuenta de un incremento de 2,2 pp. en 12 meses, principalmente por la reducción de un -6,7% de la fuerza de trabajo, menor a la disminución de -8,9% de los ocupados y un aumento de un 17,4% de los desocupados, principalmente incidido por un aumento de 21,2% de los cesantes.
Mientras tanto, la tasa de desocupación de las mujeres fue de un 11% y la de los hombres de un 9,9%. Mientras estas cifras aumentan en relación al año pasado, fue el mismo gobierno de Piñera el cual se opuso completamente al tercer retiro del 10% enviando un requerimiento al TC el cual finalmente fue rechazado, y tras las diversas manifestaciones a nivel nacional y paralizaciones como la de los portuarios, el gobierno terminó cediendo ante el tercer retiro.
Según la agencia de investigación Tu Influyes, el estudio Data Influye reveló que un 77% de las personas que contestaron la encuesta dijeron que estarían absolutamente dispuestas a retirar de todas formas el retiro aunque quedasen en cero, mientras un 76% de los encuestados manifestaron que ya habían realizado dos retiros anteriores.
Así mismo, al observar por qué las personas necesitan retirar por tercera vez los fondos de AFP, se observa lo siguiente: En primer lugar, un 33% de las personas quiere destinar el retiro de fondos a “pago de deudas generales”, mientras el 21% manifiesta que utilizará el dinero para la compra de “alimentos e insumos básicos”. Este porcentaje aumenta en los estratos socioeconómicos D ($562.000 de ingreso promedio del hogar) y E ($324.000 de ingreso promedio del hogar), donde la compra de alimentos llega a un 31 y 36%, respectivamente.
Todo esto, ha dejado en evidencia la brutalidad que ha resultado para las familias en Chile la llegada de la pandemia tras las nefastas políticas realizadas por el gobierno que no llegan a todo el conjunto de la población y la serie de restricciones para acceder a estas. Así mismo, estas cifras de desempleo, dan cuenta que la única solución que ven millones de familia en Chile es utilizar sus fondos de pensiones para poder sostener una crisis sanitaria donde no se ha realizado ninguna ayuda concreta.
Frente a las medidas de confinamiento es necesario asegurar ingresos que permitan a las familias pobres y trabajadoras recluirse, en este sentido se propone un ingreso universal de emergencia para desempleados, trabajadores informales y dueñas de casa de $600.000.
Por otro lado, apropósito de los altos índices de desempleo y suspensiones, la propuesta es la prohibición inmediata de los despidos y suspensiones, asegurando el pago íntegro del salario que para nosotros no debe ser inferior a $600.000 bajo cualquier circunstancia, incluso en todos los lugares que cierren por cuarentena se debe garantizar ingreso no inferior a $600.000 a cada trabajador. Creación de Comités de Higiene y Seguridad en cada lugar de trabajo para decidir la suspensión de labores no esenciales o readecuación. Derogación de la ley de suspensión del empleo y la paralización de toda actividad no esencial, plan financiado mediante un impuesto de emergencia a las grandes fortunas, a los bancos y las mineras, para que no sea el pueblo trabajador el que siga pagando las consecuencias de la crisis.