El martes por la mañana estudiantes de la Facultad de Humanidades de la Universidad de Salta (UNSa) viajamos hasta la localidad de San Pedro, para solidarizarnos con los trabajadores en lucha.
Viernes 8 de diciembre de 2017 17:57
El viaje lo habíamos propuesto el lunes en la reunión de Comisión Directiva del Centro de Estudiantes de Humanidades (CUEH) desde la agrupación Juventud a la Izquierda. Esta iniciativa fue parte de una campaña solidaria que estamos impulsando en el NOA las agrupaciones que somos parte de la Juventud del PTS y Pan y Rosas, para que triunfen los obreros del Ingenio La Esperanza y sus familias, que se enfrentan a más de 300 despidos, una muestra concreta del plan de ataque de conjunto de Mauricio Macri y el gobernador radical Gerardo Morales.
El pueblo nuevamente se levantó
En La Esperanza cumplen funciones 1080 trabajadores. Reconocidos por su temple combativo y la perseverancia para salir adelante, ellos son parte de esa concentración obrera que serpentea hacia el norte por la ruta 34 y que se extiende desde el Ingenio San Isidro, en Campo Santo, pasando por Ledesma, en Gral. Libertador San Martín, hasta llegar a El Tabacal, en Orán.
La semana pasada, 338 de ellos fueron notificados de sus despidos. El gobierno provincial, que es quién elige a la administración del Ingenio, al mismo tiempo que busca que una parte de los trabajadores se vaya, también pretende que para quienes queden haya retrocesos en sus derechos laborales y tengan relaciones de trabajo cada vez peores. Un plan cuyo único fin es maximizar las ganancias patronales y reventar a los trabajadores, atacando su organización y condiciones de vida.
Frente a esto, el martes los trabajadores estuvieron marchando por las calles de San Pedro. Las camisas azules y grises con bandas de color fluorescente coparon más de una cuadra y media, que a su paso recogió aplausos, bocinazos, y enorgulleció a muchos que se asomaban por puertas o ventanas para saludar a la columna que enardecida cantaba “la Esperanza es de los trabajadores, y al que no le gusta, se jode”.
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“Hoy nos manifestamos de forma pacífica porque creemos que el Ingenio desde su quiebra viene siendo sacado adelante por ellos ¿no?, por los trabajadores”, contó una de las tantísimas mujeres que acompañaban la movilización. También dijo que “el pueblo de La Esperanza sabe que es un pueblo de lucha, que tiene que salir siempre a defender el lugar que siempre ha sido de ellos, que es el trabajo”.
Diputados y concejales del PTS-Frente de Izquierda que vienen de realizar una elección histórica en la provincia ya que por primera vez la izquierda conquista bancas para fortalecer la lucha de los sectores más oprimidos, se hicieron presentes. Mezclados con los trabajadores se los podía ver a Alejandro Vilca, Natalia Morales, Julio Mamaní y Miguel López. Que estaban acompañados por la senadora provincial por Mendoza Noelia Barbeito y Christian Castillo, dirigente nacional del PTS.
Morales hace de Jujuy un laboratorio social
La contra reforma laboral del gobierno nacional y empresarios, que avanza con el beneplácito de la CGT, adquiere muchas formas y una de ellas es este ataque directo. De pasar estos despidos se sentaría un grave precedente para todos los ingenios, contra sus trabajadores, las familias azucareras y contra el movimiento obrero en general.
El gobierno del radical Morales no ataca solo, es el mejor aliado de Macri. Con el negocio con la empresa de capitales colombianos Omega Energy está desplegando una prueba piloto de la (contra) reforma laboral, así como con el cierre de cinco carreras terciarias hace unas semanas ensayó la (contra) reforma educativa.
Las y los estudiantes de la UNSa, pero también de todo el país, tenemos que estar junto a los trabajadores, enfrentando el avance en la precarización laboral y todas estas políticas. No sólo porque muchos de nosotros somos parte también de la juventud precarizada que ganamos menos de 10 000 pesos al mes si no porque nuestras familias son las que desde la década del ´90, gobierne quien gobierne, vienen sufriendo los avances en la flexibilización laboral.
Desarrollar una tradición
En San Pedro late una fuerte tradición de combate y resistencia, donde los métodos de lucha y organización de la clase trabajadora yacen intactos. Una tradición que tiene a las mujeres a la cabeza en los momentos más álgidos de cada una de las luchas. No está de más recordar que hace sólo unos meses atrás, once días de paro con cortes de ruta y acampes en la planta, lograron tirar abajo parte del plan flexibilizador del gobierno.
Esta tradición de combate de los trabajadores azucareros y sus familias fue desde el momento cero un estímulo para viajar el martes hasta esa ciudad de ambiente húmedo y pesado donde compartimos y conocimos un poco más sobre la historia del ingenio.
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Volvemos a Salta con muchas más ganas de desarrollar la más amplia solidaridad obrero-estudiantil. Esta primer experiencia junto a los obreros de La Esperanza fue un paso firme y necesario para seguir caminando el enorme objetivo por el que militamos en Juventud a la Izquierda y Pan y Rosas: cambiar de raíz este sistema social y construir un mundo nuevo sin explotados ni explotadores, sin oprimidos ni opresores.
Un río de lava es el que nos separa
Gerardo Morales es parte de un partido patronal, la UCR, y gobierna para los de su clase. Él es muy consciente de eso, sabe bien que gobierna para empresarios y señores feudales modernos, como Blaquier, empresario genocida y propietario del ingenio Ledesma y a quién muchos trabajadores señalan también como uno de los beneficiados con los negociados sobre La Esperanza.
Por eso no es casualidad que la avanzada de Morales sea en primer lugar hacia los trabajadores contratados, los más flexibilizados entre los 900.
Ellos vienen por todo. Por eso, tenemos que estar a la altura para enfrentar no sólo las (contra) reformas laboral, previsional y fiscal, los despidos, tarifazos, inflación, represión y mano dura. En este sentido, es importantísimo que sigamos dando pasos firmes en cada lugar de trabajo y estudio, como por ejemplo hacemos en Humanidades de la UNSa donde venimos de conquistar desde la izquierda 5 secretarías en el CUEH con la iniciativa inédita de un espacio de lucha para las mujeres y sectores LGBT como es la Secretaría de las Mujeres y la Diversidad Sexual.
Así como Gerardo Morales y la UCR, y los demás partidos patronales como el PJ y el FpV, construyen relaciones con empresarios, conspiran y se organizan entre ellos para que los laburantes, mujeres, estudiantes y pueblos originarios paguemos todos los platos rotos, nosotros necesitamos organizarnos y hacerles frente realmente con nuestra propia fuerza. Multiplicarnos para desarrollar una fuerza social que pueda realmente frenar los planes de ajustes y despidos como vimos en el Ingenio La Esperanza o hacia la educación pública como viene ocurriendo en Jujuy, la Ciudad de Buenos Aires o las restricciones del boleto estudiantil y el aumento del boleto en Salta.
Pero tenemos que ir más allá, si queremos “tomar el cielo por asalto” y ponerles un freno a los Morales, Urtubey, Macri que vienen por todo. Si queremos dar vuelta la tortilla para conseguir cada una de nuestras demandas y terminar con este sistema que sólo nos depara explotación y opresión, tenemos que unir nuestra vida junto a la lucha de los trabajadores y los sectores oprimidos, confiando sólo en la fuerza de los de abajo, organizarnos bajo la banderade Santiago Maldonado y Rafael Nahuel, en nuestro propio partido para cambiarlo todo y terminar con la barbarie capitalista.