A 45 años del golpe genocida. 24 de Marzo: metrodelegados marcharon junto a sectores en lucha y contra los desafueros

Estar en las calles el pasado miércoles era una cita de honor. Todas y todos quienes vienen resistiendo marcharon no solo contra la impunidad y la represión de ayer, sino contra el ajuste que viven hoy: la Comisión de Mujeres de Guernica que luchan por tierra y vivienda, las aeronáuticas y aeronáuticos que enfrentan despidos, trabajadoras y trabajadores de la salud y la educación, entre muchos otros. Hasta allí también fueron las y los subterráneos, con una bandera que decía: “No al desafuero a los Metrodelegados – Línea B”. Ellos saben de luchar y también de ataques patronales.

“Nos estamos expresando en esta jornada de lucha porque tanto yo como otros 4 compañeros delegados estamos viviendo un proceso de desafuero que inició Metrovías”, cuenta Daniel Erviti, delegado de la línea B a La Izquierda Diario. “La empresa quiere romper las burbujas sanitarias. Por eso hicimos asambleas con los compañeros donde se definió llevar adelante una medida de fuerza con paralización del servicio”, explica.

“Metrovías nos tiene acostumbrados. Con el problema del asbesto también está tomando una actitud criminal. Necesitamos el apoyo de todos. La empresa nos quiere chantajear, quieren negociar condiciones laborales a cambio de retroceder con el pedido de desafuero”, cuenta el delegado, quien además es parte de la Agrupación Bordó junto con el diputado por el FIT, Claudio Dellecarbonara.

Las mujeres de Guernica, trabajadores ferroviarios, de Coca Cola, telefónicos, del Parque Centenario, del Garrahan, de AGD-UBA, trabajadores de MadyGraf (fábrica bajo gestión obrera), estudiantes del CEFyL, docentes de Ademys (que expresaron su solidaridad a través de un comunicado) y de SUTEBA Matanza, además de referentes de la izquierda como Myriam Bregman, diputada porteña, y Cristian Castillo, ex diputado provincial, (ambos del PTS en el FIT-U) se sumaron a la campaña de fotos en apoyo a los Metrodelegados.

Victor Rodriguez, delegado de la línea C y miembro de la Agrupación Violeta, también habló con La Izquierda Diario para expresar su apoyo a la compañera y los compañeros atacados y reivindicando a los luchadores y luchadoras desaparecidos por la dictadura.

Recordemos que la empresa del Grupo Roggio es conocida por los numerosos escándalos que tiene en su haber: coimas, otorgamiento trucho de concesión, sobreprecios, obras millonarias e innecesarias, presencia de asbesto que provoca cáncer, accidentes y descarrilamientos. Y también por aumentar las tarifas indiscriminadamente: el último aumento del 43% lleva el viaje en subte a $30 a partir de mayo de 2021.

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Los sindicatos, que deberían estar a la cabeza de los reclamos no solo contra la impunidad de los milicos y civiles cómplices de la dictadura, sino también para impedir que haya despidos y ataques a las condiciones de vida del pueblo, este 24 de marzo llamaron a no movilizar.

En la Ciudad de Larreta (donde se permite que los patrones hagan y deshagan a su antojo, donde la educación y la salud pública se caen a pedazos, donde el subte es una bomba a punto de estallar siempre), los sindicatos opositores (subte, telefónicos, estatales, docentes) no se juegan a marchar, y mucho menos a organizar a las y los trabajadores. Sólo se limitan a hacer declaraciones contra el gobierno porteño. Esta actitud es criminal. Los sindicatos podrían ser poderosas armas para hacer frente a los ataques que sufren quienes viven de su salario.

Justamente el sindicato del subte es ampliamente reconocido por su tradición de lucha y organización, a través de la cual hace algunos años obtuvieron grandes conquistas como la jornada laboral de 6 horas y el pase a planta de trabajadoras y trabajadores tercerizados. Además enfrentaron sistemáticamente a la burocracia podrida de UTA (Unión Tranviarios Aumotor, el sindicato que dirige Roberto Fernández) que hasta les mandaba patotas. Incluso durante la dictadura también tuvieron desaparecidos. ¿Cómo puede ser que no llamen a marchar por los 30000 y por les compañeres de la línea B, perseguidos por la patronal por defender condiciones básicas de seguridad e higiene después de haber tenido que despedir a 7 de sus compañeros por Covid y a uno víctima del asbesto?

Por el contrario, para quienes se vienen organizando contra el ajuste hecho a medida del FMI y los grandes grupos económicos, el salir a las calles y la solidaridad de clase son indispensables para ganar, como quedó demostrado el pasado 24 de marzo. La unidad de las filas obreras y la vanguardia que se encuentra luchando es lo único que puede dar el impulso necesario para darle fuerza a les que luchan. La alianza es con los de abajo, con los explotados y oprimidos. Con la primera línea que viene enfrentando la pandemia y los ataques. Los gobiernos ya dejaron en claro qué intereses defienden: los del FMI, las multinacionales y las mineras contaminantes.