La organización Global Witness publicó su más reciente informe, donde alerta que en el 2023 al menos 196 personas defensoras del medio ambiente y el territorio fueron asesinadas, siendo Brasil, Colombia y México los países más violentos para la protección ambiental, en México alarma no solo los 18 asesinatos, sino también el alza en desapariciones forzadas.
Axomalli Villanueva @1quiahuitl
Jueves 12 de septiembre 14:39
La organización de Derechos Humanos Global Witness publicó el reporte de la situación de personas defensoras del territorio y el medio ambiente, durante el 2023, revelando que al menos 196 activistas y líderes comunitarios fueron asesinados, siendo Latinoamérica la región más violenta donde se concentraron el 85% de los casos.
El informe advierte que es muy probable que esta cifra no sea el número real de casos, ya que muchas veces no existe denuncia sobre las agresiones hacia los activistas y defensores del territorio, sin embargo, el total de asesinatos cometidos en todo el mundo sigue en aumento, contando al menos 2 106 desde el 2012.
Global Witness advierte que los asesinatos siguen siendo una estrategia habitual para silenciar a las personas defensoras y, sin lugar a duda, la más brutal, pero que suelen producirse paralelamente a otras represalias generalizadas contra el activismo ambiental, como actos de violencia, intimidación, campañas de desprestigio y criminalización organizados por Gobiernos, empresas y otros agentes no estatales. Esta circunstancia se da en todas las regiones del mundo y en casi todos los sectores.
Si bien, Latinoamérica es la región más violenta, los asesinatos se han concentrado principalmente en cuatro países: Brasil con 25 casos, Colombia con 79, Honduras y México con 18 casos respectivamente. De las personas asesinadas en 2023, el 43 % eran indígenas y el 12 % mujeres.
México: la minería, el sector con más asesinatos y desapariciones forzadas
De acuerdo al informe, durante el 2023 en México más del 70% de los asesinatos fueron hacia miembros de comunidades indígenas, al mismo tiempo que se observó que los estados con más registros fueron Jalisco, Colima y Michoacán, siendo este último el más peligroso con 8 asesinatos documentados.
Al mismo tiempo se evidencia que la mayoría de las víctimas fueron opositores a proyectos mineros, con más del 40% de los casos han sido relacionados con este sector, y coincide con la tendencia que se ha venido registrando con otras organizaciones de Derechos Humanos, que vienen denunciando la conflictividad de la mega minería en el país.
A su vez, siguen a la alza las desapariciones forzadas hacia defensores del territorio y activistas ambientales, en 2023, el caso más sonado fue el de Antonio Díaz Valencia y Ricardo Lagunes que fueron desaparecidos en el estado de Michoacán, cuando regresaban de una asamblea en la comunidad de Aquila, ambos eran indígenas nahuas que defendían sus tierras de los proyectos de la empresa Ternium desde 1998, desde su desaparición, tanto familiares, como miembros de sus comunidades han señalado directamente a los directivos de la minera como responsables, sin que a la fecha haya avances en sus casos.
Entre 2012 y 2023, al menos 21 personas defensoras de la tierra y el medioambiente fueron víctimas de desapariciones forzadas o directamente asesinadas tan solo en el estado de Michoacán, siendo uno de los estados más violentos de todo el país para activistas ambientales. Al mismo tiempo se ha evidenciado la relación estrecha entre el crimen organizado y los grandes consorcios mineros.
Durante una asamblea comunitaria en 2022, ambos defensores comunitarios recibieron amenazas por parte de directivos de la empresa Ternium con su desaparición forzada si continuaban con su activismo contra la minera, fue entonces que Antonio Díaz denunció que la empresa pagaba a grupos armados para que atacaran y reprimieran a miembros de la comunidad de Aquila.
En todo México, se han registrado al menos 93 desapariciones forzadas hacia personas defensoras del territorio y el medio ambiente, desde el 1 de diciembre de 2006 y el 1 de agosto de 2023. Más del 40% de ellas aún no han sido encontradas, siendo este tipo de agresiones parte del arsenal mucho mayor que se utiliza para disuadir a las comunidades y activistas de expresar su oposición a los proyectos extractivistas.
Los nombres de los desaparecidos y asesinados en México el año pasado son:
Abisaí Pérez Romero, asesinado el 12 de febrero.
Alejandro Ortiz Vázquez, desaparecido el 20 de abril.
Alfredo Cisneros Madrigal, asesinado el 21 de febrero.
Álvaro Arvizu Aguiñiga, asesinado el 12 de junio.
Antonio Díaz Valencia, desaparecido el 14 de enero
Cuauhtémoc Márquez Fernández, asesinado el 11 de junio.
Eustacio Alcalá Díaz, desaparecido 31 de marzo, su cuerpo fue encontrado entre el 1 y 2 de abril.
Félix Vicente Cruz, asesinado el 12 de abril.
Higinio Trinidad de la Cruz, asesinado el 24 de noviembre.
Isaul Nemesio Zambrano, asesinado el 11 de enero.
Jesús Toral García, asesinado el 23 de octubre.
Juan Medina, asesinado el 13 de abril.
Lorenzo Froylán de la Cruz Ríos, asesinado el 9 de agosto.
Manuel Flores Reyes, asesinado el 3 de julio.
Miguel Estrada Reyes, asesinado el 11 de enero.
Ricardo Arturo Lagunes Gasca, asesinado el 14 de enero.
Rolando Magno Zambrano, asesinado el 11 de enero.
Román Flores Hernández, asesinado el 3 de julio.
