Las y los trabajadores del Sindicato N°1 Siglo XXI se manifestaron en paro de brazos caídos fuera del hospital denunciando el daño a la Salud Pública por inundaciones en el centro asistencial, asi como tambien la sobrecarga laboral a la que están sometidos. Empresa responde con amedrentamiento y amenaza de despidos.
Miércoles 19 de junio
En medio de fuertes críticas a la gestión de la concesionaria Sacyr que tiene a cargo el inmueble del Hospital regional de Antofagasta por medio de la operadora Siglo XXI, ante inundaciones que ocurrieron producto de falta de mantención.
Las consecuencias continúan en el centro de referencia más grande de la macro zona norte, sin posibilidad de tomar exámenes ni siquiera en los servicios críticos como urgencias o unidades de cuidados intermedios e intensivos, teniendo que externalizar está prestación a centros privados u otros centros de la ciudad.
Los y las trabajadoras del sindicato N°1 de Siglo XXI se manifestaron pacíficamente de brazos caídos en el frontis del hospital.En la instancia denunciaron no sólo el rol criminal de la concesionaria respecto de la afección directa de atención a usuarios de la región, sino que además el mal trato y sobrecarga laboral al que están expuestos. Sin derecho a sentarse en sectores de mucho trabajo como lavandería, con vigilancia estricta y persecutoria “nos tratan como esclavos, ni siquiera al baño podemos ir tranquilos”, declararon trabajadoras en el lugar.
A la instancia acudieron los representantes de los diversos gremios que se encuentran en el hospital, entre ellos representante de la ASENF declaró “estamos apoyando a las compañeras en relación a las condiciones laborales y como cada dia las están empeorando mas. Sobretodo después de la gran fuga de agua que afectó a nuestro hospital y que las hicieron trabajar sin tener las condiciones”
Una vez terminada la acción las trabajadoras volvieron a sus funciones, sin embargo, se les prohibió el ingreso a sus puestos de trabajo, así como la entrega de sus implementos de trabajo. La gerencia terminó este amedrentamiento discriminatorio y arbitrario con amenazas de despidos por haber realizado la manifestación.
“La concesionaria está desde ayer amedrentando a las trabajadoras que iban a manifestarse, enmarcado en una seguidilla de acciones antisindicales o de desprestigio directo a nuestro sindicato. Hoy intentaron amedrentarme aludiendo a que debía agradecerles por respetar mi identidad de género. Están amenazando a mis compañeras con despidos y no las dejan retomar sus labores. Nos quieren dividir, pero tenemos que fortalecernos.” Declaró Mía Valdivia, presidenta del sindicato N°1 Siglo XXI.