Tras un mes de movilización activa indefinida, trabajadores administrativos de la UPN-Unidad Ajusco el día de ayer hicieron entrega de las instalaciones en presencia de Héctor Garza González funcionario de la SEP, sobre la base de "establecer acuerdos para resolver las demandas del pliego petitorio", lo que deja claro que la rectora Rosa María Torres no tiene ningún interés en resolver las problemáticas de la comunidad universitaria.
Domingo 22 de marzo de 2020
Por más de 8 meses la delegación sindical D-III-47 buscó dialogar con la máxima autoridad de nuestra Unidad-Ajusco para poder generar una ruta de trabajo con la perspectiva de llegar a acuerdos para solucionar sus demandas, esto no sucedió, orillándolos a tomar esta medida de movilización activa indefinida para ser escuchados.
Hasta el último momento se expresó una cerrazón por parte de la Rectora, tuvo que intervenir la SEP para poder generar acuerdos, esta conquista no se puede entender sino consideramos que fue producto de la unidad entre estudiantes, docentes y trabajadores administrativos, esa alianza fue la que logro que las autoridades de la SEP accedieran a dialogar y plantearan propuestas para solucionar.
Hay que mantenernos alertas en que los acuerdos firmados se cumplan, pues de no ser así, no solo quedaría al descubierto el engaño de los funcionarios de la SEP, sino que al ser representantes de la 4T mostrarían la nula intención del actual gobierno de satisfacer las necesidades de las y los trabajadores que sostienen nuestra universidad a pesar del ataque presupuestario.
Recordemos que Rosa María Torres se presentó como un sujeto de cambio, quién desde su llegada prometió escuchar, dialogar y disposición para resolver las necesidades de la comunidad universitaria, cuestión que con hechos se demuestra que fueron solo palabras, buenos propósitos. Así que el conflicto también deja sobre el tintero la necesidad de que la comunidad universitaria evalúe, ante el actuar de la rectora, su permanencia en el cargo, lo que implicaría analizar cómo se asignan estos cargos, su estructura, sus funciones, intereses y la importancia de que la comunidad universitaria pueda elegir democráticamente.
Suspensión ante la crisis sanitaria del COVID-19
Ahora que se atraviesa la crisis sanitaria ocasionada por el coronavirus, la rectora encuentra una justificación para sostener disposición sin condiciones para generar un dialogo público, el problema es que este se solicitó desde hace un mes que inició el conflicto, a lo que fue omisa en un principio y luego dio largas. Sin embargo, aún tiene pendiente explicaciones para la comunidad estudiantil, pues fue ella quién nos negó nuestro derecho a la educación y hasta el momento no ha emitido un plan de recalendarización para que no enfrentemos ningún problema en la recuperación de nuestras clases, los trámites que se suspendieron y ahora concretamente frente a la contingencia sanitaria.
Una cuestión importante en el marco de la lucha de las y los trabajadores administrativos fue comenzar a organizarnos como comunidad estudiantil en la asamblea general, este importante paso, se debe mantener, es importante avanzar unitariamente (aunque pertenezcamos a distintas carreras y tengamos distintos espacios de organización) ante las demandas que tenemos como estudiantes, sin dejar de dialogar con docentes y trabajadores.
De igual forma en la asamblea general extraordinaria que sesionó el día de ayer intercambiamos sobre la importancia de mantenernos alertas ante el desarrollo de la situación de emergencia sanitaria para buscar aportar contra la pandemia, viendo la posibilidad de que nuestra unidad abra sus puertas para hacerle frente a esta crisis sanitaria, moviéndonos como en el sismo con solidaridad desde la juventud.