El músico tucumano estaba internado y permanecía en coma inducido en la Clínica Favaloro. A las 08:45 de la mañana de este 24 de diciembre, falleció de un paro cardiorespiratorio.
Lunes 24 de diciembre de 2018 16:37
Jaime Torres falleció este 24 de diciembre a sus 80 años. Reconocido internacionalmente por su talento inigualable, el tucumano trascendió fronteras con su charango y su talento inigualable.
Hijo de madre y padre bolivianos, fue discípulo del maestro Mauro Núñez quien lo alentó en los primeros pasos de su carrera musical.
Jaime Torres tuvo una vasta y reconocida trayectoria a lo largo de toda su vida y ha sabido compartir escenario con grandes músicos como Mercedes Sosa, Horacio Durán (Inti Illimani) o el gran Paco de Lucía, por sólo nombrar algunos. Pero Torres fue tan grande que su música no sólo trascendió países si no también estilos y generaciones. Una pequeña muestra de eso han sido sus actuaciones con la banda de rock Divididos, que lidera Ricardo Mollo.
En los 60 tuvo una destacada participación en la grabación de la Misa Criolla, junto a Ariel Ramírez. En 1974 llegó hasta Alemania junto a su banda, para participar del show de apertura del mundial. En los años 80, grabó la música de la película La deuda interna y recorrió el mundo entero llevando el folclore a todas partes, desde los Estados Unidos hasta Singapur e Indonesia.
Torres supo brillar con su charango en las plazas de su pueblo, en las peñas y festivales, como también en los escenarios más prestigiosos del mundo como la Filarmónica de Berlín, la Sala Octubre en San Petersbugro, el complejo Lincoln Center en Manhattan y por supuesto el majestuoso Teatro Colón de Buenos Aires.
En su larga carrera, el charanguista grabó más de veinte discos y recibió incontables reconocimientos entre los que se encuentran el premio SADAIC (1986), el Estrella de Mar (1992 y 1999), el Lobo de Mar a la Cultura (1997) y el Juan Bautista (1997).
En 2013 Torres fue declarado Ciudadano Ilustre de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. Y, en 2015, la Fundación Konex le otorgó la Mención Especial a la Trayectoria por su invaluable aporte a la música popular argentina.
A sus 80 años y tras permanecer internado y en coma inducido en la Clínica Favaloro, sufrió un paro cardiorespiratorio que marcó el final de sus días. Su música y su recuerdo seguirán vivos, recordándolo como lo que fue: uno de los más grandes referentes del folklore nacional.
