Inflación. Ajuste al bolsillo: las tarifas de luz y gas podrían subir hasta 300% por la baja de subsidios

El ministro de Economía, Luis Caputo, anunció un fuerte ajuste contra el pueblo trabajador entre los que incluyó una reducción de subsidios a los servicios públicos (luz, gas, transporte). Un combo de ajuste contra la clase trabajadora en vez de afectar a la casta como prometió Javier Milei.

¿Cuánto subirán la luz y el gas? La consultora Economía y Energía estimó que los usuarios de ingresos medios, (nivel 3), tendrán un incremento del 327% en electricidad y del 336% en gas, según publicó Alejandro Rebossio en DiarioAr.

En tanto, los hogares de bajos ingresos (nivel 2), sufrirá un aumento del 129% en luz y 168% en gas. El sector de más altos ingresos, que en la actualidad no tiene subsidios, tendrá que pagar subas de entre 125% y 204% más, respectivamente.

Si un hogar de nivel 1 recibió una factura en noviembre por la luz de $10.400 promedio en el área metropolitana, con los aumentos pagaría $23.500. Un hogar de nivel 2 pasaría de pagar $3.900 a $ 9.000. Los usuarios de ingresos medios (nivel 3) la factura de $5.500 subirá a $23.500.

En el caso del gas la factura de un hogar de nivel 1 se incrementará de $4.500 a $13.800; el nivel 2, de $1.800 a $4.800 y el hogar de nivel 3, de $3.100 a $13.800.

Estos aumentos de las facturas destrozarán los salarios, y las jubilaciones ya castigados por la aceleración de la inflación.

Poda de subsidios

El informe de la consultora detalla que “según la meta de reducción del déficit fiscal planteada, los subsidios totales reducirían su incidencia sobre el PBI en 0,7%. De todos modos, aún no hay precisiones respecto de cuánto sería la disminución en energía y cuánto en transporte”.

“En el mismo sentido, tampoco se han realizado anuncios respecto de cuánto aumentarían las tarifas para cada nivel de usuario (ingresos altos, medios y bajos) ni en qué medida se modificará el actual esquema de segmentación tarifaria”, advierte la consultora.

Economía y Energía alertó que la devaluación impactará en las tarifas ya que “dado que el costo de abastecimiento de la energía se encuentra dolarizado, los incrementos tarifarios a aplicarse incorporan el impacto de la última devaluación de la moneda. Si bien los costos de la energía eléctrica y gas natural en 2024 verificarían una reducción respecto del año previo, la depreciación del tipo de cambio y la disminución de los subsidios a los usuarios de ingresos medios y bajos requerirán de sensibles aumentos de tarifas a fin de lograr una significativa disminución de los subsidios energéticos durante 2024”.

El recorte de subsidios es una medida que exige hace tiempo el FMI y el gobierno de Milei cumple. También el gobierno del Frente de Todos avanzó en la segmentación para ir reduciendo subsidios para cumplir con el Fondo.

En agosto de 1989 se sancionó la Ley conocida como la Ley de Reforma del Estado, que fue lo que permitió la privatización de más de 60 empresas estatales, algunas de servicios esenciales como el abastecimiento de electricidad, transporte, agua, y gas. Hoy sufrimos las consecuencias de ese saqueo con las concesiones que ofrecen un mal servicio.

Los servicios públicos tienen que dejar de ser un negocio porque son un derecho esencial del pueblo trabajador. Hay que terminar con el negocio de las privatizadas. Los servicios de electricidad y gas deberían ser nacionalizados en todas sus etapas (producción, transporte y distribución) bajo gestión de los propios trabajadores y con control de usuarios populares para brindar un servicio de calidad, sin cortes. La izquierda propone la nacionalización de los servicios públicos bajo el control de los trabajadores y especialistas interesados en desarrollar verdaderamente planes en función de satisfacer los intereses de las necesidades populares.

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