La burocracia sindical acompañó al Presidente boliviano en la ciudad de Oruro, donde festejaron el magro acuerdo salarial y la promulgación de la Ley de Empresas Sociales. En La Paz, sectores independientes marcharon exigiendo un plan de lucha nacional contra la ola de despidos que sacuden a los trabajadores y trabajadoras.
Martes 1ro de mayo de 2018
Mientras que la Central Obrera Boliviana (COB) desplegó su columna en el acto oficialista de Oruro, la Central Obrera Departamental de La Paz (COD) convocó una marcha opositora que, pese a la desmovilización de la principal central y la ausencia de numerosos sindicatos, contó con una nutrida presencia de trabajadores y trabajadoras.
La concentración en La Paz comenzó en la mañana frente a las puertas de la Cervecería Nacional. Sectores independientes a la burocracia sindical ocuparon un tercio de la columna que bajó por la Avenida Montes hasta la Plaza del Estudiante.
Estas organizaciones se dividieron en dos grupos. Por un lado, el magisterio y, por el otro, sindicatos fabriles, aeroportuarios y de la construcción. Esta fragmentación obturó la realización de un gran bloque opositor, que hubiese significado el puntapié inicial para la coordinación de las luchas en curso.
Con cantos contra las conducciones sindicales oficialistas, las y los trabajadores independientes exigieron un plan de lucha nacional que enfrente los despidos en el sector fabril. Mientras tanto, los pocos sindicatos en manos de la burocracia que participaron de la jornada se mostraron apáticos y marcharon rutinariamente.
En este sentido, las organizaciones que manifestaron su independencia política y sindical convocaron un Encuentro de Trabajadores para discutir cómo organizarse en la defensa del salario y el empleo. El mismo se realizará el próximo 17 de mayo en El Alto.
A pesar que fueron quienes lanzaron la convocatoria opositora, los dirigentes de la COD brillaron por su ausencia. Como dice el modismo paceño, “se han estido”.
Fiesta oficialista en la Capital del Folklore
Tras acordar en conjunto un incremento salarial paupérrimo, el presidente Evo Morales y los dirigentes aliados de la COB realizaron un acto en Oruro, intentando desmovilizar a los miles de trabajadores y trabajadoras industriales que viven en el Departamento La Paz. La burocracia y el Gobierno celebraron los índices económicos en alza y la promulgación de la Ley de Empresas Sociales.
Foto: ERBOL
“En este momento estamos casi 4,5% en crecimiento, eso significa que haciendo un esfuerzo el crecimiento económico va ser sobre 4,5%, que garantizará el doble aguinaldo a los distintos sectores sociales”, enfatizó el Jefe de Estado sobre una medida que sólo alcanzará a un tercio de los trabajadores.
En respuesta a las preocupaciones de las cámaras patronales, Morales indicó que las empresas sociales no son para tocar su propiedad: “Si el privado la abandona o está en déficit, ahí los trabajadores se organizan para tener una empresa social”. Lo que omitió mencionar es que, según la ley promulgada, los y las trabajadoras heredarán las deudas empresariales y el Estado no saldrá en su auxilio, como acostumbra a hacerlo cuando se trata de garantizar la estabilidad de las ganancias capitalistas.